Miguel Cevasco, exjugador de la selección peruana, narró terroríficas vivencias en Israel: “Los jóvenes llegaban con escopetas a entrenar”

El ataque de Hamas, organización política y paramilitar, activó la guerra entre dos países, Israel y Palestina, el pasado sábado 7 de octubre. Este conflicto causó la muerte de cerca de 3 mil personas y dejó alrededor de 10 mil heridos hasta el día de hoy. Así como también provocó la división del mundo en dos bandos.

Todos se vieron afectados por los bombardeos en esas partes del continente asiático, incluso peruanos. Ministerio de Relaciones Exteriores informó que Brandon David Flores García, soldado nacional que se encontraba combatiendo con el grupo palestino, perdió la vida. Otros tres compatriotas están desaparecidos.

En ese sentido, Infobae Perú conversó con Miguel Cevasco, exfutbolista que vistió la camiseta de Universitario, defendió los colores de la selección peruana y vivió de cerca la colisión Israel-Palestina años atrás. El ‘Gladiador’ repasó las etapas de su carrera, por ejemplo, su relación con Ricardo Gareca y su estadía en la ‘bicolor’. Además, explicó por qué se retiro a temprana edad.

-¿Cómo te iniciaste en el fútbol?

Si hablamos de menores juego desde los 5 años, en la academia de Jaime Duarte, por mi tío. Después me vieron en el colegio y me jalaron al Deportivo Zúñiga, donde estuve unos años, y luego paso a la ‘U’ a los 10 años.

- Cuéntanos un poco de tu debut profesional...

Paso por la selección sub 17 y cuando regreso del Sudamericano, el profesor ‘Lucho’ Reyna me dice que me van a subir para alternar. Justo hubo un partido que la ‘U’ juega en Urcos y expulsan a varios volantes de contención. Entonces me suben rápido, tenía de 17 para 18 años y a las dos semanas debuto con el profesor Marcelo Trobbiani.

- En la ‘U’ tuviste el placer de compartir con Ricardo Gareca, ¿cómo era él?

Gareca llega fines del 2007 y estuve con él todo el 2008, que salimos campeones del Torneo Apertura, pero, no pudimos disputar la final. Gareca es un excelente entrenador, ya lo demostró en la selección, trabaja muy bien en la parte táctica, tiene muy buena llegada a los jugadores, es capo, no se le escapa los detalles.

- Desarrollaste un vínculo cercano con el ‘Tigre’, por ese motivo, se te vio con él en la Videna años después. ¿Cómo se gestó ese reencuentro?

Después tuve contacto con el profesor Santín, asistente de Gareca, y le dije que los quería visitar porque tenía una escuela de fútbol, quería hacer un poco de promoción y tomarme fotos con los chicos. Ellos accedieron y fui a la Videna. Me encontré con Gareca y tuve una anécdota por mi cambio físico. Me ve y me dice ‘ahora eres fisicoculturista’. Estuvimos conversando, muy buena persona.

- ¿Qué te faltó cumplir en Universitario?

Me quedé con la espina de salir campeón nacional, sobre todo ese 2008, que nos quedamos entre los siete primeros del Clausura y no pudimos disputar la final. También me quedé con la espina de no seguir más años en la ‘U’. Lamentablemente no se dio, llegó el profe Reynoso, justo terminaba contrato, él trajo a su gente y ya no me renovaron.

- Debutaste muy joven con la selección peruana y con un título...

Fuimos a la Copa Kirin, jugamos contra Japón y Emiratos Árabes, recuerdo que la final era contra Japón. Una linda experiencia, viajar y estar con todo el grupo, era una ilusión que tenía. Con 19 años, antes era más complicado estar en la selección, ahora le dan mucha oportunidad a los chicos.

- Jugaste en la derrota 6-0 ante Uruguay y hubo una polémica con ‘Chemo’ del Solar, ¿qué recuerdas de ello?

Ese partido me tocó arrancar, expulsan a Paolo (Guerrero), fue una experiencia mala. Sí sé de la polémica que hubo, que ‘Chemo’ insultaba a los jugadores, todo quedó ahí, todos estábamos molestos, nos recriminamos en el camerín.

- ¿Cuál es tu balance de Perú en la primera fecha doble de Eliminatorias 2026?

