“Ahora hacen explotar una granada”: Aumentan extorsiones y cobro de cupos a bodegas pese a estado de emergencia

El presidente de la Asociación de Bodegueros del Perú, Andrés Choy, lamentó que el Ejecutivo centre sus esfuerzos en medidas poco efectivas. “Hemos conversado con el Ministerio del Interior, están viendo cómo cambiar la estrategia porque no está dándoles resultados”, reveló a Infobae Perú.

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Representante de la Asociación de Bodegueros del Perú denuncia que las extorsiones contra dueños de bodegas afecta al 60% de estos. Video: Latina

María duda y teme. Ella administra una bodega desde hace más de 12 años en San Juan de Lurigancho. Como el padre de sus hijos no cuenta con trabajo fijo, es quien se hace cargo de los principales gastos de la familia. Los afronta gracias a las ganancias que genera su pequeño negocio. Sin embargo, cada que se acuesta por las noches, piensa en cerrarlo.

La delincuencia tocó a su puerta hace un par de semanas. En pleno estado de emergencia, dos sujetos, quienes se hicieron pasar por clientes, aprovecharon la soledad de la calle para amenazarla. De nacionalidad peruana, le indicaron que formaban parte del Tren de Aragua y le exigieron una fuerte suma de dinero para dejarla trabajar con tranquilidad. Pese a que hasta la fecha no ha vuelto a saber de ellos, teme por la seguridad de sus seres queridos.

María no es la única. Según la Asociación de Bodegueros del Perú, el 60% de sus asociados ha sido víctima de extorsiones y 20% del cobro de cupos. Su presidente, Andrés Choy, aseguró a Infobae Perú que estos crímenes aumentaron desde la pandemia de la COVID-19 y con métodos de coacción mucho más avezados.

“La delincuencia no ha golpeado más fuerte estos últimos meses, a comparación de años anteriores. Las bodegas son las principales afectadas con este tipo de actividades delincuenciales. Muchos socios han tenido que cerrar sus negocios porque ya no podían más con este tipo de acciones, cada vez es más frecuente”, declaró el representante de este gremio.

“Ahora no te dejan una bala como antes, sino que hacen explotar una granada. Varios socios no solo han cerrado sus negocios, sino que han tenido que irse a otro lado para salvaguardar su vida y la de su familia. Que quede claro algo, la amenaza no es al local o al negocio, la amenaza es a la familia y las bodegas suelen ser negocios familiares. Eso genera mucho temor”, continuó.

Casos de extorsión y cobro de cupos a bodegas aumentó desde la pandemia de la COVID-19. (Foto: Andina)
Casos de extorsión y cobro de cupos a bodegas aumentó desde la pandemia de la COVID-19. (Foto: Andina)

Estado de emergencia no sirve

El titular de la Asociación de Bodegueros del Perú confirmó a este medio que el estado de emergencia decretado en San Juan de Lurigancho, San Martín de Porres, Cercado de Lima y Lince no ha servido de mucho para detener la ola de crimen que golpea su sector.

“Continúan los mismos sistemas delictivos reinando en los distritos en que se ha dado el estado de emergencia. Nada ha cambiado, no hemos visto reducción, sino que se sigue dando con más fuerza”, sostuvo.

“Sobre todo, ha incrementado en las tiendas y bodegas de distritos aledaños. Parece que la estrategia no funciona, ya que no ha dado los resultados esperados por el Gobierno. En las bodegas seguimos viendo el mismo temor y las mismas amenazas. Nada ha parado, la delincuencia no se ha eliminado. Parece que la situación es la misma”, agregó.

Choy reveló que desde el Ministerio del Interior le manifestaron que están viendo cómo cambiar la estrategia porque no está dándoles resultados. (Foto: Andina)
Choy reveló que desde el Ministerio del Interior le manifestaron que están viendo cómo cambiar la estrategia porque no está dándoles resultados. (Foto: Andina)

Exigencia de los bodegueros

Lo que le exigen al Estado es que se restructure esta medida en busca de primar el patrullaje en las calles, en lugar de privar el comercio y solo cuidar las principales avenidas de los distritos.

Incluso, reveló que ya se juntaron con miembros del Ministerio del Interior para solucionar esta problemática. Según especificó, en las zonas de Lima Sur es más fuerte el cobro de cupos, mientras que en SJL y SMP reinan los casos de extorsión.

“Lo que nosotros siempre hemos pedido es más patrullaje, no imponer un estado de seguridad fuerte que impida actividad comercial desde la medianoche hasta las 4 de la mañana. Tenemos claro que el estado de emergencia no es la solución, necesitamos mejorar el patrullaje. Nuestros socios se quejan de que no ven policías en las calles durante el día. Y en la noche tampoco, porque su solución es solo cuidar algunas avenidas principales, pero al interior sigue lo mismo. Solo se ve a la autoridad en zonas principales, no por los barrios”, comentó a Infobae Perú.

Andrés Choy, presidente de la Asociación de Bodegueros del Perú. (Foto: Difusión)
Andrés Choy, presidente de la Asociación de Bodegueros del Perú. (Foto: Difusión)

“Hemos conversado con el viceministro del Interior, ellos están viendo cómo cambiar esta estrategia porque no está dándoles resultados. Estamos analizando todo un tema de información preventiva con esta cartera, porque no solamente se trata de que se genere o se imponga otro estado de emergencia, sino, lo que buscamos, es de que haya mayor patrullaje, lo que está haciendo el gobierno es tratar de mejorar el equipamiento de los policías, pero por ahora no lo tienen. Por eso es importante trabajar en la prevención a nivel de redes, para informar más que nada a los bodegueros como deben tomar sus medidas de control frente a estos actos delincuenciales”, acotó.

De acuerdo a sus declaraciones, la gran mayoría de bodegueros opta por no denunciar por temor a las represalias. Explicó que, al ya encontrarse en la mira de las mafias, estas van a saber si acuden o no a las comisarías.

Por tal motivo, necesitan también que se cambien las formas en que se contactan a las autoridades. “Nada más eso. Esperamos que el Ministerio del Interior reajuste su estrategia anti delincuencial, con nuevas medidas, pero ya le hemos hecho llegar esto, vamos a esperar qué es lo que ellos consideran conveniente para poder aplacar ello”, precisó.

Cabe precisar que, en Lima, las bodegas que más sufren las olas de delincuencia, aparte de San Juan de Lurigancho y San Martín de Porres, son Comas, Callao, Villa El Salvador y Villa María del Triunfo, mientras que, a nivel nacional, Trujillo y Piura son las regiones más afectadas.

“Antes solo convivíamos con robos en las tiendas o robos comunes, por parte de tenderos. Ahora son cada vez más los socios que me dicen que en su zona la mayoría de tiendas han cerrado”, lamentó.

“Si es extorsión, piden entre 10 mil a 20 mil soles. Como en las bodegas no se gana mucho, es difícil conseguir esa cantidad de dinero, es por eso que mejor optan por cerrar. Prima la vida de mi familia sobre el negocio. En cuanto al cobro de cupos, tienen que pagar mensual o semanal a desconocidos bajo la promesa de protección, pero ellos vienen a ser los principales victimarios”, aseveró.

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