El incendio forestal en Sóndor, Arequipa, ha causado la devastación de más de mil hectáreas de territorio, incluyendo áreas de cultivo y bosques, persistiendo por casi dos semanas. La emergencia afecta a residentes y fauna local, con especies en peligro de extinguirse. Son 15 personas afectadas con quemaduras graves y síntomas de intoxicación por el humo.
Roberto Soto Riveros, alcalde de Caravelí, informa que el siniestro avanza y podría sobrepasar los límites hacia Puyocuyusca, en la vecina provincia de Parinacochas, Ayacucho. Cerca de dos mil habitantes de las poblaciones aledañas enfrentan riesgos inminentes debido a la situación.
Alrededor de 60 personas de la municipalidad y voluntarios trabajan sin descanso en los esfuerzos para controlar las llamas, pese a las consecuencias como la exposición a gases tóxicos y quemaduras severas. Este grupo junto con pobladores pernoctan por las noches para vigilar y controlar el avance del fuego. Sin embargo, no hay carpas. “Necesitamos frazadas, alimento, colchones y botiquines médicos”, indicar el gobernador local. La zona afectada se encuentra a 3600 metros de altura, por lo que las temperaturas desciende a bajo cero por la madrugada.
El alcalde Soto Riveros ha realizado un urgente llamado a los Comandos de Operaciones de Emergencia (COER), tanto regional como nacional, solicitando apoyo aéreo a través de avionetas o helicópteros para extinguir el fuego. Asimismo, ha pedido la ayuda de bomberos especializados, personal del Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor) y equipos médicos para atender a los afectados.
La situación actual se hace aún más crítica, ya que la población aún no es evacuada. Y la fauna está expuesta al riesgo, como vicuñas, guanacos, vizcachas y pequeños zorros. También el ganado vacuno y ovino de los comuneros peligra.
Las condiciones difíciles del terreno y la magnitud del siniestro complican las labores de extinguir el fuego. La comunidad espera una respuesta rápida y efectiva de las autoridades para frenar la problemática creciente y prevenir mayores daños al ecosistema y a la población. Los damnificados requieren de asistencia tanto para la subsistencia inmediata como para la posterior recuperación de sus medios de vida.
Acciones que intentaron frenar el avance del fuego en Arequipa
Juan Carlos Burga, jefe del COER Arequipa, anunció que se mantiene una evaluación constante y se están coordinando esfuerzos con otras instituciones para utilizar un helicóptero equipado con el sistema Bambi Bucket para combatir las llamas.
La situación en Arequipa es crítica, dado que el incendio no ha cesado después de varios intentos por apagarlo. Burga señaló que el trabajo en la zona no solo implica el monitoreo, sino también la colaboración con distintas entidades para lograr un ataque aéreo más efectivo contra el fuego. El empleo del Bambi Bucket, una herramienta especializada para la lucha contra incendios forestales, indica la escalada de las medidas tomadas para combatir este siniestro ambiental.
Las evaluaciones y operaciones de control por parte del COER y los equipos de respuesta se intensifican, mientras que las condiciones meteorológicas suponen un desafío adicional. La comunidad y las autoridades esperan que la intervención del helicóptero pueda dar un giro decisivo en los esfuerzos por controlar y eventualmente extinguir el fuego, que ha demostrado ser resistente y peligroso debido a los elementos naturales que lo alimentan.