Agentes de la Policía Nacional del Perú (PNP) intervenieron un vehículo sospechoso a espaldas del emporio comercial Polvos Azules, en La Victoria, y detuvieron a su conductor, identificado como Carlos Alberto Guevara Espinoza, de 41 años, quien negó inicialmente que este sea de su propiedad.
Posterior a la intervención, el personal policial trasladó el auto, de placa Y2B474, hasta los exteriores de la sede de la Dirección de Investigación Criminal (Dirincri), ubicado en la cuadra tres de la avenida España, en el Cercado de Lima. Al proceder con una inspección más minuciosa, los agentes recién se percataron de la granada al interior.
En una primera revisión, en el mismo punto de la intervención, los policías no encontraron el peligroso artefacto explosivo, porque esté se encontraba escondido en una caleta que se había habilitado dentro del vehículo. En ese espacio acondicionado también se halló municiones y drogas.
Desde los exteriores de la Dirincri, el general PNP Luis Flores Solís, director de investigación criminal, confimó esta información y brindó más detalles de lo ocurrido durante la intervención.
“La persona fue intervenida (a escasos metros del vehículo) y se le preguntó si era el propietario, pero negó que lo fuese. Al pedirle sus documentos personales, los agentes pudieron determinar que efectivamente el vehículo se encontraba a nombre de esta persona”, dijo Flores Solís.
Según el alto mando, al interior del auto hallaron una granada de guerra que fue desactivada por el personal de la Unidad de Desactivación de Explosivos (UDEX), además de municiones de diferentes calibres, dos cartuchos de escopeta, marihuana y pasta básica de cocaína (PBC).
“El vehículo tiene una denuncia por pérdida de placas y también tiene (orden) de captura. Esta persona no tiene antecedentes policiales. El auto fue intervenido en la avenida José Gálvez, en el distrito de La Victoria, justo a espaldas de Polvos Azules”, señaló.
Acerca de la situación de Guevara Espinoza, el general precisó que posee denuncias por violencia física y psicológica en los años 2021 y 2023.
“Estamos pasando por momento álgidos en el cual muchos delincuentes están utilizando granadas de guerra para amedrentar a los pequeños empresarios, a las trabajadoras sexuales y que paguen cupos”, alertó.
Para el alto mando policial, es probable que esta granada iba a ser utilizada para cometer alguna extorsión y remarcó que como institución están alertas para garantizar la seguridad de la población.
Además, comentó que en un inicio al que se le trasladó para una diligencia de control de identidad, pero que al descubrir la granada de guerra al interior de su vehículo su situación jurídica cambia totalmente, pues será denunciado por delitos vinculados a tenencia ilegal de armas.
“Se le hizo un registro preliminar al auto del intervenido, pero acá (en las afueras de la Dirincri) se le hizo uno mucho más minucioso, tal es el caso que pudimos detectar las caletas que en estos casos siempre tienen los delincuentes. La granada estaba debajo del asiento”, agregó.
En otro momento, no descartó que esta granada hubiera querido ser usada para atentar contra un empresario o dueño de algún puesto dentro de Polvos Azules. “No es común que una persona tenga una granada de guerra en su vehículo, así que están siendo utilizadas para amedrentar a los pequeños empresarios”, acotó.
Dijo que conversarán con los comerciantes de dicho emporio para determinar si alguno o varios estaban siendo víctima de extorsión.
En un inicio trascendió que se trataría de un intento de atentado contra la sede policial de la Dirincri, pero eso quedó descartado por el general Flores Solís. El trascendido tomó fuerza por las recientes amenazas que estaba recibiendo el coronel PNP Víctor Revoredo a manos de la criminalidad extranjera.