La Ciudad Sagrada de Caral, la más antigua de América y construida por una civilización contemporánea del Antiguo Egipto y Mesopotamia, se encuentra en peligro debido a la presencia de traficantes de terrenos, invasores, poca atención del Ministerio de Cultura y la falta de presencia policial. Así lo denunció la directora de la Zona Arqueológica Caral (ZAC), Ruth Shady Solís, quien dijo a Infobae Perú que personas que no respetan este patrimonio de la humanidad incluso han ingresado a la zona que debería estar protegida con tractores, dañando muros construidos hace cinco mil años.
“La intención de estas personas es promover temor para que se les deje ingresar como ya lo han estado haciendo”, mencionó a este medio.
La arqueóloga además denunció que los mismos invasores recientemente provocaron un incendio esperando que este se extienda y que personal que trabaja en el lugar se retire dejando el camino libre para que este sea ocupado por los traficantes de terrenos. Sin embargo, el siniestro pudo ser controlado por los propios colaboradores del centro arqueológico.
Daños al diseño urbano
Entre los principales daños ocasionados en la zona están la construcción de canaletas, instalación de mangueras, extracción de agua de puquios que es llevada al sitio arqueológico y la realización de siembras. Incluso introducen maquinaria pesada destruyendo parte del patrimonio arqueológico.
“Han metido maquinaria donde aparecen los muros de las contracciones. Se está afectando el diseño del espacio construido y se está haciendo daño a la historia”, alerta Ruth Shady.
Además, comentó que, en la mayoría de los casos, estos sujetos se presentan como personas de escasos recursos que requieren un espacio para vivir y tierra para cultivar. Sin embargo, esto solo sería parte de las estrategias de los traficantes cuya intención es apropiarse de esos terrenos.
La arqueóloga, además, precisó que los daños ocasionados perjudican el diseño del centro urbano donde hubo edificios monumentales y viviendas.
Falta de seguridad
Hasta hace dos años, el área contaba con cinco policías y el gobierno regional construyó la Casa de Policía, pero hoy el resguardo ya no es el mismo y ahora solo un policía patrulla la zona esporádicamente, por lo que los invasores pueden ingresar libremente.
“Hemos ido a conversar con el ministro del Interior; hemos pedido apoyo al ministro de Comercio Exterior y Turismo; le hemos explicado lo que ha venido pasando al procurador del ministerio de Cultura. También he ido a conversar con el presidente de la comisión de Cultura del Congreso, pero los cambian y todo vuelve a foja cero”, manifestó la arqueóloga.
“Cuando hemos hablado con el comisario, nos dicen que no somos prioridad: prioridad son las playas y otras zonas de Barranca donde hay bastantes problemas de defensa”, añade.
Antigüedad e importancia de Caral
Ruth Shady recuerda la importancia de Caral como una de las cinco civilizaciones más antiguas del mundo y resalta que el conocimiento que produjo esta cultura del antiguo Perú es hoy reconocida por el mundo por sus estructuras sismorresistentes, los avances en mecánica de fluidos, el uso de la energía del viento y del sol, además de la generación de algodones diversos colores de forma natural.
“Es una de las civilizaciones más antiguas del mundo, no es que háyamos sido menos”, resalta
“Esperemos que repongan la policía que hemos tenido para que no se siga haciendo daños a los centros arqueológicos (...) que debemos preservar para las generaciones del futuro”, finaliza.
Caral, con una antigüedad estimada de unos 5.000 años, es contemporánea de algunas de las primeras civilizaciones que surgieron en diferentes partes del mundo. Durante el período en que Caral floreció, estas civilizaciones estaban en diversas etapas de desarrollo. Las culturas contemporáneas de Caral incluyen: Mesopotamia y Antiguo Egipto.
Caral desafía muchas percepciones previas sobre el desarrollo de las primeras civilizaciones. A diferencia de otras culturas antiguas, como la mesopotámica o la egipcia, no se han encontrado evidencias de conflicto militar en Caral. Además, no se han descubierto representaciones de dioses o líderes militares, lo que sugiere una sociedad armoniosa centrada en el comercio y la agricultura.
Arquitectónicamente, Caral resalta por sus pirámides escalonadas, plazas circulares y su avanzado sistema de canales de irrigación. La ciudad refleja un alto grado de organización social y una profunda comprensión de la ingeniería y la astronomía, aspectos que son evidentes en la disposición de sus edificios y en la alineación con los solsticios y equinoccios.