Las teleconexiones del Niño Global y cómo viene afectando al Perú

Especialista en climatología del Senamhi examina el patrón de lluvias en temporadas estivales pasadas para entender el impacto de eventos climáticos globales y costeros en el país.

Fenómenos climáticos de El Niño y El Niño Global sacudirán territorio nacional, según proyecciones del gobierno peruano.

Perú se encuentra actualmente bajo los efectos del Fenómeno El Niño, un evento climático “global” con teleconexiones que impactan a nivel mundial. Además, se está experimentando la variante conocida como El Niño Costero, cuyas consecuencias se focalizan en la región costera del país. Esta situación ha generado un comportamiento atípico en el patrón de las lluvias durante los veranos pasados.

La experta en Climatología del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología del Perú (Senamhi), Lourdes Menis, difundió información sobre cómo las precipitaciones registradas en los últimos veranos han mostrado una variabilidad influenciada tanto por El Niño global como por El Niño Costero.

Mientras el primero tiene un alcance y efectos más amplios a nivel planetario, el segundo directamente afecta Perú, incidiendo especialmente en la intensidad y distribución de las lluvias en su área costera. Los patrones de estas lluvias son críticos, ya que pueden desencadenar eventos como inundaciones o sequías que afectan tanto el ecosistema como el desarrollo socioeconómico de la región.

Durante el Niño Global, entre enero a marzo hubo gran escasez y deficiencia de lluvias en la costa y sierra peruana. Sobre todo en Cajamarca, Áncash, Lima, Junín, Ayacucho, Arequipa, Moquegua y hasta San Martín. Por el contrario, el Niño Costero, trajo exceso de lluvias para la costa norte, en Tumbes, Piura, Lambayeque, La Libertad, Áncash y Lima.

Lluvias en veranos pasados durante el Niño Global escasearon para la costa peruana. (Lourdes Menis)

El entendimiento de estos fenómenos es clave para implementar medidas de prevención y mitigación. Los expertos en climatología siguen monitoreando la evolución de El Niño y sus manifestaciones locales para poder prever y alertar sobre los posibles escenarios que podrían enfrentar las comunidades en áreas vulnerables. Las perspectivas climáticas y pronósticos meteorológicos son fundamentales para la agricultura, la gestión del agua y la prevención de desastres naturales.

Es importante destacar la implicancia del cambio climático en la frecuencia y severidad de eventos como El Niño y El Niño Costero. Investigaciones sugieren que la alteración de los patrones climáticos a nivel global puede estar detrás de la variabilidad observada en estos fenómenos. Por lo tanto, abordar el cambio climático es también parte crucial en la lucha contra los efectos adversos de El Niño en países como Perú.

Las lluvias fueron intensas y excesivas en la costa norte peruana en veranos pasados durante el fenómeno del Niño Costero .

Lluvias y tormentas eléctricas

Las regiones de San Martín, Ayacucho, Cusco y Puno están experimentando, este 17 de noviembre, tormentas eléctricas intensas, mientras que Amazonas, Junín, Huancavelica, Huánuco y Áncash se enfrentan a fuertes precipitaciones. Estos eventos climáticos, que han estado ocurriendo recientemente, ponen de manifiesto la variabilidad del clima en Perú y la necesidad de adoptar medidas de precaución por parte de los residentes y autoridades locales, según informa la climatóloga Lourdes Menos, con información del Senamhi.

Los fenómenos climáticos actuales, que incluyen tanto tormentas como lluvias, podrían tener un impacto significativo en la vida cotidiana de los habitantes de estas áreas, así como en la infraestructura local. Las descargas eléctricas pueden resultar peligrosas para las personas y los animales, además de poder causar daños a propiedades y redes eléctricas. Por otro lado, las lluvias consistentes podrían provocar incrementos en los niveles de ríos y arroyos, generando posibles inundaciones y deslizamientos de tierra.

Las tormentas eléctricas y las lluvias intensas en estas regiones de Perú requieren la atención y colaboración tanto de ciudadanos como de servicios de emergencia y autoridades de gobierno para gestionar sus efectos y garantizar la seguridad y el bienestar de los afectados por dichas condiciones climáticas.