Marcello Motta, vocalista de Amén, y su dura opinión sobre el reggaetón: “No es música, la gente se vuelve imbécil”

El reggaetón se ha convertido, indudablemente, en uno de los géneros musicales favoritos de los peruanos. No por nada artistas como Bad Bunny, Karol G y Daddy Yankee arrasaron en entradas cuando se presentaron en nuestro país. Sin embargo, para el vocalista de la destacada banda Amén, Marcello Motta, el género urbano no debería ser considerado “música” por distintas razones.

“El reggaetón es una inducción con una cantidad agresiva de decibeles utilizando un ritmo. No lo considero, en su totalidad, música. La música viene de las musas y el reggaetón viene para que lo compres y malintencionado tus acciones. No digo que sea primitivo, pero está dirigido para que tu cabeza se reduzca, para que la gente deje de pensar”, comentó en el espacio digital ‘La Lengua’.

Bajo esa premisa, Marcello Motta añadió que estamos viviendo en una etapa de la historia en la que existe “una dirección extra para que la gente no tenga poder su mente”.

Finalmente, Motta resaltó que “si una música me llega a la cabeza, me hace pensar e imaginar. Si una música me llega al corazón, me hace soñar y pensar en los que amo. Pero si una música me llega al pinch***, la cambio, brother”.

El 2002 fue un año duro para Amén como banda, pues varios de sus integrantes decidieron dar un paso al costado para realizar sus proyectos personales. Según Marcello Motta, la agrupación no se disolvió porque él así lo quiso, sino por un problema con su entonces manager.

“En esa época estábamos tratando de avanzar y nos cruzamos con algunos personajes que se encargan de dirigir las bandas. No hubo buena dirección porque no fueron totalmente honestos con nosotros. Esta persona se llevó las cintas de nuestro trabajo, y retrasó la salida del disco. Hubo una fricción, luego llegó la separación. Realmente, necesitaba un respiro”, señaló a El Comercio.

El nombre de la banda Amén fue creado por Marcello Motta, vocalista y guitarrista. Sucede que en 1995, la agrupación estaba a puertas de dar su primer concierto en Ventanilla y el músico soñó que el público coreaba la palabra “Amén”.

“Fue justamente para un concurso en el que íbamos a tocar y no teníamos nombre. Conversamos toda la noche, pero entre broma y broma, quedamos en nada. Al día siguiente cuando me desperté recordé que en mi sueño mientras cantábamos la gente gritaba Amén. Me pareció raro, pero como es una palabra que se utiliza para un buen final, no solamente religioso, se lo comenté a los chicos y Steve me dijo, ‘ya, que sea por mientras’. Y se quedó”, reconoció Motta.