Con el apoyo de Paolo Peña
Las temperaturas en Madre de Dios fueron tan elevadas durante los últimos días que la localidad de Iñapari, en la provincia de Tahuamanu, llegó a presentar 41.4 °C a fines de septiembre, en lo que se consideró un registro histórico. Esta ola de calor extremo se intensificó debido al cambio climático y los embates del fenómeno El Niño Global. Ante esta situación, los ciudadanos de esta región se han visto afectados por cuadros de deshidratación, desmayos y diversos malestares asociados.
Información remitida del Hospital Regional Santa Rosa hacia Dirección de Epidemiología, Prevención y Control de Emergencias y Desastres de la Dirección Regional de Salud de Madre de Dios, a la que Infobae Perú tuvo acceso, revela que un total de cinco personas han fallecido debido a golpes de calor en Puerto Maldonado.
Las edades de las víctimas oscilan entre los 18 y los 69 años y, según sus informes, todos tienen un diagnostico de transtorno del sensorio e hipertermia “que han sido reportados desde mediados de septiembre hasta la fecha, en la temporada extrema de olas de calor”.
Ante ello, el director ejecutivo del Hospital Regional de Madre de Dios, Luis Humberto Chavez Celis, confirmó a nuestro medio que los pacientes llegaron con síntomas de golpe de calor. “Esto sucedió en la temporada más calurosa, durante la última semana o diez dias. Sin embargo, vamos a esperar que el tiempo se mantenga a esa temperatura hasta mediados de noviembre o a fines, de acuerdo a las indicaciones de las entidades que pronostican el tiempo”.
Las víctimas de la ola de calor
La primera víctima en fallecer también fue la más joven. Se trata de un miembro del Ejército que al que sacaron a realizar ejercicios por aproximadamente 12 kilómetros durante las primeras horas de la mañana del pasado 24 de septiembre. Al llegar a su cuartel empezó a sentirse enfermo, con alta temperatura y desvanecimiento. Por ello, fue trasladado al mencionado hospital, donde fue ingresado por emergencias; sin embargo, a pesar de la atención médica recibida falleció a los pocos minutos.
Al día siguiente, una mujer de 44 años fue llevada por el personal de serenazgo con fiebre, pérdida de consciencia y convulsiones. Murió apenas una hora después de ser hospitalizado.
Ya el 4 de octubre un adulto mayor de 69 años que había estado trabajando en el campo “macheteando bajo el sol” ingresó por emergencias para poco después fallecer. Ese mismo día, otro varón de 54 años con hipertermia ingresa a cuidados intensivos, pero al día siguiente murió.
Por último, un ciudadano de 61 años, que ingresó en esa misma fecha, presentaba piel febril y sudorosa, por lo que fue derivado a UCI, pero luego presentó falla renal debido al golpe de calor.
Debido a estas lamentables pérdidas, el director del Hospital Santa Rosa recomienda a la población de Puerto Maldonado y Madre de Dios tener cuidado y tomar medidas de precaución como la hidratación constante y el uso de ropa fresca.
El especialista señaló la peligrosidad del golpe de calor se da cuando el cuerpo tiene dificultades para regular su propia temperatura, ante lo cual manifiesta síntomas que van desde la la sudoración, taquicardia, desvanecimientos, convulsiones e, incluso, quedar en coma. “Cuando golpea fuerte el sol puede ocasionar derrame cerebral, hemorragias intracraneales, esas hemorragias pueden provocar edemas cerebrales, que a su vez aumentan la presión dentro del cráneo y eso es lo que produce la muerte”, dijo para explicar por qué este condición tiene una alta morbilidad.
También se pronunció acerca de la deficiente infraestructura con la que tienen que hacer frente a la atención de pacientes afectados por el calor inclemente. “Estamos sobrellevando para manejar la crisis. Ha habido un descuido generalizado desde hace varios años de la cuestión hospitalaria y de salud a nivel nacional. Lamentablemente, se considera que salud es un gasto cuando mas bien es una inversión. En el hospital tenemos determinadas horas con aire acondicionado y un par de ventiladores que a todas luces resultan insuficientes”, advirtió.
El Niño y el aumento del calor
Actualmente, el Perú padece diversas manifestaciones debido al fenómeno El Niño. Las regiones de la costa norte son amenazadas por las lluvias, mientras que el sur sufre por las sequías. La amazonía peruana no escapa a esta situación. Irving Lizarraga, coordinador del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi) en Madre de Dios explicó que estas altas temperaturas que afectan a la población continuarán al menos hasta diciembre debido, precisamente, a los estragos que está causando El Niño Global.
