De una gran sonrisa y calma única, aparece Kevin Santamaría en la sala Zoom de Infobae Perú para conversar extensamente sobre el campeonato de Comerciantes Unidos en Liga 2, que significó su primer título en Perú, y su mirada a dos viejos compañeros que hoy están en la órbita de la selección. También se refirió a un probable regreso a ‘La Selecta’ y recordó a su entrañable amigo Áron Torres, fallecido recientemente, a los 26 años, por una enfermedad renal crónica.
- A sus 32 años ha conseguido su primer título fuera de El Salvador al coronarse campeón de la Liga 2 con Comerciantes Unidos.
Sí, la verdad que estoy muy contento por lo logrado. Ha sido un año bastante difícil, bueno usted sabe lo bastante difícil que es la Liga 2. Gracias a Dios se nos dio el título. Valoro mucho el esfuerzo del grupo desde el primer día que llegamos a Cutervo. Eso le da mucha alegría a uno, terminar con lo que todos soñamos: el título y ascender al equipo a Liga 1, donde de verdad se merece por todo lo hecho como club.
- ¿Cómo vive este buen momento desde el plano personal?
Bien, la verdad bien. Como digo estoy muy contento. Las veces que he venido a Liga 2, mi mentalidad es poder subir y vivir ese momento de mucho alegría. En el 2021 se me quedó esa espinita con Chavelines de no poder subir. Ahora vine con eso de quitarme la espinita, porque sabía que había un buen grupo y gracias a Dios se pudo compenetrar todo para sacar adelante al equipo y ascender.
- ¿Cuál fue la clave para conseguir el retorno a la Liga 1?
Creo que la unión del grupo. A veces se habla de unión, pero los grupos no son tan unidos. Acá desde el primer día cada jugador supo su rol, se respetó las decisiones del entrenador, todos tiramos para adelante, nunca hubo una mala cara -lógicamente cuando no se juega hay inconformidad, pero acá todos tiraron para adelante-, y todos fuimos importantes. Entonces eso fue fundamental para que nosotros lográramos el ascenso y ganar el campeonato. Tenemos 60 puntos, estamos a diez del segundo; eso creo que no se había visto en Liga 2.
- Usted también fue pieza importante en el equipo al aportar siete goles.
Sí. Estoy muy contento por anotar los siete goles. La verdad es una alegría para mí anotar, asistir, ayudar al equipo desde cualquier área. Estoy muy contento con el rendimiento de este año y terminarlo con un título es la cereza del pastel. Estoy muy agradecido de estar acá.
- ¿Qué es lo que más valora de Comerciantes Unidos?
Creo que el trato al jugador. Desde el primer día se nos ha tratado bien, nunca hemos tenido problemas de preguntar por nuestro pago, siempre han sido correctos. Con eso uno se da cuenta a dónde quieren llegar como club y eso da tranquilidad para rendir bien, sólo pensar en jugar y estar motivado para sobresalir partido a partido. Uno lo retribuye jugando bien, ayudando al equipo a lograr el objetivo trazado en febrero.
- ¿Fue sencillo comprenderse con Matías Sen, Cristian Lasso y Steven Aponzá?
Sí, porque son grandes jugador. Con Sen ya había jugado en Chavelines y desde que estoy con él me he sentido muy cómodo. Nos entendemos bastante bien. Es un goleador nato. La verdad que a mí me da esas facilidades de saber dónde está posicionado, dónde le puedo tirar la pelota. Eso a mí como ‘10′ me da tranquilidad. Lógicamente también con Aponzá y Lasso, que son jugadores muy buenos, que encaran bastante con su velocidad. Hemos tratado de mejorar y conocernos cada partido. Eso fue importante para el crecimiento del grupo.
- ¿Cuál es su opinión del entrenador Carlos Silvestri?
Estoy muy contento por la oportunidad que me dio. Desde el primer día que me habló sentí su sinceridad. No lo conocía. Cuando pregunté por él me hablaron bastante bien. Ahora me doy cuenta de la clase de persona que es, siempre va frontal y eso ayuda al jugador a poder rendir al máximo. Él dijo que prefería traer buenos jugadores, pero lo más importante era traer buenas personas, eso me llenó mucho de confianza para venir. Si te dicen eso sabes que habrá éxito. Si hay buenos jugadores y buenas personas, entonces uno se acerca más al título y gracias a Dios se hizo. Aprendí mucho de él por su carrera.
- Usted llegó al Perú en 2020 y al año siguiente regresó a su país natal para fichar por CD Águila, club tradicional. ¿Qué lo motivó para volver a tierras incas, sobre todo en Segunda División?
Me motivó eso de quitarme la espinita de ascender con un equipo acá. También me motivó la primera charla que tuve con el entrenador, eso me llenó de seguridad para venir y saber que era un buen proyecto. De ahí conocía a Sen y Mena, quienes me hablaron bien del club, del lugar y del apoyo de la gente. Sentía que podíamos ascender y en el camino nos fortalecimos. Ahora lo conseguimos.
