Las últimas medidas económicas anunciadas por el presidente de Argentina, Javier Milei, no solo ha generado indignación y rechazó en la población y el Congreso de la Nación, sino también comparaciones con las medidas implementadas durante el gobierno del exdictador Alberto Fujimori en los 90 en Perú.
El Decreto de Necesidad y Urgencia, denominado “Bases para la Reconstrucción de la Economía Argentina”, incluye más de 300 cambios (modificaciones y derogaciones) a la legislación argentina con los que Milei espera “terminar con el modelo de la decadencia” y “comenzar a destrabar este andamiaje jurídico institucional opresor que ha desnutrido nuestro país”.
Entre las leyes que fueron derogadas están la Ley de Alquileres, la Ley de Tierras y la Ley que impide la privatización de las empresas públicas. Asimismo, el mandatario argentino adelantó que todas las empresas del Estado pasarán a ser sociedades anónimas con miras a su privatización, que se desregularizará los servicios de internet para permitir que Starlink de Elon Musk ingrese a operar y que se harían los preparativos para vender Aerolíneas Argentinas SA.
El decreto —que según Milei ya entró en vigencia, pese a que el documento no la señala expresamente— también incluye cambios en los sectores de trabajo, importaciones, medicamentos e incluso clubes deportivos. Todas estas iniciativas, de acuerdo con el mandatario argentino, para liberalizar la economía y —casi— anular la intervención del Estado.
“Que Dios bendiga a los argentinos y que las fuerzas del cielo nos acompañen”, fue la frase con la que Javier Milei cerró su primera cadena nacional. Dicha frase trae a la memoria el recordado “Que Dios nos ayude” con el que el exministro Juan Carlos Hurtado Miller anunció el ‘Fujishock’ en 1990.
El ‘Fujishock’, que Fujimori prometió no implementar durante la campaña electoral, consistía en una serie de medidas para sincerar los precios de productos que en ese momento estaban subsidiados por el Estado y que generaba que este un enorme déficit fiscal.
“Es así que la lata de leche evaporada, que hoy costaba 120 en la calle mil intis, costará a partir de mañana 330 mil intis. El kilo de azúcar blanca, que solo se conseguía a 150 mil intis, costará a partir de mañana 300 mil intis. El pan francés, que esta tarde costaba 9000 intis, costará a partir de mañana de 25 mil intis”, anunció Hurtado Miller.
El shock, de acuerdo con expertos, era la única solución para frenar la hiperinflación que, de acuerdo con el Banco Central de Reserva del Perú, para 1990 llegaba a 7.650%. Ello por culpa de las fallidas políticas económicas del primer gobierno del fallecido líder aprista Alan García.
“El abismo hay que saltarlo de un solo salto, no se puede hacer etapas porque uno se cae y esa es la única manera, cortar de raíz (...) Desgraciadamente es muy doloroso, como lo fue; la inflación de agosto (1990), fue casi 400 % y de setiembre 400 % y de ahí comenzó a declinar; pero la inflación que encontramos era 40 % mensual, cada 3 días la inflación era igual a la que tenemos ahora cada año. Por lo tanto, no había otra solución más que esa”, declaró Hurtado Miller a RPP, en 2015.
Otro dato a destacar es que Milei, a comparación de Fujimori, sí prometió ejecutar un shock durante la campaña para combatir la inflación.
“Argentina no necesita un Fujimori”
Los diputados de Unión por la Patria, oposición al Gobierno, reaccionó en contra del DNU, no dudó en comparar al líder argentino con el dictador peruano y acusó a Milei de arrogarse facultades legislativas.
Frente al silencio cómplice de algunos, nuestro bloque va a defender la democracia, la división de poderes y la República. Argentina no necesita un Fujimori. Las medidas anunciadas generarán un enorme perjuicio al pueblo argentino. Vamos a exigir que el Congreso funcione; se reúna la Comisión Bicameral de Tratamiento de los DNU; y se convoque a Extraordinarias. Este DNU tiene que ser rechazado por el Congreso con urgencia”, se lee en el comunicado.
A ellos se le suma lo manifestado por el senador y presidente de la Unión Cívica Radical, Martín Lousteau, quien indicó el DNU es inválido y que Milei debería enviar al Congreso un proyecto “espejo” que se pueda votar por capítulos.
“Así las reformas positivas, que tendrán consenso, podrán sancionarse y las que no sean, evitarse. Toda otra alternativa, ya sea no hacer ninguna reforma o hacer las que no deberíamos, es mala para el presente y el futuro de los argentinos”, apuntó.
También se adhirió a las críticas el diputado Maximiliano Ferraro, presidente de la Coalición Cívica: “El momento histórico, de cambios y de emergencia no da licencia para el vale todo y un pragmatismo desmedido”. No obstante, se mostró de acuerdo con “algunos de esos cambios” solo si estos pasan por el Congreso.
Solo en el Senado, Unión por la Patria y Unión Cívica Radical suman 43 de los 72 escaños, lo que les da la mayoría absoluta. En la Cámara de Diputados se repite el mismo escenario. Aquí los referidos partidos suman 136 de las 257 curules. El DNU de Milei podría ser invalidado por el Congreso.