Inició el mes de diciembre: fantasía para los niños y gastos para los adultos. Es, comercialmente hablando, el periodo más importante del año. En Perú, la dinamización de la economía es innegable y los diferentes comerciantes recurren a la campaña navideña para cerrar el año de la mejor manera o, en casos como el actual, recuperar el año ante el mínimo margen de ganancia existente.
Existen ciertas noticias positivas para el trabajador y una de estas es la gratificación. Si bien las fiestas representan un momento en familia, el BCP publicó una lista de recomendaciones para, sin dejar de lado el aspecto familiar, salvaguardar un poco los bolsillos y gastar este ingreso extra de forma criteriosa.
Conceptos básicos: la gratificación
Primero lo primero, ¿qué es la gratificación? Algunas personas hablan de este pago como un beneficio y es cierto que así está estipulado: beneficio social. Sin embargo, se trata de un derecho laboral producto de tu esfuerzo. Los trabajadores en planilla lo reciben dos veces al año (la primera, en el mes de julio; la segunda, en el mes de diciembre) y representa un acumulado de dos sueldos íntegros, respectivamente.
Por lo tanto, en este diciembre, el empleado que haya laborado el semestre completo de julio a diciembre debe recibir un mes de sueldo, el cual cuenta con un plazo hasta el 15 de diciembre para ser depositado. Eso sí, si uno lleva en su centro de trabajo menos de seis meses, basta con que lleve más de un mes para acceder al monto que, lógicamente, será menor dependiendo de cuánto tiempo lleva uno en una empresa.
Aprovechando la segunda gratificación
El BCP advierte que el contar con un monto adicional puede llevar a algunas personas a gastarlo sin una consideración previa. Esto puede resultar perjudicial para las finanzas personales, por lo que te presentamos la lista elaborada por la entidad bancaria.
1. Paga tus deudas
Evita seguir acumulando deudas. Cancela aquellas que estén vencidas o próximas a vencer. La regla es simple: si bien los montos económicos pueden contemplar las necesidades inmediatas, en la medida de lo posible resulta preferible destinarlo al mayor de los beneficios. Por ejemplo, en caso uno tenga la posibilidad de saldar una cuenta con una alta tasa de interés, cortando así una posible cadena de acumulación de deudas.
2. Incrementa tus ahorros
La respuesta es lógica: nunca está de más ahorrar, más aún en un contexto de recesión económica en el cual la demanda de mano de obra cae y con ella, la generación de empleo. Además, el banco recomienda fijarse metas a mediano y largo plazo, lo que puede motivar a uno a regular sus gastos.
3. Compra de forma inteligente
La Navidad es una festividad que puede suponer un gasto considerable, por lo que uno debe ser precavido y aprovechar las ofertas. Procura buscar tiendas con promociones y precios accesibles, revisar las plataformas virtuales y comparar los precios. Además, elabora una estructura de gastos. Cuando uno planifica sus gastos, se fija límites y prioriza el ahorro, luego resulta más sencillo desembolsar un monto que a futuro no generará un problema.
4. Fija prioridades
La gratificación puede resultar un salvavidas para algún gasto concreto que debes efectuar. Por ejemplo, si cuentas con un electrodoméstico en mal estado o necesitas realizar un cambio de tuberías en la casa.
5. Date tus gustos
Una economía planificada y controlada te dará mayor seguridad y comodidad a la hora de gastar. El BCP señala que la revisión de las finanzas personales no significa no invertir en uno mismo ni darse un gusto de vez en cuando. Al final, la Navidad requiere cierto gasto y bien puedes efectuarlo en algo que disfruten tus seres queridos y tú.