¿Cuál es el sueldo de un diseñador gráfico en el Perú?

En estas últimas décadas, las oportunidades para adentrarse en carreras técnicas y tecnológicas han aumentado, ofreciendo una alternativa a aquellos que buscan habilidades específicas para su desarrollo profesional. Entre estas opciones, el Diseño Gráfico surge como un campo de estudio que no solo garantiza un futuro prometedor.

Esta carrera es la encargada de dar forma y proyección a comunicaciones visuales, abarcando desde superficies bidimensionales hasta medios digitales generados por computadora. Esta disciplina combina elementos como la tipografía, la imagen, el color y los materiales para representar visualmente el lenguaje y las ideas, convirtiéndose en un vehículo de expresión con un alcance incomparable.

Es crucial comprender que el Diseño Gráfico es más que una profesión; constituye una disciplina académica que tiene como misión primordial transmitir mensajes específicos a segmentos sociales determinados, todo ello tras un análisis exhaustivo de objetivos comunicativos.

Un informe revelado por la Asociación Peruana de Diseño Gráfico Publicitario (Asgrap Perú) en 2017 arrojó datos interesantes sobre la distribución laboral de estos profesionales. Se estima que el 62% de los diseñadores gráficos ejercen sus habilidades en empresas de diversos sectores, desempeñándose en áreas de comunicación, marketing, publicidad o diseño propiamente dicho. Por otro lado, el 28% trabaja en estudios de diseño de tamaño pequeño a mediano, mientras que un 10% presta sus servicios de forma independiente.

Según datos suministrados por el Ministerio de Trabajo y plataformas especializadas en empleo como Bumeran, el sueldo promedio para un diseñador gráfico en Perú se sitúa alrededor de los S/2.298 mensuales.

La remuneración percibida, sin embargo, tiende a variar significativamente dependiendo del origen de formación del estudiante. A medida que el plan de estudio se mantiene actualizado, las habilidades adquiridas resultan más valiosas para empresas y clientes.

En el caso de aquellos que optan por trabajar de manera independiente, freelance, sus ingresos estarán ligados a la complejidad de los proyectos en los que estén inmersos, oscilando entre un rango aproximado de S/1.000 a S/3.000.

Datos provenientes de distintas plataformas especializados en empleo ofrecen un panorama más detallado. Computrabajo señala un salario promedio de S/1.213 mensuales para esta posición. Mientras tanto, Indeed diferencia entre un diseñador junior, con un salario promedio de S/1.308, y un diseñador gráfico senior, cuyos ingresos pueden llegar a los S/3.000. Glassdoor, enfocado en la escena laboral de Lima, indica un promedio de S/2.150 para diseñadores gráficos, pero con la posibilidad de alcanzar los S/5.000 para aquellos con mayor experiencia y grados académicos.

La decisión de estudiar Diseño Gráfico se ha vuelto una opción cada vez más atractiva en el ámbito educativo y laboral, impulsada por diversos factores que estimulan la demanda en esta área. El auge del marketing digital desempeñó un papel fundamental.

La creación de una identidad visual sólida es crucial en el mundo empresarial actual. Los diseñadores gráficos son pieza clave en la construcción de logotipos, paletas de colores y elementos visuales que contribuyen al branding y la comunicación visual de una empresa.

La demanda de contenido multimedia, como videos, infografías y presentaciones visuales, ha experimentado un notable incremento. En la industria del entretenimiento, que engloba desde videojuegos hasta producciones cinematográficas y televisivas, la necesidad de estos profesionales es constante. La integración de interfaces de usuario (UI) y la experiencia de usuario (UX) son pilares significativos para desarrollar aplicaciones y sitios web.

El quehacer diario de un diseñador gráfico es diverso y multifacético, adaptándose a las diferentes ramificaciones que abarca esta profesión. Los expertos en este sector, al especializarse en diversas áreas, desempeñan labores específicas que conforman su día a día laboral.

