Tras asumir la presidencia de Argentina el último domingo, el libertario Javier Milei anunció un ‘shock’ con el fin de evitar una hecatombe en una economía deteriorada y reflejada en una inflación por los aires (140% anual), déficit fiscal (5% del PBI) y pobreza (40%). Ayer, su ministro de Economía, Luis Caputo, anunció un paquete de medidas económicas urgentes que incluye la devaluación del peso y un fuerte recorte de los gastos que tendrá en el corto plazo un impacto macroeconómico y en la vida cotidiana. La mirada está puesta en la estabilización de la economía de la nación rioplatense. De lograrse, ¿habría algún efecto en el mercado peruano?
¿Qué se entiende por un shock?
En palabras de la coordinadora de la Red de Estudios para el Desarrollo (REDES) Mónica Muñoz - Nájar, cada país entiende distinto un ‘shock’ dependiendo de las medidas que se implementan. En el caso de Argentina, hay dos variables que se van a ajustar fuertemente, señala.
“Una, son los subsidios. La cantidad de déficit que tiene la economía es de más de 5 puntos del PBI al año, y eso evidentemente implica un costo fiscal alto para el futuro. A partir del 2024 que se empiezan a vencer un montón de las deudas en Argentina, su pago de la deuda se va a volver inmanejable”, explicó a Infobae Perú.
La economista señala que bajar el gasto público para Argentina significa reducir significativamente subsidios a la electricidad, al agua, la energía, el gas, el petróleo, el transporte. La reducción de estos servicios comenzará regir el 1° de enero, dijo hoy el vocero nacional.
Muñoz - Nájar anticipó en la previa que otro ajuste fuerte estaría vinculado al tipo de cambio, dado las distintas variedades que existen como el tipo de cambio de importador, de exportador, de los bancos, el oficial, entre otros.
En la medida anunciada por el ministro argentino Caputo, el tipo de cambio oficial pasará de valer 400 pesos por dólar a 800 pesos por dólar, lo que implica una mayor devaluación de la moneda nacional.
¿Qué efectos trae un shock?
Según explica a Infobae la economista Mónica Muñoz-Nájar, el primer golpe directo que sentirá la ciudadanía es que subirán los precios. “Habrá un incremento en servicios de agua, electricidad, gasolina y el de transporte que será casi inmediato”, señala.
“En primer momento van a subir precios de los servicios públicos, lo cual va a generar mucho descontento social. Por eso que Milei desde su primer discurso dijo que vamos a pasar por momentos difíciles, pero eso va a tener resultados”, dijo.
Otro ajuste viene por el lado del empleo. Indica que con la eliminación de varios ministerios, habrá gente que se va a quedar sin empleo, debido a que en Argentina se estima que hay un 19% de personas trabajando en el sector público.
“Eso significa que tienes a una gran parte de su población que depende del trabajo público y que cuando cortas parte de esos trabajos públicos, mucha gente se habrá quedado sin empleo”, acotó.
¿Cómo fue el ‘Fujishock’ en Perú a inicios de los años 90?
Según comenta Muñoz Najar, en la década de 1990, el Perú enfrentó una experiencia similar con el shock, donde pasamos de una hiperinflación de cuatro dígitos (7.000%) a una de las inflaciones más bajas de América Latina e incluso del mundo.
“Entonces estamos hablando de reformas que tomaron tiempo, pero que sí tuvieron buenos resultados. Habrá que ver exactamente las medidas, pero yo sí creo que es necesario que Argentina haga un ajuste fuerte”, añadió.
Refiere que Argentina es uno de los países más ricos de Sudamérica. La alta pobreza que tiene 40%, la inflación que tiene 140%, no corresponde a las riquezas que tiene, atribuido básicamente por el mal manejo económico. Entonces sí era necesario hacer un ajuste, sostiene.