“Se nos ha tratado bien, nunca hemos tenido problemas de preguntar por nuestro pago, siempre han sido correctos. Con eso uno se da cuenta a dónde quieren llegar como club y eso da tranquilidad para rendir bien”.
- Su primer paso por el fútbol peruano fue en Deportivo Llacuabamba coincidiendo con dos goleadores peruanos: Alex Valera y Fabrizio Roca. ¿Hizo buenas migas con ellos? ¿Cómo fue esa etapa?
Muy feliz. Ahora veo a Valera en un club muy grande, me llena de mucha alegría. Sé todo lo que había pasado antes de jugar en Llacuabamba, todo lo que venía arrastrando de jugar hasta fútbol playa y ahora verlo en selección me llena de orgullo. Era un muchacho que nunca se daba por vencido, hice buena dupla con él. Me da alegría que está triunfando y ayudando a su familia. A Fabrizio también. Era alguien que estaba en reserva, luego vino el COVID-19 y se quedó con la mayor y fue trabajando poco a poco. Ahora lo veo hacer goles y lo convocaron a la selección. A mí me llena de alegría porque son personas que estuvieron con uno y uno sabe lo que han vivido, lo que han pasado y todo lo que les ha costado llegar a donde están. Hablo de mi familia sobre lo orgullos que estoy de ellos.
- ¿Cree que tanto Valera como Roca serán los ‘9′ referentes de la selección peruana en un futuro?
Sí, no tengo dudas. Bueno, Alex siempre se ha ganado ser convocado ya sea por su talento, por su manera de hacer goles o sacrificio en cancha. Todo tiene un proceso. Ahora está Paolo que ha regresado y tiene una trayectoria más amplia y eso se respeta. Pero creo que ellos van atrás, Valera un poco más cerca porque ya está en selección. De ahí Fabrizio es un joven que va comenzando, que tiene que seguir aprendiendo y creciendo. Va por buen camino porque es un jugador muy humilde y eso lo hará llegar bastante lejos. Sueño verlos como los ‘9′ principales de la selección peruana.
- ¿Se ve teniendo su revancha en Liga 1 con Comerciantes Unidos?
Sí, la verdad sí. Por eso he venido. Por cosas fuera del fútbol no pude seguir en Liga 1 después de Llacuabamba. Yo siempre se lo dejo todo a Dios y él sabe cómo lleva cada carrera. Ahora estoy acá, pude ascender y lo que más quiero es jugar Liga 1, demostrar que puedo estar ahí. Espero se me pueda dar y seguir aprendiendo.
El Salvador, una revancha más
- Usted es un futbolista reconocido en El Salvador, ¿o me equivoco?
[Sonríe] Pues la verdad, sí. Gracias a Dios he sido seleccionado nacional. He jugado en mi país y he podido salir campeón, la verdad no me quejo de mi carrera. Soy muy feliz por el aprecio que la gente me tiene. No sé si soy conocido, pero estoy muy contento por el apoyo que me dan. He jugado bastante en el extranjero y eso me da bastante orgullo.
- Una curiosidad, ¿de verdad le dicen el ‘Cristiano Ronaldo salvadoreño’?
[Ríe] Sí, sí. Cuando viene a Perú también me mencionaban que era el ‘Cristiano Ronaldo salvadoreño’ y se hizo ya esa propaganda. Pero sí, en una Copa Oro, en el 2013, iba a entrar de cambio y el comentarista Luis Omar Tapia dijo: “ahora va a entrar el ‘Cristiano Ronaldo salvadoreño’” y entré y todo salió bien. Cuando salí, el Twitter estaba explotado con eso y de ahí empezó la gente en El Salvador a decirme bien. A mí me causa gracia en cierto modo, porque uno se siente bien identificado por la gente, pero tampoco es que me crea. A uno le da risa, por lo demás da mucha satisfacción.
- ¿Cree que ha tenido la valoración esperada en su país?
Siempre lo he dicho. Creo que en mi país quizás por lo poco que estuve ahí en mi buen momento, por decirlo así, porque cuando estaba bien, Gracias a Dios, salí a Guatemala y ya no regresé hasta el 2018 donde fui campeón y luego volví a salir a Guatemala para venir acá [a Perú]. Creo que nunca se me dio el valor que de verdad había ganado en Guatemala o acá mismo estando tres años. Yo me doy cuenta del cariño de la gente. Lógicamente hay partidos buenos y malos, pero uno tiene que ser buena persona. Siempre han hablado bien de mí acá y siempre agradezco eso. En El Salvador creo que nunca se me ha dado el valor que yo me he ganado en la cancha, pero estoy tranquilo con mi carrera, estoy feliz con mi familia y eso es lo importante.
- Si hablamos de la selección nacional, usted ha estado alejado por infortunios de la vida. ¿Ahora por qué no ha vuelto a ser citado?
