Más de US$2,000,000 falsos, que tenían destinos países de América del Sur, además de Europa y Estados Unidos, fueron incautados por la Policía Nacional (PNP) en un local ubicado en el distrito limeño El Agustino.
La División de Inteligencia Criminal de la DRIN (Dirección de Investigación Nacional) y la Fiscalía ejecutaron el último martes el operativo de allanamiento tras dos meses de investigación continua. En dicha fábrica clandestina se logró incautar varias planchas de billetes con denominaciones de 10, 20, 50 y 100 dólares.
Tintas especiales, papel y otros insumos necesarios para la fabricación de los ejemplares fueron hallados en un ajustado espacio del local. “Hemos ubicado también la máquina que es utilizada para la fabricación de estos billetes de diferentes dominaciones”, mencionó el general PNP Luis Flores para Buenos Días Perú.
Cabe mencionar que, en este operativo solo se ha logrado detener a una sola persona que estaba a cargo de la imprenta. No obstante, existe una o varias organizaciones detrás de esta fábrica a la que solicitan las planchas de dólares falsificados.
El proceso de los dólares falsos elaborados en Perú
El jefe policial señaló que a simple vista era imposible poder siquiera imaginar que el local funcionaba como una imprenta de billetes falsos. Para la PNP, este lugar es solo el primer eslabón de todo el proceso que se requiere para que los billetes obtengan un acabado A1, para lo cual las personas a cargo lleva son capacitadas.
“El modus operandi para realizar estos billetes falsos inicia con la búsqueda del financiamiento para después realizar el diseño. Nosotros, hemos intervenido en la tercera fase que es el proceso de impresión”, indicó.
Los billetes falsos que son vendidos por las imprentas se distribuyen en planchas, con precios que oscilaban entre los S/6 y los S/80 soles, dependiendo de la denominación.
Posteriormente, se prosigue con la fase de los acabados y, finalmente, el acondicionamiento para trasladar el dinero hacia el exterior. Para la última etapa, de acuerdo al trabajo de investigación, los criminales usan maletas y otros depósitos donde camuflaban los billetes “como si fueran drogas”.
La ruta de los dólares falsos
Según fuentes de la investigación, los billetes de menor denominación son distribuidos en menor cantidad en el mercado nacional peruano y en Bolivia debido a que sus monedas predominantes son el sol y el boliviano, correspondientemente. Los dólares en ambos países son de menor uso.
Ecuador es otro destino donde los dólares falsos son destinados debido a que en el país vecino hacen uso del dólar estadounidense. Los billetes de mayor valor tienen destinos hacia Estados Unidos y Europa.
“Son distribuidos para el consumo, para algunos depósitos bancarios y compras de artículos por internet. El sistema de envío que usan es por encomiendas, a través de burriers y courriers”, señaló el coronel PNP Eduardo Cruz Chávez.
De acuerdo al mapa elaborado por la PNP, las organizaciones también usan puentes aéreos. Por ejemplo, los paquetes con destino a Estados Unidos pasan primero por México. De manera similar, los enviados a Ecuador hacen una parada en Panamá antes de llegar a México y luego a EE. UU.
“Una vez que este dinero ya es trasladado, el dinero obtenido (por este negocio ilícito)—es decir, el real— esa ingresado a las casas de recepción de dinero o si no a las entidades bancarias donde se producía el lavado de activos”, mencionó.
Un dato que se destaca en esta investigación es el costo de estos billetes. Además del alto nivel de sofisticación en la confección de estos, las investigaciones revelaron que en el extranjero resulta relativamente sencillo comercializarlos.
En el extranjero, los costos asociados con este proceso eran significativos. Por ejemplo, enviar mil unidades de billetes de US$100 a Estados Unidos suponía un costo de entre US$20,000 y US$25,000 dólares. “Es más caro que el envío de un kilogramo de cocaína”, resaltó Cruz Chávez para Canal N..
La exitosa operación representa un importante golpe contra la delincuencia organizada y ha sido el resultado del esfuerzo y dedicación de las fuerzas de seguridad. La policía continúa trabajando para identificar a todos los involucrados y llevarlos ante la justicia.