Choquequirao, “el segundo Machu Picchu”: así se mejorará el acceso al parque arqueológico que promete ganancias de S/4.300 millones

En esta crisis económica del Perú, con un crecimiento de solo 0,09% del PBI hacia el 2023, el Gobierno busca oportunidades para reactivar diversos sectores del país. Así, para Turismo, se está apostando por el mejoramiento de los servicios turísticos públicos del parque arqueológico de Choquequirao.

Actualmente, el centro arqueológico no tiene un acceso sencillo, y solo se puede llegar luego de dos días de una larga caminata. Al final, terminan llegando ocho mil personas por año. Sin embargo, Juan Carlos Mathewss, economista, resalta que esta cifra podría aumentar.

Según relata, Juan Carlos Mathews (Mincetur) reveló a que este proyecto plantea aumentar la accesibilidad para todo tipo de visitantes a Choquequirao, el cual quieren convertir en el segundo Machu Picchu.

En ese contexto, el proyecto plantea generar accesibilidad para todo tipo de visitantes: familias, adultos mayores, niños, jóvenes, del mercado nacional como del mercado extranjero. Además, se considera la implementación de un teleférico, tecnología adecuada para este tipo de montañas de gran pendiente, el cual funcionará como transporte turístico, dinamizando el flujo de visitantes entre la ciudad de Cusco, Machu Picchu y Choquequirao. Asimismo, se incluye en la propuesta la mejora de los caminos de trekking, ya que existen visitantes que toman estas vías.

El titular del Mincetur, Juan Carlos Mathews señaló que el proyecto Mejoramiento de los servicios turísticos públicos del parque arqueológico de Choquequirao representa “la inversión en turismo más importante de la historia del Perú”.

El monto de inversión que tiene tal proyecto es de S/782 millones, y esto incluye la supervisión de la Contraloría General de la República en todos los procesos. Sin embargo, por lo pronto solo se acaba de completar la fase de preinversión de este; la etapa de formulación como proyecto, de tipo asociación público-privada, tomará hasta el 2025 para ser adjudicado, y la construcción de los componentes se estima que terminaría el 2030.

Una vez que haya concluido el proyecto de Choquequirao, revela Mathews —que sería en el 2030—, y luego de 20 años de funcionamiento —hacia el 2050— se estima que el impacto económico sería muy beneficioso para la población local y de las regiones de Cusco y Apurímac, con S/4.300 millones de soles en ganancias y una asistencia de más de un millón de turistas al año.

Del mismo modo, el inicio de operaciones del teleférico permitirá generar 250.000 empleos directos e indirectos. Pero, además, el titular del Mincetur, señala que el proyecto “promoverá la competitividad, innovación y ampliación de la oferta turística del país, así como incrementará la diversificación, inclusión social y cultura turística local”, entre más aspectos.

Del mismo modo, se espera que este proyecto impacte positivamente en los segmentos turísticos, como el aventura, cultural, de naturaleza, vivencial y comunitario. Pero también favorecerá la asistencia a otras maravillas de Cusco, como Machu Picchu.

Asimismo, este gran proyecto traerá consigo la necesidad de “incrementar la inversión pública en infraestructura intersectorial y específicamente relacionado con instalaciones turísticas; mayor inversión privada en planta turística (hoteles, restaurantes, hospedajes) que dinamizan la economía local; mayor gasto per cápita de los visitantes que contribuye a mejorar los ingresos de la población asociada al turismo (operadores, vendedores, entre otros)”.

La ejecución del proyecto “Mejoramiento de los Servicios Turísticos Públicos del Parque Arqueológico Choquequirao” implica la construcción de un teleférico, un diseño de solo un sistema de acceso por cable que irá desde el sur por Apurímac (tramo 1) y desde el norte por Cusco (tramo 2), e incluye la mejora de senderos peatonales.

Así, la funcionalidad de este diseño es garantizar adecuadas condiciones de accesibilidad territorial para la población y visitantes nacionales y extranjeros en la zona de alta pendiente del margen derecho del río Apurímac. Se calcula que esta obra permitiría alcanzar hasta un millón de turistas anuales.