El Instituto Nacional de Salud (INS), que pertenece al Ministerio de Salud (Minsa), señaló este jueves que cuenta con la tecnología necesaria para el diagnóstico rápido y oportuno de la rabia humana y silvestre.
Ante la muerte de una mujer víctima de esta enfermedad en Arequipa, el INS detalló que la institución realiza las pruebas de inmunofluorescencia directa para el diagnóstico de rabia. El especialista del Laboratorio de Referencia Nacional de Metaxénicas y Zoonosis Virales, Ricardo López Ingunza, agregó que los resultados de estos exámenes se obtienen en menos de dos horas.
Como parte de su plan, el INS realizó la transferencia de esta tecnología a la red nacional de laboratorios del Minsa, ubicada en 11 regiones del país. Asimismo, la entidad informó que también cuenta con acceso a pruebas moleculares y biológicas mediante cultivo; las mismas que tienen un gran porcentaje de efectividad.
“La rabia es mortal cuando no se trata a tiempo. Esta enfermedad es causada por un virus que ataca el sistema nervioso de los mamíferos incluyendo el hombre”, señaló a la agencia Andina López Ingunza.
De otro lado, el especialista informó que la rabia se transmite a través de la saliva de un animal infectado. El virus suele ingresar al cuerpo a través de una mordedura o corte en la piel.
¿Qué es la rabia y cómo se transmite?
Tal como detallan los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, en inglés), la rabia es una enfermedad viral que puede llegar a ser mortal si no se detecta a tiempo. En la mayoría de países de América, este virus aún está presente en los perros, por lo que la mordedura de estos caninos podría ser fatal.
El virus de la rabia, señala la CDC, ataca directamente al sistema nervioso central. “Si una persona no recibe la atención médica adecuada después de una posible exposición a la rabia, el virus puede causar la enfermedad en el cerebro y, por último, la muerte”.
Comúnmente, esta enfermedad suele transmitirse a través de un contacto directo (piel cortada o las membranas mucosas de los ojos, la nariz y la boca), como por ejemplo la mordedura de un animal infectado.
También es posible contraer este virus a través de otros tipos de exposición, como los rasguños, abrasiones o heridas abiertas expuestas a la saliva u otro material potencialmente infecciosos de un animal rabioso.
Según la CDC, han existido casos en los que se ha dado la transmisión de la rabia a través de trasplantes de córnea y de órganos sólidos (como vísceras macizas), pero estos no han sido muy frecuentes.
Asimismo, hasta la fecha no se ha documentado un caso de infección de rabia de persona a persona. “El contacto casual, como tocar a una persona con rabia o el contacto con líquidos o tejidos no infecciosos (orina, sangre, heces), no se asocia al riesgo de infección”, aclara la institución estadounidense.
Síntomas de la rabia humana
Estar expuesto al virus de la rabia, a través de una mordida de un animal infectado o haber tenido contacto, podría traer consecuencias mortales, pero antes genera síntomas. El tiempo que pasa esta enfermedad en reproducirse en tu cuerpo y el cerebro se llama periodo de incubación que, en algunos casos, suele durar meses.
Los primeros síntomas de la rabia pueden ser muy similares a los de la gripe:
- Debilidad
- Malestar general
- fiebre
- dolor de cabeza
- Punzadas o picazón en la zona de la mordedura.
Luego de presentarse los primeros síntomas, si no se controla a tiempo, los malestares se incrementan y progresan hasta convertirse en disfunción cerebral, ansiedad, confusión y agitación.
A medida que la enfermedad avanza, la persona infectada presentará delirios, comportamiento anormal, alucinaciones, hidrofobia (temor al agua) e insomnio.