Las personas que ofrezcan o vendan celulares que fueron obtenidos de manera delictiva, o quien desensamble dispositivos móviles robados para utilizar sus partes en otros equipos, podrían ser condenados hasta con cuatro años de prisión efectiva, según detalla el Decreto Legislativo 1578, promulgado recientemente.
La mencionada disposición fue confirmada este martes por el juez de investigación preparatoria especializado en flagrancia del Callao, Renee Quispe Silva. Según detalló la agencia Andina, el magistrado brindó detalles sobre esta nueva normativa que pretende reducir el nivel de criminalidad en el país.
“El nuevo decreto modifica el delito de receptación y señala que quien expone para la venta teléfonos celulares robados o hurtados, puede ser sancionado por delito de receptación. Asimismo, quien los desensambla o utiliza sus partes, chip o batería, en otro equipo, de por sí es considerado como receptación”, señaló Quispe Silva.
En esa línea, el magistrado mencionó que el decreto modificado señala de manera explícita que quien robe un dispositivo móvil empleando violencia, será acusado de robo agravado, lo que significa que podría recibir una condena de hasta 30 años de cárcel.
“Es decir que, si el delincuente amenaza con un aparato explosivo para robar un celular, la pena es no menor de 20 ni mayor de 30 años. Otro agravante es cuando se roba ese teléfono, se utilice un vehículo motorizado”, agregó el juez.
No obstante, explicó que los magistrados, al determinar la pena por robo agravado, no solo evaluarán la modificatoria del Código Penal, sino también las circunstancias específicas de la normativa, así como también la jurisprudencia del Tribunal Constitucional y la Corte Suprema.
“El juez evalúa los casos en el marco de los pronunciamientos establecidos sobre el delito de robo agravado y considerará, asimismo, la razonabilidad y proporcionalidad de la pena al dictar sentencia”, remarcó.
Penas más severas
Como se recuerda, el Poder Ejecutivo promulgó recientemente la modificación de la norma que castiga con penas más severas el robo de celulares en el Perú. Así, la nueva normativa del Código Penal busca fortalecer la lucha contra el comercio ilegal de dispositivos.
En ese sentido, el decreto señala que el robo del “equipo terminal móvil, teléfono celular, equipo o aparato de telecomunicaciones, red o sistemas de telecomunicaciones u otro bien de naturaleza similar” será penado con prisión efectiva no menor a 12 años, ni mayor de 20.
En esa línea, la norma especifica que si el robo se comete utilizando material explosivo, con armas o a bordo de vehículos motorizados, la norma será no menor a 20 años, ni mayor a 30 años.
“La pena será de cadena perpetua cuando el agente actúe en calidad de integrante de una organización criminal, o si, como consecuencia del hecho, se produce la muerte de la víctima o se le causa lesiones graves a su integridad física o mental”, indica el artículo 189 de la normativa.
Robo de celulares: En cifras
De enero a septiembre de este año se han registrado un total de 1′286.435 reportes de robos de celulares en todo el país, según detalló el Organismo Supervisor de Inversión Privada en Telecomunicaciones (Osiptel).
Tan solo durante septiembre de 2023, la entidad reportó 4.659 denuncias de robos en todo el país, en promedio, por día.
Por su parte, el Registro Nacional de Equipos Terminales Móviles para la Seguridad (Renteseg) señaló que la mayor cantidad de reportes de celulares robados por hora se realizan los lunes (232), seguido de los sábados (207) y los martes (191); esto en el mismo periodo de tiempo (enero-septiembre).
Osiptel también reveló que las marcas de celulares que más roban en el Perú son: Apple, Samsung, Huawei, Xiaomi y Motorola.