El pasado 17 de octubre, la Comisión Especial de Seguimiento a Emergencias y Gestión de Riesgo de Desastres recibió al contralor general, Nelson Shack, en el Congreso de la República. El motivo de la cita fue analizar la gestión del Estado respecto a las obras de prevención del fenómeno El Niño y los números que arroja el presupuesto destinado para tal función. Lejos de elogiar el trabajo realizado, Shack se mostró preocupado por la inacción en materia de la realización de las obras de prevención: no se ha ejecutado ni siquiera el 20% del presupuesto asignado.

El contralor indicó que el Gobierno no puede centrarse únicamente en efectuar medidas de prevención, sino también debe enfocarse en cómo reaccionará cuando llegue el momento de atender a aquellos que resulten damnificados por las lluvias y los demás efectos que supone un fenómeno climático similar.

“Ya no debemos preocuparnos tanto por la prevención, pues no queda mucho tiempo. En el caso del fenómeno El Niño, ahora es deber nuestro preocuparnos en cómo vamos a reaccionar y qué va a hacer el Estado con los miles de damnificados que se pueden presentar”, señaló durante su presentación. Asimismo, el contralor general advirtió que parte de la reacción debe atender a los damnificados, pues muchas familias pueden quedarse en la calle si las inundaciones llegan a afectar sus domicilios respectivos; y otra parte debe procurar solucionar los daños a cultivos agrícolas y a la infraestructura de servicios públicos básicos como carreteras, establecimientos de salud, establecimientos educativos, entre otros.

Shack advirtió que la gran preocupación que inquieta a la Contraloría General de la República (CGR) es la alta cantidad de problemas operacionales que posee el Estado. Por ello, pidió que las autoridades tengan en cuenta una reingeniería de los procesos para que los funcionarios ejerzan con confianza y no teman luego ser procesados por infringir las normas.

El Gobierno Nacional ha asignado 4.116 millones de soles para combatir y prevenir los efectos negativos del fenómeno climático. Sin embargo, hasta la semana pasada el registro mostraba un gasto del 19.2% solamente. Esto tiene una explicación sencilla: con el objetivo de reducir la posibilidad de que las partes no cumplan sus compromisos, no se paga por adelantado. No obstante, sigue siendo impresionante que el dinero comprometido llegue a 52.9% apenas.