Francis Mendoza, el MVP que pide más apoyo para la Liga Masculina de vóley: “Nos merecemos un poquito más de consideración y respeto”

Campeón con Vamos Peerles y mejor jugador de una liga nacional que duró menos de dos meses. El opuesto peruano narra los diversos problemas que transcurrieron en el torneo, critica el poco apoyo a su rama y opina sobre la gestión de la FPV.

Francis Mendoza fue elegido mejor servicio y MVP de la Liga Nacional de vóley masculino. Crédito: Instagram

Cuando todo comenzó, era todavía muy pequeño, pero sus sueños ya eran bastante grandes. En el trayecto logró cumplirlos, no sin antes hacer algunos sacrificios. De hecho, desde adolescente, Francis Mendoza tuvo que dejar su ciudad natal, Madre de Dios, para continuar con una aventura voleibolística que inició en la imponente amazonía, pero que se tenía que trasladar a la capital. Y ya nada lo pudo frenar.

Con un metro noventa, el opuesto madredino se convirtió en uno de los mejores jugadores de la Liga Nacional masculina y se ha mantenido en un alto nivel año tras año. Este 2023, seguramente, es uno de los que más recordará, porque sin planearlo, logró su segundo título personal y se convirtió en el MVP de un campeonato tan corto como desatendido.

En esta entrevista exclusiva con Infobae Perú, Francis Mendoza hace un breve repaso de su carrera, cómo llegó a ser quien es hoy en Vamos Peerles (el mejor de la Liga) y también narra los diversos problemas que surgieron en el transcurso del campeonato, que no cuenta con tanto apoyo a diferencia del torneo femenino.

- ¿Desde siempre jugaste vóley o cómo fue tu historia de aprendizaje?

Comencé a los 8 años, ya que desde donde vengo, de Madre de Dios (selva) se juega mucho vóley, sobre todo en la casa de mi abuela. Mis primas, tías, primos, vecinas jugaban ahí. Yo tenía 7 u 8 años y veía cómo jugaban. Siempre quise jugar, pero a veces no me dejaban. Pero así aprendí. Después jugué en los torneos escolares allá en mi región y a los 14 años llegué a Lima. .

Francis Mendoza pertenece a la selección peruana de vóley. Crédito: Facebook

- Entonces, al Junior Cesar de los Ríos, tu colegio, llegaste ya sabiendo jugar…

Yo llegué jugando al Junior. Obviamente tenía un cierto nivel, no llegaba en cero. Pero ya Aldo Aliaga (entrenador del colegio) me ayudó bastante en la formación como voleibolista. Me corrigió, me apoyó, me enseñó muchas cosas y ya con el tiempo evolucioné más. Hay muchas personas que dicen que me enseñaron, pero no. En Lima, el primer entrenador que me ayudó bastante fue Aldo. Lo que diga el resto es mentira.

- ¿Cómo ha sido tu experiencia hasta llegar a este punto de tu carrera?

Ha sido difícil, porque salí de Madre de Dios, teniendo 14 años y yo nunca había salido de ahí para ningún lado. Y salir y despedirme de mi mamá -era el último de sus hijos- ha sido difícil. De ahí llegué al Callao, donde viví por cuatro años, luego me mudé y empecé a estar en selección, desde que estaba en cuarto de secundaria. Es una bonita experiencia porque en ese momento tu ilusión es llegar a la selección y representar a tu país. El vóley es lindo cuando tú lo juegas porque quieres, pero si quieres vivir de ello es complicado, porque tristemente aquí en el Perú no es apoyado del todo el voleibol masculino. Entonces te das cuenta que o lo dejas y te dedicas a estudiar y trabajar en otra cosa, o simplemente lo haces por hobby. Gracias a Dios, yo me dediqué también a ser entrenador de vóley. Trabajo y juego. Pero si hubiera estudiado otra carrera, entonces dejaría el vóley.

- ¿Alguna vez pensaste en tirar la toalla?

La verdad, no. Nunca. Así yo sepa lo que va a pasar, siempre me ha gustado estar ahí luchando en todo hasta donde se pueda. Y si no se puede más, pues seguir intentándolo, porque el deporte en la vida es muy corto. Llega una edad límite en la que ya no puedes, por más que tú quieres, ya no es igual y tienes que dejarlo. Prefiero aprovechar esta corta etapa de deporte y después vivir con esos recuerdos.

Francis Mendoza fue clave en el tricampeonato nacional de Vamos Peerles. Crédito: Instagram

- ¿Por qué en un inicio pensabas no jugar en la Liga? ¿Qué pasó?

