Lima, la bulliciosa y cautivadora capital del Perú—también conocida como la ‘Ciudad de los Reyes’—es indudablemente un lugar fascinante para cualquier visitante. Sin embargo, de vez en cuando, todos necesitamos un respiro de la agitación urbana; y Paracas es el destino perfecto. A cuatro horas de camino al sur, encontrarás todas las bondades de la costa peruana, y un refugio emblemático como es el Hotel Paracas - a Luxury Collection Resort.
Hace 82 años, que este hospedaje abrió sus puertas al público, siendo primero un exclusivo club y luego un hotel. A lo largo del tiempo, se convirtió en punto imperdible para los turistas. Pero el terremoto ocurrido en Pisco en 2007 obligó a que la propiedad se remodelara por completo. Para el 2009, resurgió con el propósito de enorgullecer su pasado.
Situado en la bahía de Paracas, este destino ofrece a sus visitantes una vista panorámica de las playas naturales, dos piscinas temperadas, dos bares, tres restaurantes y spa para aquellas familias que solo buscan desconexión y relajo. Pero también un acercamiento y respeto por las costumbres que ofrece este paraje.
Conociendo la naturaleza de cerca
Una de las experiencias que se ofrecen en el hotel, se llama “Be epicurean”: la recolección de conchas. Esta actividad tiene como propósito relajar a los usuarios con la impresionante vista de la Reserva Nacional de Paracas; y también darle valor a los criaderos de conchas de abanico, de las mejores de Sudamérica y que son exportadas a todo el mundo.
A bordo de la embarcación premium, conocida como “Rayador”, exploran las extensas hectáreas del criadero, teniendo la oportunidad de observar de cerca las conchas de abanico, que brillan en el fondo del mar. Y como todo entra por los ojos y por el estómago, la experiencia finaliza con una degustación de las mismas.
“Estimamos cultivar, como mínimo, 30 toneladas de conchas de abanico. En un año promedio, se puede tener 40 o 50 toneladas. Así de productiva es la Bahía de Paracas. Esta concha es la mejor del Perú, es top en el mundo y mucha gente no lo sabe. Se exporta, principalmente, a Europa. Allá solo una vale 10 euros. Aquí es como caminar en oro”, señaló un representante del criadero Paraíso Paracas.
Con el propósito de dar a conocer lo mejor que ofrece Paracas, el hotel también cuenta con otras actividades como clases magistrales de cocina con productos provenientes de la pesca del día, clases de mixología, degustación ancestral de un menú que rinde homenaje a los productos regionales, degustación de los mejores productos marinos locales, y una experiencia gastronómica en medio del desierto de Paracas.
Propuesta culinaria única
Si tu objetivo es viajar para degustar platos típicos preparados a base de pescado, mariscos y otros insumos frescos de la localidad, el Hotel Paracas cuenta con tres restaurantes y un bar lounge. Cada uno de estos espacios busca dar a conocer un poco sobre la historia de la conocida zona costera.
Mientras que el bar lounge ofrece a sus comensales una vista panorámica al océano y cócteles cuyos nombres reflejan la cultura de la bahía como el Manto Paracas, Monja Paracas y Sarah Hellen; “Chalana”, ubicado en el corazón del muelle, trae los ingredientes del mar directamente hasta tu mesa, siendo el único restaurante sostenible de la ciudad.
En tanto, “Ballestas” presenta una experiencia elegante para aquellos que deseen disfrutar platos locales e internacionales. Hay desde ensaladas de khale o de quinua y gyozas de langostino, bife y cerdo al vapor hasta sofisticados sabores marinos del ceviche caliente al pisco, la causa de conchas o el pulpo a la brasa. Aquí también encontrarás cócteles de autor como el Lady Luxury, el Puka Sunset, el Dios Kon, entre otros.
A su vez, “La Trattoría”, un restaurante informal y familiar sirve cocina auténtica para aquellos que deseen alejarse de lo marino para disfrutar de una tarde o noche de pastas, pizza y postres italianos.
“Mezclo sabores de la costa, sierra y selva. No dejo que mi cocina se centre en un solo lugar o zona específica, sino que sigo innovando mezclando sabores de todo el Perú aplicando distintas técnicas. Eso enriquece la propuesta, porque encuentras sabores y preparaciones diferentes en cada plato”, explicó el chef ejecutivo, Miguel Cabrera, sobre los tres restaurantes del hospedaje.