Estas Eliminatorias van a estar muy peleadas. Habrá dos bolos claros. El primero conformado por Argentina, Brasil, Uruguay, Colombia y Ecuador y el segundo por Perú, Chile, Paraguay, Bolivia y Venezuela. El partido con Paraguay se sacó un buen empate con un rival directo. El equipo de Reynoso se va a ir encontrando partido a partido, me gustó sacando el primer tiempo ante Paraguay. No nos sobra nada, pero, confió en que se sacarán tres o dos puntos en esta fecha doble.

- En tu primer día en Israel explotó una bomba...

Llegué en una época donde estaba pasando algo similar a lo de ahora. Ese problema con la Franja de Gaza, problemas con los musulmanes y los de Israel. Llego en 2009 y estaban en guerra. Voy a vivir al norte de Israel, al otro lado de Gaza, pero, tenía frontera con Líbano. Veía las noticias y los de Líbano tiraron una bomba a Israel. No cayó en la ciudad, sino en el desierto. Era como un aviso. Estaba recién llegado, un peruano no había visto eso, me quería regresar, llamé al jefe de equipo, le dije: ‘¿Cómo es? ¿Se va a cancelar el campeonato?’ y él me dijo ‘el entrenamiento de la mañana se pasa a la tarde por la bomba’. Estaban acostumbrados y yo asustado.

- ¿Cómo hacías para comunicarte?

Estaba con Jair Céspedes en un inicio, él no me traducía porque estaba ‘bajo’ en el inglés, casi todos hablan inglés, teníamos un traductor aparte y había un africano que hablaba español y muchos idiomas más. Así nos comunicábamos.

- ¿Qué te decían tus compañeros sobre el conflicto Israel-Palestina?

No hablábamos mucho del tema, pero, todos estaban con esa tensión y esperando que se solucione. Algo que me sorprendió es que todos salen de la universidad, a los 17 hasta los 20 años, hacen el ‘army’, llevan entrenamiento de fuerzas armadas, hombre y mujeres, tú veías a las chicas en la calle, rubias lindas, uniformadas con sus escopetas atrás. Los más jóvenes llegaban al camerín con su uniforme y sus escopetas, las dejaban en el camerín, se cambiaban y entrenaban.

- ¿Había extrema vigilancia en Israel?

Solo en el comienzo, pero, después no. Lo que sí había eran cuartos de refugio en todos los departamentos. Cuando cayó esa bomba, por ejemplo, sonó una alarma en toda la ciudad para que entremos a esos cuartos.

- ¿Tu familia qué te decía?

Me decía que me regrese. Gracias a Dios pasó todo rápido y les di la tranquilidad, también.

- ¿Por qué regresaste al Perú?

Se acabó mi contrato, ocupaba plaza de extranjero, vino otro técnico y trajo a sus extranjeros.

- ¿Cómo tomaste la difícil decisión de colgar los botines a los 31 años?

Se fue dando, el último año probé en segunda, complicado, fue una decisión mía. El siguiente año tuve propuestas de provincia, no me convencían, dije ‘voy a tratar de recuperarme’, pasó el tiempo y ya no volví a jugar.

- ¿Qué lesiones sufriste?

Tengo operaciones en la rodilla. Tuve muchos desgarros. Pero lo más fuerte fue las tres operaciones a la misma rodilla.

- ¿Cómo viviste los días post retiro?

Te cambia la vida totalmente. Uno está acostumbrado, extraña entrenar, estar con los compañeros, los días de los partidos, las concentraciones, todo. Intenté seguir ligado en el deporte hasta ahorita.

- ¿Pasa por tu mente que ahora con 37 años tranquilamente hubieras podido seguir jugando?

Sí, claro. Vemos muchos que están jugando con esta edad, pero, no me arrepiento, no pienso en qué hubiera pasado, se dio así en mi caso y estoy agradecido por todo lo vivido en el fútbol. No hay que mirar atrás.

- ¿A qué te dedicas actualmente?

Nunca intenté desligarme del deporte. Sigo con los entrenamientos personalizados para los chicos que quieren jugar fútbol y para personas que quieren mejorar su estado físico. Voy a abrir una escuela de fútbol para adultos y también fútbol femenino. Que la gente me siga en mi Instagram: mcevasco86.