La verdad hubo muchos motivos. Hubo un momento en el que pudo ser citado, pero tuve un problema con mi visa y no se arreglaba y todos los partidos de El Salvador son en Estados Unidos. Entonces era un poco complicado que me pudieran llevar, eso me afectó mucho. Con ciertos técnicos me llamaban y preguntaba cómo estaba mi situación y la verdad era complicada. De ahí en el último proceso pude estar en las Eliminatorias para los últimos dos o tres partidos, porque hacía bien las cosas en mi país. Pero no tenía ese acercamiento con el entrenador. Creo que he dividía un poco el jugador nacional con el de EE.UU. y lastimosamente no se me tomaba en cuenta a mí como a muchos de la liga local, eso mermó mucho. Fui convocado lógicamente por el rendimiento que estaba teniendo, que era el goleador de la liga, pero eso últimamente me afectó. Ahora se ha cambiado de entrenador y gracias a Dios se han comunicado conmigo. Nada más seguir luchando, el que mejor esté bienvenido sea para la selección y ayude a salir al país de donde hemos caído.
- Resulta curioso, pero usted desde hace tiempo tuvo una conexión con el Perú al trabajar en distintos procesos con el estratega Alberto Castillo. ¿Cómo fue esa etapa?
Bien, muy agradecido con ‘Chochera’. El primer día que vine acá le hablé y pregunté cómo era y sin pensar mucho me dijo que venga, que creceré mucho como futbolista y persona. Gracias a Dios acá estoy. El año pasado estuve con él en CD Águila, él me hizo debutar en selección, me dio la camiseta ‘10′ y llevó a Copa Oro. Me abrió las puertas de la selección.
- ¿Cuál es la valoración que El Salvador tiene de ‘Chochera’?
La verdad muy alta. Allá ganó muchos títulos, es muy respetado en un equipo grande de El Salvador y en todo el país. Es muy respetado, no por gusto llegó a dirigir a la selección. Es un gran entrenador, uno aprende mucho. La verdad que es muy querido en El Salvador.
- En su país existe un futbolista legendario del que se habla hasta el día de hoy en Hispanoamérica: Jorge ‘El Mágico’ González. ¿Realmente su figura excede lo normal?
La verdad que ‘El Mágico’ son palabras grandes en El Salvador. Se le respeta mucho hasta el día de hoy. Él está en la selección como apoyo a los jóvenes. Cuando uno llega ahí está, es una persona muy humilde que siempre habla con uno. Es un espectáculo, no se mete con nadie. Sus palabras siempre son positivas, para nosotros es el mejor del mundo.
- ¿Buscará una nueva oportunidad en El Salvador o tiene decidido establecerse en Perú?
La verdad quiero seguir acá, me gusta mucho el trato de la gente, mi familia está muy feliz acá, mi esposa mis hijas. Es muy bueno para ellas tener otra cultura y eso a uno lo deja muy tranquilo. Primero Dios pueda seguir acá, el año pasado que me fui tuve oportunidad para venir y por decisión personal no vine, sino tuviera cuatro años acá. Me gusta mucho Perú, me siento cómodo, me gusta su fútbol y espero estar acá muchos años.
El eterno recuerdo por Arón Torres
- El fútbol peruano está ensombrecido por la muerte de Arón Torres, futbolista con quien compartió espacio en Sport Chavelines. ¿Cómo fue su relación con él?
Buena, muy buena. Nos invitó a su boda, pero no pudimos ir. Que una persona te invite a su boda, creo que es la amistad que uno hace. Él siempre fue muy querido en el equipo, también fue muy querido por mí. Fue muy trabajador, muy humilde y siempre echaba para adelante. Me alegré mucho cuando volvió a Liga 1 jugando por Unión Comercio. Después de venir acá y darme cuenta de lo que estaba pasando, me dio mucha tristeza porque era una gran persona que pensaba en su familia y en sus hijos. Ahora que pasó esto sólo pedirle que lo tenga Dios en su gloria, que esté descansando y darle las condolencias a la familia.
- ¿Tuvo alguna conversación o encuentro antes de que falleciera?
No, lastimosamente no. El año pasado estuve en mi país. Entonces no pude estar con él, pero el doctor que teníamos en Chavelines me decía cómo estaba. Ambos estaban en la misma clínica. Con un compañero llamado Jorge Esparza tenía comunicación y me enseñaba cómo estaba, cómo seguía su tratamiento. A mí me dolía mucho después de haberlo visto jugando conmigo. Era alguien alegre y siempre positivo. La verdad tengo mucha tristeza por lo que pasó.
- ¿Qué recuerdo le viene a la mente al hablar de Arón Torres?
Su alegría. En Sport Chavelines nos fue muy bien económicamente y siempre llegaba alegre, nunca decía que no iría a entrenar, él siempre estaba preparado fuera la circunstancia que fuera. Se le va a extrañar mucho.