El Perú de los años 90 tenía limitaciones extremas en disponibilidad de divisas, pasaba por un proceso de hiperinflación. Antes de pronunciar la recordada frase para la posteridad “Que Dios nos ayude”, Juan Carlos Hurtado Miller, el entonces ministro de Economía, dio a conocer la eliminación de los subsidios a la gasolina y a los alimentos, además de la apertura de los precios y la flexibilización del tipo de cambio.
Con el shock aplicado por el entonces presidente Alberto Fujimori, recién cuatro años más tarde, hubo una apertura financiera y de comercio en el Perú. Los precios estaban más altos que lo que están ahora en Argentina y, cuando la inflación se mantuvo en dos dígitos, vino capital.
El shock tuvo un alto costo social debido a que la pobreza aumentó, aunque la economía empezó a estabilizarse. La hiperinflación pasó de 7,650% en 1990 a 139% en 1991, mientras que el crecimiento del PBI de -4.9% en 1990 subió a 3%.
¿Cuánto puede durar un shock?
Dependerá de qué tan extremas sean las medidas. Muñoz - Nájar dice que lo que los mercados están esperando es mínimo 1 año de ajuste.
“Acá en Perú, el ajuste se dio completo en tres años. En 1995 comenzó a verse los resultados. Podría estar en un rango de 1 a 3 años porque hay algunas cosas que, por ejemplo, la privatización de las empresas públicas demora tiempo, la “dolarización” o control de la deuda del Banco Central”, refirió.
Según señala el economista Washington López, un shock suele durar dos trimestres. “En el segundo trimestre 2024, espera que se vean algunos frutos”, añade.
¿Shock de Milei podría traer algún efecto en Perú?
En principio no debería tener. “Nosotros tenemos relaciones comerciales con Argentina. Ellos nos exportan. Somos importadores de productos argentinos de granos, soya y trigo. Sin embargo, algo que ha venido dándose en últimos años es que la cartera de socios comerciales se ha diversificado bastante”, sostiene la coordinadora de REDES.
“El año pasado que hubo una sequía fuerte en Argentina, nosotros importamos el trigo de Canadá. Entonces tenemos como alternativa y eso es positivo para el Perú. Podría afectarnos pero no sería tan directo, no es un impacto que no podamos manejar”, dijo.
Atracción de capitales globales
Por otro lado, Washington López señala a Infobae que el triunfo de Milei brinda más confianza en los mercados y hace más viable que Argentina salga de “esos números depresivos de hiperinflación”.
“Hoy tiene la bolsa más rentable del mundo. La bolsa es un termómetro porque te anticipa. Argentina es el país más commoditizado y es el que menos exporta metales respecto a Perú y Chile. Tiene más yacimientos de petróleo y gas, y son principales productores de soya”, enfatiza.
Desde el punto de capitalización bursátil, señala que Estados Unidos tiene un 150% del PBI, lo que demuestra que su bolsa de valores es una fortaleza económica. En el caso de Perú y Chile tienen 30% del PBI, donde solo van a la bolsa los empresarios.
“Argentina es el 5% del PBI, una bolsa muy pequeña. Cuando empiece a traer la liquidez, esa bolsa va a explotar. Argentina en los próximos 20 años va a subir 10 veces su valor y brillar en los próximos años”, considera el experto.
Efecto contagio
Aunque afirma que en el corto plazo, “habrá que apretar los dientes”, a largo plazo los frutos se darán. “Milei lo que quiere es que entren los dólares”, refiere. A nivel sociocomercial, el beneficio es que cuando un inversionista vea que Argentina se recupera, se abrirá las puertas para que se reciba toda esa inversión, sea americana, asiática, etc.
“En la bolsa hay un efecto contagio. Cuando empieza a subir una acción, Argentina empecerá a despertar. No somos bien vistos (el Perú) por todo lo que pasó (crisis política). No damos confianza, pero nuestro hermano (Argentina) lo puede dar y cuando despierte, el mundo nos va a ver”, apuntó.