Lo que pasa es que la temporada pasada jugué en Regatas y hubo unos problemas con Eduardo (Romay). No con él directamente, sino que era incómodo para los dos estar rotando un partido tú, un partido yo. Entonces eso llevó a perder una final, por muchas cosas más. Decidí salirme de Regatas, estuve con la selección en el Panamericano y Sudamericano y al regresar, le dije al club que ya no continuaría, porque ya no estaba de acuerdo en muchas cosas. Me llamaron de Huaraz, me llamó Peerles, y al último también Fla Vóley. Yo dije ‘bueno, creo que no es mi año, me dedicaré a trabajar. Ya al siguiente año jugaré'.

- ¿Cómo así te animaste al final?

Pasaron dos meses desde que llegué del Sudamericano y no entrené ni un día. Trabajé, iba al gimnasio de todas maneras, pero no estaba en ritmo de juego. Ya al último instante, me animé porque en el fondo sí quería jugar, aunque decía que mejor no. Andrés Kouri me estuvo llamando seguido para jugar en Peerles y es complicado decir no cuando por dentro sí quieres. Me ganaron las ganas de querer jugar y decidí hacerlo con Peerles. Empecé a entrenar, literal, una semana antes del comienzo de la Liga, después de dos meses de para. Costó, pero al final salió bien.

- La Liga masculina demoró menos de dos meses, ¿qué opinión tienes sobre ello?

Cuando yo empecé a jugar, aparte que habían como 10 a 12 equipos, había Torneo Apertura y Clausura en la Liga, también en mujeres. Después, el campeonato se redujo a dos meses y hace cuatro años que se juega en solo un mes. Cada vez hay menos apoyo. Antes venía el Cienciano del Cusco, el Inter de Arequipa y dos equipos de provincia y, si no me equivoco, en esa época la Federación les daba alojamiento, comida y esas cosas. Actualmente, no se les da ningún apoyo. Creo que el equipo de Tacna viene por su propia cuenta, no perciben nada. Cada vez el campeonato masculino es peor.

- También hubo reclamos sobre el piso de competencia, ¿qué sucedió?

Hace poco fue la noche blanquiazul (equipo femenino de vóley de Alianza Lima) o no sé qué torneo hubo, nosotros estábamos en plena liga nacional, llegamos al coliseo de Miguel Grau y no había piso oficial. Todos nos miramos las caras sorprendidos porque nadie sabía; nos enteramos por terceras personas que era por ese motivo. Aunque sea, la Federación nos debió avisar. Si hay un partido en el Coliseo Dibós, perfecto, se presta el piso, pero se deben suspender las dos fechas y hacer una reprogramación. No se debe jugar en un cemento, es como jugar en la calle y poner tu malla. Nos merecemos un poquito más de consideración y respeto.

Francis Mendoza y los problemas con el piso de competencia

- ¿Identificaste otros problemas?

En el Miguel Grau se jugaron partidos buenos e interesantes, pero no había público. Los motivos no los sé, tampoco he preguntado. Por lo menos el ingreso económico del masculino es de la taquilla, que tampoco va mucha gente, pero aún así no podían entrar gente al coliseo. Por ejemplo, el primer partido de Peerles versus Regatas fue en La Punta, donde solamente llegas en taxi o en tu carro, por lo que es muy lejos. Sin embargo, el coliseo estaba casi lleno, estaba full. Ese tipo de partidos debieron realizarse en un coliseo grande, no en La Punta. Uno con qué motivación o con qué ganas puede jugar una liga nacional si no te dan nada. Hubo un partido en el que no había ni juez de línea. Nosotros no tenemos ni eso y en torneos de cualquier otro lugar tienen todo eso. El partido nunca empezaba a la hora. Por ejemplo, en un encuentro programado para las 5 pm, a las 5 recién llegaban los encargados a poner la malla, esperaban al árbitro que llegara después de las cinco… No sé si lo hacen por cumplir o no entiendo. No busco culpable, pero un poquito más de respeto al vóley masculino, que hay nivel, pero si apoyamos un poquito más, sería mejor.

- De alguna forma, ¿sientes que los dejan de lado o no les dan la atención suficiente?

Sí, porque el año pasado fuimos a jugar un Panamericano y un Sudamericano sin preparación y sin nada. Con decirte que entrenábamos de 11 a 1 y en la tarde de 2 a 4 y no teníamos dónde descansar. Descansábamos en la colchoneta. Tampoco teníamos alimentación. La gente iba con su plata porque le gusta el deporte.

