Nuevos cuestionamientos se ciernen sobre la fiscal de la Nación, Patricia Benavides, y su círculo de consejería más cercano, luego de que se revelara que la titular del Ministerio Público habría hecho uso del poder que ostenta en el cargo para promover a la pareja de uno de sus asesores de confianza. El asesor en cuestión es el abogado Miguel Girao Isidro, quien se casó en julio de este año con una fiscal que recibió dos promociones por parte de Benavides.
Los hechos, alertados por el periodista Abel Cárdenas de Ojo Público, habría iniciado en julio del 2022, cuando Patricia Benavides promovió a Fiorella Janeth Félix Acosta del cargo de Fiscal Adjunta Provincial Provisional a Fiscal Adjunta Superior Provisional. Esta promoción se hizo dos semanas después de que Miguel Girao Isidro asumiera el cargo de asesor de confianza en el despacho de Patricia Benavides, un 2 de julio del 2022.
Para ese entonces, según lo que ha confirmado dicho medio de investigación, Félix Acosta y Girao Isidro ya mantenían una relación sentimental que se formalizó, en cierta medida, un año después, en julio del 2023; cuando sellaron su vínculo matrimonial por la vía religiosa en una ceremonia que, incluso, contó con el otro asesor de Benavides, Jaime Villanueva, como padrino de bodas de la pareja.
La ratificación de Fiorella Félix Acosta y sus procesos de designación
Desde su promoción en julio del 2022 hasta octubre de este año, la fiscal Fiorella Félix Acosta se desempeñó como Adjunta Superior Provisional gracias a la capacidad de Benavides de poder designar a su conveniencia y preferencia a los fiscales provisionales. Sin embargo, el 23 de octubre la Junta Nacional de Justicia (JNJ) destrabó un proceso de nombramiento que pesaba sobre ella.
Este proceso remite al año 2018, cuando la JNJ suspendió el proceso de nombramiento de Félix como fiscal provincial penal corporativa de Pisco, en Ica, por tratarse de un concurso convocado por el Consejo Nacional de la Magistratura. Este cargo, al que la esposa de Miguel Girao postuló en el 2017, finalmente le fue atribuido hace poco más de un mes.
No obstante; la legisladora no pudo ni siquiera tomar posesión como fiscal Provincial Penal Corporativa de Pisco, pues cuatro días después, el 27 de octubre, Benavides la volvió a nombrar Fiscal Adjunta Superior Provisional del Distrito de Lima Este. Con ello, dispuso el cambio de centro de labores de Ica a la capital. Todo esto, mientras Félix Acosta cumplía sus primeros meses de casada junto al asesor de confianza de la Fiscal de la Nación.
El conflicto de intereses
Como si la remoción de la fiscal que investigaba a su hermana no fuera suficiente, este caso sería una más de las acciones perpetradas por Benavides que se han calificado como un posible conflicto de intereses. Así lo consideró el especialista en derecho penal, Andy Carrión, consideró que “habría cierto conflicto de intereses, porque se supone que ese asesor tiene una incidencia directa en las decisiones que toma la fiscal de la Nación”.
Se podría entender como cierto favorecimiento al círculo cercano de quienes rodean a Patricia Benavides. No habría problema si el asesor no fuera pareja de esta persona, pero si es esta situación, yo creo que sí habría cierto conflicto de intereses”, consideró el especialista para Ojo Público.
El artículo incluso precisó la existencia de un antecedente en este caso, el cual refiere al caso de la exfiscal de la Nación, Zoraida Ávalos, quien fue suspendida por treinta días por haber “designado a la hija de su amiga personal, María Zavala Valladares como fiscal adjunta superior de Piura en el año 2018″. En dicha oportunidad, la JNJ dispuso que este hecho constituye “una prohibición sancionable incluso a nivel potencial y aparente”.