Año Nuevo: Dina Boluarte, Alberto Fujimori y Juan Reynoso entre las piñatas más buscadas para despedir el 2023

Con el fin de año aproximándose rápidamente, en Perú se observa un incremento en el entusiasmo por celebrar la despedida del 2023. Los ciudadanos no solo invierten en decoración navideña, sino que también se adelantan a las celebraciones de Año Nuevo con la búsqueda de artículos festivos innovadores, por lo que ya están en la búsqueda de muñecos y piñatas que representen a distintos personajes que han estado en el centro de la controversia.

En el marco de las festividades, los comerciantes han dado inicio a la venta de productos que representan a figuras públicas y personajes que han generado mayor rechazo durante el año que termina. Este fenómeno, observado en un recorrido realizado por los puntos de venta para un informe de Trome, refleja el interés del público por adquirir íconos representativos de los sucesos más polémicos para las tradicionales celebraciones.

En esta temporada de fin de año, es habitual que los comerciantes capitalicen las tendencias y acontecimientos que han marcado los últimos 12 meses al ofrecer figuras que han captado la atención de la ciudadanía, ya sea por escándalos, debates políticos o sucesos mediáticos. Estos personajes, convertidos en muñecos y piñatas, se vuelven parte de un ritual que busca, simbólicamente, despedir los aspectos negativos del 2023 y recibir con esperanzas renovadas el año entrante.

De acuerdo a los mismos vendedores, para Trome, los alusivos a Juan Reynoso, Dina Boluarte y Alberto Fujimori son los más vendidos. Estos suelen tener un precio promedio de 17 soles. “El jugador peruano no dura más de 60 minutos”, “Mi primera chamba”, “Cómo te quedó el ojo, Gareca”, “Era Contigo Perú… hasta el 2025”, son algunas de las frases alusivas al exentrenador de la selección nacional. En tanto, las citas alusivas a la mandataria son: “Déjenme hasta el 2026″, “Gobernaré hasta el 2026. Caso cerrado” y “El sueldo no alcanza”.

Sumado a ello, las representaciones del exdictador fujimorista presentan el texto: “Querido pueblo peruano, soy libre”. Estas son acompañadas por billetes de diferentes montos en sus pies, lo que significa el dinero que aún adeuda por reparación. Paolo Hurtado fue otro personaje incluido en las búsquedas de la ciudadanía para amenizar la llegada del 2024.

Mientras algunos consumidores buscan representar a políticos, celebridades o personajes de ficción causantes de titulares durante el año, otros optan por figuras más generales que simbolizan vicios o malas prácticas a dejar atrás. En todo caso, la tradición mantiene su vigencia como una forma de expresión cultural y social, reflejando los sucesos que han marcado el año y las esperanzas de la población de iniciar un ciclo con mejores augurios.

En la parte final de diciembre, jirón Huallaga, ubicado en las proximidades del Mercado Central, se convierte en el principal punto de venta del tradicional cotillón amarillo, así como de piñatas y muñecos característicos de las celebraciones de fin de año. Este lugar se ha establecido como el paraíso de los artículos festivos para los ciudadanos que buscan adornar y ambientar sus fiestas.

Además de los elementos decorativos, es común que los comerciantes ofrezcan otros productos típicos de estas festividades, tales como uvas —que se consumen al son de las 12 campanadas— y ropa interior amarilla. Los clientes buscan en este lugar una experiencia completa de compra, que combine las supersticiones y los deseos de un año venidero más próspero.

Otros de los artículos incluyen gorros, vinchas y lentes con el número 2024, así como globos, collares hawaianos y las tradicionales espigas de la suerte, que son adornadas con billetes de soles y dólares. Esta oferta busca satisfacer la demanda de accesorios para las celebraciones que despiden el 2023 y dan la bienvenida al nuevo año.