• En primer lugar, el diseñador gráfico establece una relación estrecha con el cliente, siendo relevante la detección precisa de sus necesidades para ofrecer soluciones de comunicación visual. Escuchar y comprender a fondo las inquietudes del cliente es crucial para la creación de imágenes que potencien la identidad de una marca.
• Calendarizar el proceso creativo es una tarea vital. Desde el momento en que recibe el briefing hasta la entrega final del proyecto, el diseñador gráfico debe establecer un calendario que permita visualizar y gestionar el proceso creativo en su totalidad, previniendo posibles imprevistos y minimizando riesgos.
• La creación de bocetos y layouts es una de las labores centrales del diseñador gráfico, siendo su responsabilidad visualizar las ideas y responder con imágenes a las necesidades de comunicación de una marca. Cada proyecto requiere una preparación específica en la presentación de los bocetos al cliente, donde es vital argumentar con seguridad y convicción para transmitir el valor de las propuestas.
• La coordinación con otros profesionales del ámbito gráfico también forma parte de su labor. Desde fotógrafos e ilustradores hasta imprentas y desarrolladores, el diseñador gráfico debe trabajar en equipo, aprovechando el talento de otros profesionales y seleccionando a los colaboradores idóneos para el desarrollo de un proyecto.
• Además de concebir las piezas gráficas, el diseñador gráfico debe supervisar los procesos de producción. Esta labor implica coordinar y controlar simultáneamente el trabajo de diversos profesionales creativos involucrados en un proyecto, asegurando su cohesión y calidad final.
• El manejo de herramientas tecnológicas es esencial en el día a día del diseñador gráfico. El dominio de software como Photoshop, Illustrator e InDesign es indispensable, y en el caso de trabajar en entornos digitales, se requiere conocimiento de herramientas adicionales como DreamWeaver, WordPress o Animate.
• No obstante, no solo se trata de creatividad, sino también de aspectos económicos y administrativos. Presupuestar, facturar y asegurar el cobro de los trabajos son tareas clave para el diseñador gráfico, que debe traducir cada proyecto en términos monetarios y administrativos.

Las personas que se encuentran interesadas en estudiar esta carrera en Perú tienen la opción de elegir diferentes centros de formación, ya que la oferta ha crecido mucho con el pasar del tiempo y se puede elegir desde institutos hasta universidades con sedes en Lima y algunas regiones.

• Universidad de Ciencias y Artes de América Latina (UCAL)
• Instituto San Ignacio de Loyola (ISIL)
• Universidad Tecnológica del Perú (UTP)
• Universidad Privada del Norte (UPN)
• Senati
• Instituto Cibertec
• Idat
• Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP)
• Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas (UPC)
• Universidad César Vallejo
• Instituto Certus

En el mercado laboral actual, las compañías se muestran cada vez más exigentes en la búsqueda de talentos cualificados en el campo del diseño gráfico. Según la reconocida plataforma de empleo Computrabajo, el perfil demandado para estos profesionales integra destrezas técnicas y creativas para transmitir mensajes visuales eficientemente.

• Los aspirantes a estas posiciones deben poseer una base sólida en teoría del color, tipografía y composición, además de un ojo crítico para los detalles que demuestre una actitud proactiva y una minuciosa observación.
• Es crucial para el diseñador mantenerse actualizado acerca de la evolución constante de las tendencias, herramientas innovadoras y técnicas emergentes en el ámbito del diseño. El manejo experto de paquetes de software especializado, como Adobe Photoshop, Illustrator e InDesign, compone una parte importante de las competencias necesarias.
• Un factor distintivo es la habilidad para colaborar armoniosamente en equipos multidisciplinarios y adaptarse a las demandas diversas de los clientes. Estar informado sobre las últimas tendencias y avances tecnológicos en diseño gráfico es igualmente fundamental.
• Finalmente, la capacidad para pensar de manera crítica, abordar de forma inventiva los desafíos de diseño y desarrollar propuestas visuales alineadas con las estrategias de comunicación y marketing, se establece como la piedra angular de un diseñador gráfico competente y actual.