Durante los últimos meses, los índices de inseguridad ciudadana han ido en aumento en el Perú. La población no solo se ve afectada por incontables robos y asaltos, muchas veces a mano armada, sino que también es víctima de secuestros. Las denuncias sobre este último delito han evidenciado un panorama preocupante para la realidad nacional.
Recientemente, el rapto de la hija de un empresario frigorífico en Comas, de la cual aún no se sabe ningún detalle, se sumó a los otros que se volvieron mediáticos en nuestro país, entre los que destaca el caso del comerciante de La Libertad y de dos hombres que fueron retenidos contra su voluntad en Ucayali.
Para el general Víctor Zanabria Angulo, jefe de la Dirección de Orden y Seguridad de la Policía Nacional del Perú (PNP), estas situaciones muchas veces se originan porque alguien del entorno cercano ha facilitado información sobre las rutinas de sus víctimas. “Esto es lo que va a permitir que nosotros podamos establecer y descubrir cómo es que se ha llevado a cabo el hecho criminal. Y también poder rescatar a esta persona”, precisó para Latina.
Aumentan secuestros en el Perú
De acuerdo a información de la Fiscalía, en lo que va del 2023, se han recibido 2.991 denunciar por secuestro. La entidad informó que este delito ha experimentado un crecimiento exponencial desde el 2020, cuando —pese al estado de emergencia por la pandemia de la COVID-19— se contabilizaron 1.698 acusaciones. Dicha tendencia se mantuvo al alza en el 2021 y 2022, con 2.860 y 3.398, respectivamente.
Estos índices han llevado a que la actividad criminal sea el tercer hecho delictivo más reportado en todo el Perú. Los más afectados son los empresarios y pequeños emprendedores, además de sus familiares y seres queridos, quienes se encuentran expuestos a raptos a cambio de fuertes sumas económicas.
“Esperemos que las acciones que estamos ejecutando nos lleven a ser mucho más efectivos en menos tiempo, sobre todo para evitar el sufrimiento familiar que conlleva esta privación indebida de la libertad. Ojalá que podamos resolverlo y aplicar todo el peso de la ley a estas personas, que les den cadena perpetua”, replicó Zanabria para Latina.
Este año, la Policía Nacional del Perú (PNP) informó en Lima se registraron 99 casos, en Arequipa 25 y en Lambayeque 24. Finalmente, reveló que Cusco, Cajamarca, Piura, Tacna y Ayacucho reportaron cada uno cinco casos.
Secuestro frustrado en San Miguel
Hace unas semanas, las cámaras de videovigilancia captaron el momento en que un joven de 21 años iba a ser secuestrado en las calles del distrito de San Miguel. Sin embargo, gracias a la intervención de un agente policial que se encontraba en el lugar, este crimen pudo ser frustrado.
El efectivo siguió el auto en el que era trasladada la víctima y disparó en repetidas ocasiones contra dicha unidad. No fue hasta llegar a la avenida Costanera que la historia tuvo el desenlace esperado. Esto último debido a que el ciudadano pudo reaccionar a tiempo y se arrojó a la pista para escapar de su captor.
Secuestro y liberación del empresario trujillano
El día lunes 23 de octubre, Iván Díaz Garrido, un empresario de 57 años, fue objeto de un secuestro en la cuadra 12 de la avenida Perú, situada en la ciudad de Trujillo. Individuos, que llevaban chalecos que aparentaban ser de la Dirección de Investigación Criminal (Dirincri) de la Policía Nacional del Perú (PNP), ingresaron de manera violenta al establecimiento de la víctima y lo forzaron a subir a un vehículo, donde fue llevado.
Al final, en las primeras horas del 3 de noviembre fue puesto en libertad. Los secuestradores habían demandado un rescate de USD 200 mil en un plazo de 24 horas; sin embargo, lo dejaron ir una semana y tres días más tarde. Al momento de ser liberado, mostraba signos de haber sido torturado.