En un nuevo reporte sobre la situación crediticia del Perú, la agencia internacional calificadora de riesgo, Fitch, mantuvo el rating soberano BBB con perspectiva negativa para el país en medio de una recesión recién confirmada por el Gobierno.
Según el informe, el panorama negativo refleja un alto nivel de incertidumbre política y un mayor deterioro de la gobernanza, que terminan afectando las perspectivas de crecimiento económico y la inversión privada del país.
“Creemos que, dados los desafíos de gobernabilidad desde que asumió el cargo, (la presidenta Dina) Boluarte probablemente enfrentará desafíos para lograr la aprobación de reformas importantes en el fragmentado Congreso”, se lee.
Para Fitch, representa un riesgo que el contexto político dañe el potencial de crecimiento a mediano plazo y que se derive en un descontento social. Ello podría perjudicar la trayectoria fiscal en relación con sus pares con calificación BBB.
“La perspectiva negativa refleja un alto nivel continuo de incertidumbre política en Perú y un mayor deterioro de la gobernanza que han socavado la inversión privada y están pesando sobre las perspectivas de crecimiento económico”, sostiene Fitch y remarca que la ratificación de la calificación BBB al Perú se basa, principalmente, en la deuda pública moderada, la fuerte liquidez externa y el historial de estabilidad macroeconómica del país.
MEF destaca que no hay rebaja de la calificación crediticia del Perú
En respuesta, el titular del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), Alex Contreras, indicó que se debe reconocer que se ha mantenido la calificación crediticia del país. “En, los últimos dos años nos han bajado dos veces, ahora el rating no ha cambiado”, anotó en RPP.
En la misma línea, el viceministro de Economía, Juan Pichihua Serna, indicó que la nueva ratificación de la calificación de riesgo de nuestro país, “expresa abiertamente la confianza que las cosas no se están haciendo mal”. “Es el reconocimiento a lo que se viene haciendo de manera responsable”, manifestó el funcionario.
“El plan Con Punche Perú previo que funcionó el primer semestre, pudo soportar y reaccionar no solamente a la crisis social, sino también pudo soportar al ciclón Yaku, al Fenómeno El Niño que se vino en marzo y abril”, dijo.
Fitch: Proyección de crecimiento económico a la baja
Sin embargo, a pesar de ello, la agencia calificadora de riesgo rebajó su proyección de crecimiento para el Perú a 0,3% (en abril era de 1,8%) y espera un crecimiento de 1,9% en 2024.
“Esperamos un crecimiento del 1.9% en 2024 a medida que la actividad se recupere dados los bajos efectos de base a partir de 2023 y algunas industrias clave se recuperen, como la pesca”, remarcan.
Por otro lado, Fitch espera que el déficit fiscal aumente a 2,6% del PBI, cifra por encima del objetivo para este año (2,4%), debido a una fuerte caída de los ingresos fiscales, que está siendo compensado por una caída en los gastos.
“Inestabilidad pesa sobre el crecimiento”
Sin embargo, la agencia calificadora cree que los desafíos de gobernabilidad que enfrenta el Gobierno de Boluarte se podrían obstaculizar sobre todo en la aprobación de reformas importantes en el “fragmentado” Congreso.
“La inestabilidad pesa sobre el crecimiento: ahora esperamos un crecimiento económico de solo el 0,3% en 2023, en comparación con el 1,8% en nuestra última revisión del 28 de abril de 2023. La economía de Perú entró en recesión después de que el PBI cayera en el primer y segundo trimestre del 2023 debido a la caída de la inversión y el consumo privado, probablemente debido a protestas y mayor incertidumbre política”, observa el informe.