El internacionalista Miguel Rodríguez Mackay, exministro de Relaciones Exteriores, propuso este domingo que el Gobierno de Dina Boluarte debería declarar luto nacional por las víctimas mortales peruanas en Israel desde los ataques del brazo armado de Hamas.
“Creo que en situaciones como esta, lo mínimo que podríamos esperar es [esta medida]. No solamente por los peruanos, sino por la innumerable cantidad de fallecidos que está produciendo [el conflicto]”, dijo en una entrevista difundida en Exitosa.
Las declaraciones llegan un día después de la Cancillería confirmara que la peruana israelí Margit Schneider-Zimmerman fue hallada sin vida junto a su esposo tras permanecer desaparecidos, una muerte que hace sumar tres connacionales fallecidos en la guerra.
“Creo que la Cancillería ha debido decir no solamente que rechaza o lamenta [los decesos], sino que se conduele y declara luto. Además, hay dos familias nuestras en Gaza”, consideró el letrado en referencia a las familias, una de ellas con una niña de 6 años, que se han puesto en contacto con la embajada peruana en Egipto para intentar abandonar la franja en medio de los bombardeos israelíes.
El último sábado se cumplió una semana del conflicto entre Israel y milicias palestinas, que ha dejado al menos 2.800 muertos en la Franja de Gaza, entre ellos más de 700 menores, 10.850 heridos y una crisis humanitaria por los bombardeos de Israel tras el ataque sin precedentes de Hamas en suelo israelí, que causó más de 1.400 muertos, la mayoría civiles, y más de 200 secuestrados.
A la muerte de Shnaider, se suma la del peruano-israelí Brando Flores García, quien estaba cumpliendo los últimos días del servicio militar en una base cercana a la frontera con Gaza, y del médico peruano Daniel Levi, quien había desaparecido tras los ataques de hace 15 días y se encontraba en el kibutz de Be’eri, en un lugar cercano a la Franja de Gaza.
“Lo lamentamos mucho. Sin embargo, estamos en contacto permanente con las autoridades de Israel para saber en qué situación está la familia y podamos traerlos a buen recaudo”, declaró Boluarte la semana pasada en plena búsqueda de la ciudadana tomada como rehén por el grupo islamista junto a su hija, Shiri Bib, su yerno, y sus dos nietos pequeños, de 4 años y 9 meses.
Había otros dos compatriotas reportados como desaparecidos, Rufina Pereyra y Giancarlo Sala, pero ambos aparecieron con vida el 11 de octubre. Según Cancillería, hasta el momento ha atendido a 160 peruanos con orientación, alojamiento, alimentación o transporte durante su permanencia en Israel, y asistió “en su desplazamiento fuera de ese país a 90 peruanos por vía terrestre a Jordania y a 70 vía aérea a otras ciudades”.
El domingo pasado, la mandataria aterrizó en Lima junto a 25 de connacionales que fueron recogidos por el avión presidencial en Israel. La aeronave trasladó inicialmente a 42 peruanos hacia Roma, desde donde solo 25 decidieron continuar el viaje de regreso con Boluarte, quien entonces realizaba una visita de trabajo a Alemania e Italia, donde se reunió con el papa Francisco.
Posteriormente, otros diez connacionales fueron repatriados desde Tel Aviv, vía Santiago de Chile, en un vuelo humanitario gestionado por las Fuerzas Armadas del país sureño.
La gobernante, criticada por su gestión en el rescate de peruanos atrapados en Israel, reconoció que la falta de logística generó esta demora y comentó que, a diferencia de otros países de la región, cuyos líderes dispusieron el rescate inmediato de sus compatriotas, Perú no cuenta con aviones que puedan ejecutar viajes en situaciones de emergencia como la de los últimos días.
“Los chárteres privados no tenían autorización para aterrizar en Israel, como lo que ha sucedido con el chárter privado que ha mandado Ecuador. A diferencia de Chile y Argentina, [los enviados] son aviones oficiales del Ejército o de la Fuerza Área. Lamentablemente, el Perú no tiene esa logística. Por esa situación, hemos dispuesto la compra de dos Boeing para que podamos hacer los puentes humanitarios en el momento que se requiera”, adelantó.