“Eso quiere decir que vamos a tener todavía temperaturas máximas, que van a estar sobre lo normal de manera continua, o sea las temperaturas mínimas van a estar sobre los 21 cuando amanecemos, a las 7 de la mañana, y pues a partir de las tarde, al promediar tres o cuatro, las temperaturas máximas van a estar todavía al menos sobre los 34 grados”, dijo el funcionario a Infobae Perú.
También explicó que es usual que entre los meses de agosto y octubre se produzcan olas de calor; sin embargo, estas se han intensificado debido a El Niño. Tanto es así, que las provincias de Tahuamanu y Tambopata están presentando temperaturas sobre los 38° C.
“Para nosotros directamente influye un poco más El Niño Global, entonces este influirá también en la variación de lluvias, ya que también tenemos valores de precipitaciones menores”, añadió.
Entonces, en estos momentos Madre de Dios vive el aumento de temperatura, reducción de lluvias, que a su vez han impactado en el caudal de los ríos, debido a la mayor evaporación. En cierto nivel de fortuna, Lizárraga dijo que los ríos de la región -si bien están en riesgo- no llegarían a los niveles de sequía extrema que se ha dado en Brasil, ya que en la zona alta de la amazonía se da el nacimiento de las fuentes que alimentan a estas cuencas hidrográficas, por lo que hay cierta ventaja geográfica.
Estudiantes en peligro
En los últimos años, el mundo asiste a un triste escenario en el que la crisis climática provoca sus propias muertes. Por ejemplo, el calor extremo registrado en Europa en el verano de 2022, el más cálido en dicho continente por lo menos desde 1880, provocó 61.672 muertes prematuras en 35 países europeos, según un estudio que publicó Nature Medicine. Eso significa que solo en ese lapso se produjeron 41% más de fallecimientos atribuidos a las altas temperaturas que en los veranos del 2015 al 2021.
Este fenómeno también viene afectando al Perú, aunque no hay un estudio específico para nuestro país. En el caso de Madre de Dios está provocando que los escolares y trabajadores que se desplazan en horas de mayor calor vean comprometida su salud.
En una conferencia realizada los primeros días de este mes, el médico Carlos Manrique De Lara Estrada, director ejecutivo de Inteligencia Sanitaria de la Diresa en Madre de Dios, advirtió que hubo pacientes que presentaron cuadros de vómitos, diarreas, deshidratación, hipertermia, que estarían relacionados a la ola de calor.
“Hay varios pacientes que vienen por sintomatología gastrointestinal ocasionados justamente por esta ola de calor, o sea, quiere decir que indirectamente nuestros alimentos no conservados adecuadamente pueden acumular bacterias y, a su vez, formar toxinas y crear cuadros de intoxicación alimentaria debido a estas temperaturas”, alertó Manrique.
En ese sentido, los estudiantes agobiados por la deficiente infraestructura de las instituciones educativas públicas y el hacinamiento en las aulas sufren por el sofocamiento. La directora del colegio Nuestra Señora de las Mercedes, Priscilla Frisancho, dijo que se reportaron un par de desmayos entre el alumnado debido a la ola de calor, pero pudieron ser auxiliados rápidamente y se recuperaron con éxito.
“La realidad es que nuestros estudiantes no cuentan con un techo para lidiar con las inclemencias del calor en el patio. Sin embargo, con la APAFA, los padres de familia hemos colocado una malla rache, pero no brinda protección para el sofocante calor y eso nos limita para desarrollar actividades físicas. Las aulas están muy sofocantes, algunos maestros con sus padres han comprado ventiladores o han donado. Sin embargo, esta institución funciona en la mañana y en la tarde y el calor es peor en la tarde y los niños de la tarde se sofocan, necesitan aire libre, los sacamos pero no tenemos los techos para cubrirlos”, detalló la directora.
Por su parte, el director del Hospital Santa Rosa reportó que hay múltiples informes de pérdida de consciencia de estudiantes debido al calor. “Cuando salen del colegio es cuando se producen estos accidentes”, dijo.
Finalmente, pidió a la población cuidarse al desplazarse a sus centros de estudios o trabajo. Entre las medidas de prevención se hallan desplazarse por sitios frescos, evitar el horario de calor más intenso que va desde el mediodía hasta promediar las cuatro de la tarde, además usar sombreros de paja, así como vestir ropa clara y beber abundante agua sola o con electrolitos. Y, finalmente, durante la noche dormir en ambientes frescos, de preferencia con las ventanas abiertas.
“No pensemos que se trata de la edad o personas malnutridas, es un aumento de temperatura que puede afectar a todos”, concluyó el funcionario.