La conocida frase “nadie es profeta en su tierra” aplica a la historia del artista peruano Pablo Villanueva Brandan, conocido como ‘Melcochita’, quien a sus 87 años ha anunciado un nuevo disco como sonero. Él lamenta que a pesar de una impresionante lista de éxitos musicales lograda a lo largo de los años, su faceta como músico sea pasada por alto en el Perú, donde se le conoce más como comediante de televisión.
En sus propias palabras, ‘Melcochita’ dice que ha grabado 73 canciones de salsa, pero se queja de que ninguna radio peruana parece prestar atención a su música. Resulta paradójico que fuera de las fronteras nacionales, sí goce de reconocimiento como músico e incluso haya ganando premios, mientras que en su tierra natal sea principalmente reconocido por su destreza como comediante.
Entonces, ¿cómo se forjó la carrera musical de Pablo Villanueva?
Los inicios de ‘Melcochita’
El 17 de septiembre de 1936, en el distrito de La Victoria, de Lima, nacía un talento que marcaría la escena artística peruana. Pablo Villanueva Brandan, conocido como ‘Melcochita’, venía al mundo en el seno de una familia donde la música fluía en sus venas.
Su madre, Constanza Brandan Lira, con su destreza en la guitarra y el canto, y su tía, despertaron en él una curiosidad por el arte musical. Nicolás Villanueva Rodríguez, su padre, también influyó en su vida, marcando los primeros compases de una carrera que se avecinaba.
Más tarde, encontró inspiración en las orquestas de salsa y la música afroperuana que inundaba las calles de Lima. Trabajando incansablemente en su talento, ‘Melcochita’ se abrió camino en los clubes de la ciudad, donde cautivó al público con su voz y carisma únicos.
En la década de 1950, Villanueva se unió al grupo ‘Son Cubillas’, donde ganó el apodo de ‘Pacocha’. La historia detrás de este nombre es gracias al compositor criollo Albino Canales, quien le otorgó este seudónimo.
Pablo pronto se destacó y comenzó a recibir contratos para tocar diversos instrumentos, particularmente la percusión. Aunque tuvo que hacer una pausa para explorar sus habilidades en la gimnasia, su pasión por la música nunca se desvaneció.
Como se mencionó previamente, Pablo Villanueva es tanto comediante como músico, y su incursión en el mundo artístico comenzó en la década de 1960, cuando trabajó para la disquera Mac, desempeñando una variedad de roles, incluyendo la percusión y los coros. Este paso en la música le brindó invaluables amistades en el ámbito de la música latina y consolidó su posición como uno de los referentes más destacados en la escena de la salsa en Perú.
¿Qué tuvo que ver Augusto Ferrando en la carrera de ‘Melcochita’?
A pesar de su incursión en el mundo de la música, ‘Melcochita’ aún no había experimentado el brillo de las luces de la televisión. Sin embargo, su destino cambiaría cuando la noticia de su singular talento llegó a oídos de Augusto Ferrando, un reconocido presentador de televisión. Intrigado por el percusionista que también cantaba y contaba chistes, Ferrando buscó un encuentro con el músico. En esa reunión, el presentador le ofreció una tentadora oportunidad para participar en su programa, a la cual el músico accedió sin dudarlo.
Así, ‘Melcochita’ comenzó su trayectoria en la Peña Fernando como percusionista. En este punto, su apodo de ‘Pacocha’ se transformó en ‘Melcocha’, un nombre que llevaría consigo hasta hoy, gracias a la intervención del presentador. Trabajaron juntos durante semanas, forjando una sólida colaboración en los escenarios.
Sin embargo, el momento crucial que permitió que su carisma y talento salieran a la luz ocurrió cuando un imitador importante de la peña, Rocío Bravo, cayó enfermo y no pudo presentarse. Fue entonces que ‘Melcocha’ lo reemplazó y realizó una imitación de Daniel Santos. Y gracias a ello, Ferrando lo bautizó como: ‘Melcocha’, debido a la dulzura que aportó a su primera aparición en la televisión.
Polifacético: a la par con la música y la TV
Pablo no solo forjaba su carrera en la televisión, sino que simultáneamente grababa como músico y corista para el sello Mag. Fue en el año 1969 cuando marcó un hecho en su trayectoria musical al lanzar un LP o elepé (también conocido como disco de larga duración), un tesoro codiciado por coleccionistas de vinilos. Este álbum, titulado ‘Acabó con Lima huyó pa’ New York’, marcó un momento significativo en su carrera. En esta producción, se unió al percusionista y cantante Alberto Montroy, conocido como ‘Cantinflitas’.
La colaboración entre Melcochita y ‘Cantinflitas’ no se detuvo allí, ya que juntos continuaron trabajando a lo largo del tiempo. Melcochita decidió formar una banda con ‘Cantinflitas’, respaldados por la Peruvian All Stars, una destacada banda de estudio bajo el sello Mag. Juntos grabaron ‘Descargas’, ‘Guarachas’ y ‘Bugalu’, consolidando aún más su presencia en la escena musical con su fusión única de ritmos y talento.
¿Tocó para ‘Los Yorks?
En la página de YouTube ‘Salserísimo Perú’, se relata una fascinante anécdota que ocurrió en 1969. El grupo ‘Los Yorks’, que en ese momento grababa para la disquera de ‘Melcochita’, tomó una decisión sorprendente al cambiar de aires y unirse a la competencia, la disquera ‘Virrey’, que les ofrecía condiciones económicas más atractivas. Sin embargo, lo que no esperaban era que varias cintas con sus pistas originales quedaran varadas en las manos de Manuel A. Guerrero.
Ante esta situación, ‘Melcochita’ se convirtió en un genio improvisador y compuso las letras de las canciones sobre las pistas que tenía la empresa. En menos de tres horas, creó 12 canciones, permitiendo que su voz diera vida al LP de ‘Los Yorks 69′, que salió a la venta ese mismo año.
David Letterman y su entrevista a ‘Melcochita’
El salto a las tierras norteamericanas fue un momento crucial en la carrera de Pablo Villanueva. Viajó a Estados Unidos y participó en el LP con sabor de Lita Branda, su hermana, mientras establecía contactos con destacados artistas de la salsa. En ese mismo año, contribuyó con los coros del conjunto ‘Crema’ presentado por Roberto Torres bajo el sello Sar.
Lejos de su tierra natal, ‘Melcochita’ comenzó a construir una carrera en tierras estadounidenses. Su estilo único llamó la atención de productores y promotores en la ciudad de Nueva York, donde participó en numerosos discos, principalmente como vocalista de coros. Su talento y carisma le ganaron respeto a nivel internacional.
Mientras residía en Estados Unidos, tuvo el honor de ser invitado al programa de David Letterman en la NBC. El presentador estadounidense lo presentó como el ‘Steve Martin of Perú: Melcochita’. En la pantalla chica estadounidense, Pablo Villanueva mostró su gran personalidad y desplegó su humor de manera brillante.
Pero su aparición no se limitó a una sola entrevista, ‘Melcochita’ visitó el programa de Letterman en dos ocasiones. El conductor tuvo la oportunidad de entrevistar a figuras de la talla de Madonna y Michael Jackson, lo que consolidó su lugar en uno de los programas con mayor audiencia en los Estados Unidos. A pesar de la barrera del idioma, el peruano asistió con un traductor, demostrando su destreza para ganarse el reconocimiento en tierras extranjeras.