Posición firme en rechazo a la actividad minera para proteger la Amazonía peruana. El 25 de octubre, durante el foro “Corrupción y Cambio Climático”, organizado por la Red Anticorrupción Forestal de Loreto -iniciativa impulsada por el Programa de Gobernanza Ambiental de Proética-, la Dirección Regional de Energía y Minas de Loreto (DREM) anunció que no ofrecerán ninguna autorización de exploración minera en la cuenca del Nanay.
El río que abastece de agua a 160 mil personas que habitan la capital loretana y, a la vez, donde se han contabilizado solo este año más de 120 dragas de minería ilegal, de acuerdo a un informe de la Sociedad Peruana de Derecho Ambiental (SPDA).
Una realidad que preocupa de manera constante a los ciudadanos, quienes se han organizado en varias oportunidades para salir a protestar a las calles de la ciudad de Iquitos y exigir el cese de la actividad extractiva, sobre todo, luego que se hiciera público el otorgamiento de una concesión minera al señor Ricardo Moreno Valderrama para realizar la extracción de oro.
Más autoridades respaldan posición antiminera
La concesión minera, con un área de 1.000 hectáreas, fue otorgada por el Instituto Geológico, Minero y Metalúrgico (Ingemmet) el pasado 31 de agosto.
Sin embargo, el derecho a la exploración y explotación de los recursos minerales concedidos ha sido rechazado por la DREM de Loreto, cuya representante principal, Melissa Sotelo Pérez, ha comunicado que, desde la institución, no otorgarán “ningún permiso de extracción porque eso alteraría el ecosistema, el bienestar y la salud de la población”.
La posición ha sido respaldada por el gerente regional del Ambiente de Loreto, Roberto Ruiz Coba, quien ha precisado que la concesión minera no sería viable por amenazar la flora y fauna del ecosistema en situación vulnerable y estar ubicado en una zona de “muy alto riesgo”. Por tal motivo, reafirmó que el Gorel tampoco entregará autorización.
“Esta concesión vulnera muchas ordenanzas regionales. Y nuestra posición (como Gorel) es la de no aceptar minería en esta zona altamente vulnerable”, declaró el responsable de la Gerencia Regional del Ambiente (GRAM) de Loreto.
Datem del Marañón en la mira de mineros
Por otro lado, durante el evento, el exviceministro de Gestión Ambiental del Minam y actual director de la iniciativa Unidos por los Bosques de la Fundación para la Conservación y el Desarrollo Sostenible (FCDS Perú), Mariano Castro, informó que, al igual que el río Nanay, el río Marañón también se encuentra en peligro.
Esto debido a que, hasta octubre de 2023, se ha dado a conocer que existen 59 títulos mineros en la provincia del Datem del Marañón. De dicha se sabe que al menos un 64 % se superponen de manera total o parcial a dicho afluente en un tramo de aproximadamente 90 km de su curso.
“La legislación minera, de recursos hídricos y la ambiental, así como la información científica clara y contundentemente, señalan que no debe hacerse minería en cuerpos de agua. La minería en ríos y en áreas naturales protegidas son ilegales y muy dañinas”, recordó el representante de FCDS Perú.
Cabe recordar que, según datos de la SPDA, el Nanay es el río con mayor presencia de minería en Loreto. Sin embargo, en todo el departamento se reportan alrededor de 11 ríos afectados. Dentro de la lista de cuencas más impactadas por la actividad ilegal están Cotuhe, Curaray, Marañón, Mazán, Napo, Patayacu, Pintuyacu, Putumayo, Tigre y Yaguas.