Luego de la pandemia, el sector construcción experimentó la baja más pronunciada de la última década, advirtió Capeco

Este jueves 26 de octubre, la Cámara Peruana de la Construcción (Capeco) presentó el informe del sector #70. Durante la conferencia de prensa, Guido Valdivia, director del gremio, brindó detalles de la grave situación por la que atraviesa la industria, la cual, entre enero y agosto de este año, cayó 9.0 %.

“CAPECO había pronosticado en el Informe anterior, una disminución de 7.9 % en la producción sectorial, a consecuencia de una baja de 10.1 % en el consumo de cemento. Es decir, apenas cinco décimas más que el resultado real) y de 2.2 % en el avance de obra pública, que terminó contrayéndose 10.8 %”, explicó Valdivia.

Incluso, se reveló que, el sector experimentó la performance más negativa en los últimos doce años —después del 33.4% registrado entre enero y agosto de 2020 durante la etapa más crítica de la pandemia del coronavirus—, posicionándose también como la segunda actividad productiva con mayor caída transcurridos cuatro bimestres del 2023.

“Las cifras preliminares de CAPECO muestran que el producto bruto de la construcción volverá a caer en setiembre, y lo hará a una tasa de 10.4 %, a causa de una merma de 12.1 % en el consumo de cemento (su peor performance desde mayo y el decimotercer mes consecutivo en rojo) y de 6.5 % en el avance de obra pública”, anunció Valdivia.

En ese sentido, explicaron que los desempeños en negativo tienen que ver con el impacto en los sectores de vivienda, minería, empleo, precios de la construcción e informalidad.

Aunque la cartera liderada por el ministro Alex Contreras propuso la asignación de un crédito suplementario por un monto cercano a los 5 mil 500 millones de soles y la habilitación de unos 1,400 millones de soles como consecuencia de modificaciones a diversas partidas, para el gremio ello es insuficiente para salir de la recesión.

“Solo la mitad del monto comprometido corresponde a inversiones y cerca de un tercio de la inversión en obras y equipamiento estará a cargo de los gobiernos regionales y locales que, como ya se sabe tienen notorias limitaciones para la selección apropiada de ejecutores y la gestión de los proyectos”, explicó Valdivia.

Asimismo, mencionó que las expectativas del titular del MEF, quien apunta a que la reactivación se dará desde el primer trimestre del 2024, pueden verse frustradas por el Fenómeno El Niño y la escala del conflicto bélico en el oriente.

Ello porque el hecho climatológico podría “ralentizar el nivel de operaciones en varios sectores productivos” y la guerra “podría implicar un nuevo incremento de los precios de las commodities y, como consecuencia, un aumento de la inflación, así como tasas de interés”.

Con el fin de evitar el mayor perjuicio posible, la Cámara Peruana de la Construcción (Capeco) sugiere modificaciones puntuales en los reglamentos de contratación pública, con el fin de “reducir la corrupción, permitir la selección de mejores de consultores y contratistas, y reducir el riesgo de paralización de obras”.

Además, una mayor actuación por parte de la Contraloría y del Organismo Supervisor de las Contrataciones del Estado (Osce) para la reanudación del mayor número de obras actualmente paralizadas, y un plan integral para la atención oportuna de los fenómenos climatológicos, a fin de efectuar un proceso de reconstrucción eficiente que permita contar con infraestructuras seguras y durables, que estén preparadas permanentemente para enfrentar este tipo de eventos.

Finalmente, corregir las medidas implementadas en los últimos meses que están afectando al mercado inmobiliario residencial, en particular en el segmento de la vivienda social, el cual ha pasado de un desempeño récord en el 2022 a una caída drástica en el presente año.