Ante un débil crecimiento de la economía peruana, diversos especialistas han anticipado que la pobreza en el Perú se incrementará por segundo año consecutivo. En diálogo con Infobae Perú, Federico Arnillas, presidente de la Mesa de Concertación para la Lucha contra la Pobreza (MCLCP), prevé un pronóstico conservador del aumento de la pobreza en 30%, similar al año de la pandemia del Covid-19.
En esa misma sintonía, el titular del Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (Midis), Julio Demartini, reconoció ayer martes que, de acuerdo a la proyección, “probablemente”, esta problemática social se incrementará.
“Ya estamos pidiendo la información al INEI y a otras instituciones para la prevención, las acciones que debemos tomar; no de manera reactiva, sino preventiva”, indicó a la prensa.
Demartini sostuvo que al margen de la estimación, lo que que el Gobierno está buscando es el cierre de brechas. “Por eso se ha propuesto el incremento de presupuesto de casi S/1000 millones. Con ese presupuesto vamos a cerrar brechas e incorporar usuarios en los diversos programas: Pensión 65, Contigo, Juntos, Cuna Más y todos aquellos programas productivos como el de Foncodes, para no solo hacer contención sino promover el desarrollo de capacidades”, refirió.
Para Federico Arnillas, la cifra de pobreza incluso puede incrementarse al 33%, lo que significaría un retroceso de más de 10 años en la lucha contra este flagelo, como el registrado en 2009.
¿Cuántas personas son pobres en el Perú?
De acuerdo con el último reporte del INEI, publicado en mayo de este año, alrededor de 9 millones 184.000 viven en un estado de pobreza, ello representa al 27,5% de la población.
Al revisar la serie histórica, se observa que en caso se confirme un aumento de la pobreza durante este año, sería la primera vez en dos décadas que se produce un hecho similar. (Ver gráfico).
“Un retroceso de estas características para la serie histórica que tenemos disponible no aparece. La serie histórica es del 2000 para acá, pero en especial la que viene del año 2004, teniendo en cuenta que nuestro punto de partida del 1999 o del 2000 estaban por encima del 60%”, señaló a este medio.
“Desde el punto de vista más estructural lo fundamental sería garantizar la seguridad alimentaria de la población del país. Tengamos en cuenta otra variable que no hemos mencionado que es un escenario internacional inestable que puede implicar en un escenario más crítico, una ampliación de las áreas de guerra de conflicto y la afectación sobre recursos claves como son los de energéticos, alza de precios, escasez de alimentos no son los riesgos que podemos tener ya no solamente internos, sino externo”, explica.
De acuerdo con el Banco Mundial, acabar con la pobreza sigue siendo un desafío a nivel internacional. Actualmente, cerca de 700 millones de personas viven en la pobreza extrema y subsisten con menos de 2,15 dólares al día, es decir, alrededor de S/ 8,20, considerando el tipo de cambio en Perú a la fecha. Además, proyectan que el crecimiento económico promedio de América Latina y el Caribe es de un 2 %, una tasa insuficiente para lograr los avances sociales.
Bonos ayudan, pero deben entregarse a tiempo
Cuando uno está en situación de pobreza extrema, cualquier ayuda es bien recibida, el problema es que esa ayuda no llegue condicionada políticamente y llegue lo antes posible, con la mejor calidad posible y en especial a los sectores más pobres y vulnerables, apunta Federico Arnillas.
“Necesitamos una estrategia que entienda los diversos contextos y desarrolle las herramientas adecuadas a cada contexto y a cada perfil de las personas. No es lo mismo la afectación al inicio de la vida, que cuando son personas adultas mayores incluso con enfermedades complementarias como Alzheimer, que requieren también estrategias complementarias de atención”, señala.
Finalmente, hace hincapié que al menos este año y un poco más atrás se ha registrado una inflación significativa (de dos dígitos) que afecta en especial los componentes de alimentos, los que a su vez están afectados por el cuadro de sequía. Por ello se produce pérdida de producción e incremento de los precios.