- ¿Consideras que la Liga masculina debería ser televisada al igual que la femenina?

Siendo sincero, no estaría bien que todos los partidos sean televisados, porque hay mucha diferencia de un equipo a otro. Hubo un partido que acabó 25 a 4. ¿Quién va a querer ver un partido así? Casi nadie. Si quieren que sea televisado, los equipos deberían ser más parejos o en todo caso televisar las semifinales y finales.

- ¿Y qué se necesita para que ya no exista esa diferencia?

Que los clubes tengan un apoyo económico para que puedan contratar jugadores que tengan un poquito más de nivel y que puedan ayudar a llegar hasta las finales o cerca de ahí.

- ¿Qué opinas de la actual gestión de la Federación?

Gino Vega ha entrado en un momento de crisis en la Federación, en su peor momento económico. Él trata de una u otra manera de ayudarnos y hace lo que puede, pero la deuda creo que es un montón de dinero, entonces no puede hacer todo. Yo sé que él quisiera, pero no se puede.

Francis Mendoza y su opinión sobre la actual gestión de la Federación Peruana de Vóley.

- ¿Qué se siente haber logrado un nuevo campeonato?

Esta es la segunda vez que campeono y la verdad es un sentimiento único, porque como te dije, en mi caso, no iba a jugar. Empezar otra vez de cero fue difícil, porque al estar dos meses de para, en los primeros días de entrenamiento no saltaba nada, mis ataques no pasaban y estaba un poco preocupado. Hice una preparación física más fuerte y partido a partido agarré el ritmo. Ya en las finales me agarró un poco mejor para sacar mi mejor nivel.

- ¿Fue difícil conseguir el objetivo?

Es difícil que un objetivo sea fácil. Cuando te cuesta algo y lo logras, es ahí cuando sientes el triunfo. Mi objetivo era ponerme en forma y campeonar. Trabajé para eso y lo logré.

- ¿Qué representó para ti ser reconocido como el mejor jugador de la Liga? ¿Eso en qué posición te pone?

La primera vez que yo recibí ese premio fue cuando tenía 18 años. Yo fui MVP a los 18, 19, 20, 21, 26 y ahora a los 31 años. En los demás torneos, llegué a la final con mi exequipo. Costaba llegar, pero ahora aspiré a campeonar y, si pasaba algo más, que tenga lo que tenga que pasar, pero mi principal objetivo era campeonar y hacer las cosas bien.

- ¿Qué sensación te generó recibir ese premio?

Fue una sensación única, de muchos recuerdos. La verdad es que no lo esperaba, porque yo tenía a Jesús Gómez, el punta de Peerles, como candidato. Es un buen jugador y yo pensé que el MVP se lo iban a dar a él. Pero antes de la premiación, muchos me decían que no, que me lo iban a dar a mí, porque has jugado bien las seminales y finales. Cuando dijeron mi nombre, quedé un poco sorprendido, pero fue un momento muy bonito.

Francis Mendoza y Gino Vegas durante la premiación de la Liga Nacional de vóley masculino. Crédito: FPV

- Como integrante de la selección peruana, ¿en qué aspectos crees que debería mejorar el equipo?

El equipo está bueno, pero la diferencia con los otros países es que ellos salen de gira un mes a otro país. Terminan y van a otro país, y así sucesivamente. Entonces, tienen más roce y más ritmo de juego en conjunto, también porque ellos perciben un sueldo mensual que les permite irse de gira. Acá, si uno se va de gira un mes, te botan del trabajo (aparte del vóley). Es difícil. Quisiéramos irnos de gira dos meses, pero luego vuelves y ¿qué comes? ¿Cómo pagas tus cosas o cómo generas ingresos? He ahí el problema.

- ¿Cuáles son tus próximos objetivos en tu carrera?

En este preciso momento, tengo un objetivo en mente que me lo puse el día de la ceremonia de clausura de la Liga. Todavía no puedo decir qué es, pero lo van a saber más adelante en estas semanas. Espero que sea posible, Dios mediante.

- ¿Tienes algún sueño más por cumplir?

Sí, pero ahorita no lo puedo realizar porque todavía soy muy joven para eso. Me gustaría dirigir a una selección de menores del Perú.

- ¿Y una selección absoluta?

¿Por qué no? Claro que sí, pero ya es paso a paso. Para dirigir una selección de mayores, antes tengo que dirigir una selección de menores o juveniles para acumular experiencia y saber cómo es. Ya me estoy preparando para eso.

Más Noticias