El empresario Henry Shimabukuro, exasesor del expresidente Pedro Castillo (2021-2022) e investigado por presunto financiamiento ilícito a la campaña de Dina Boluarte, ratificó este jueves que ha entregado al Ministerio Público “todo” el material que implique a la actual jefa de Estado como parte de una carpeta fiscal “reservada”, aunque deslizó que no se ha acogido a la colaboración eficaz.
“Yo no colaboro, solo respondo las preguntas. He entregado todo [información y documentos] en contra de la señora Dina Boluarte, por supuesto. Que la Fiscalía lo tenga guardado es otra cosa. Me ratifico [en que he sido aportante de su campaña]. Ella nunca tenía plata para el pasaje ni la gaseosa, todo lo he puesto yo”, remarcó en una entrevista difundida en RPP.
Shimabukuro, quien fue detenido en la víspera ante un requerimiento de captura por corrupción, se presentó por la mañana en la Comisión de Defensa del Congreso, donde protagonizó un tenso momento con la titular de este grupo parlamentario, Patricia Chirinos (Avanza País).
En la cita, el empresario se acogió al silencio y señaló que “la presidenta de esta comisión está siendo investigada junto a una organización criminal” atribuida a la fiscal general, Patricia Benavides. Horas después de comparecer en el Parlamento acudió a la emisora, donde solo hizo algunas referencias al pliego de preguntas sobre el caso ‘Gabinete en la Sombra’.
Aunque volvió a remarcar su vínculo con Boluarte, no precisó la cifra de aportes que, según su declaración, destinó a esa campaña de 2021. “Nunca he aportado a Pedro Castillo, solo a Boluarte. Yo ya he declarado todos mis aportes, están bancarizados. Todo está en la carpeta fiscal. En su debido momento saldrá a la luz el cálculo”, dijo.
La mandataria ha negado con énfasis estos pagos, una postura que, según Shimabukuro, lo ha dejado sorprendido. “En mi carro iba ella adelante; su hermano Nicanor, atrás. Íbamos de aquí para allá. Viajaba en el avión a mi costado. Íbamos de viaje, yo era el que cubría todos los gastos. Pregúntenle por qué me niega ahora”, continuó.
El exasesor de Castillo estuvo implicado en una investigación relacionada con un supuesto caso de corrupción en torno a la compañía estatal Petroperú y, a finales de marzo, el Ministerio Público lo comprendió en una pesquisa, junto con Boluarte y Castillo, por el presunto financiamiento prohibido de organizaciones políticas, lavado de activos y organización criminal.
Sobre este caso, Shimabukuro ha declarado en reiteradas ocasiones que financió actividades proselitistas de la hoy presidenta durante la carrera electoral de 2021, donde Castillo encabezó la fórmula de Perú Libre. “Cuando se termina la segunda vuelta y ganan las elecciones, ella me ofrece pertenecer a un grupo paralelo de apoyo y soporte para su gestión como ministra de Inclusión Social, [pero] yo lo rechacé”, aseguró.
El empresario ha aparecido en medio de una investigación que ha desvelado una supuesta red de tráfico de influencias en la cúpula fiscal, por lo que ha definido su citación en el Congreso como una cortina de humo. “[Entonces], tengo el derecho de guardar silencio, de declararme en insurgencia y rebeldía ante un poder que no lo considero poder del Estado”, señaló.
La organización, presuntamente encabezada por la titular del Ministerio Público, es acusada de influir “ilícitamente en decisiones de congresistas” para la destitución de los titulares de la Junta Nacional de Justicia, la designación del defensor del pueblo, Josúe Gutiérrez, y la inhabilitación de la ex fiscal general Zoraida Ávalos.
“El día de ayer yo debí haber asistido a la comisión del Congreso, no han querido recibirme, han esperado hasta el día de hoy a la misma hora para que la señora Patricia Benavides tenía una citación en el Congreso. Incluso, el magistrado donde yo estaba detenido se incomodó y dijo ‘yo cumplí con mi trabajo, se lo entrego y ustedes vean’”, zanjó.