Una mujer derribó la casa de tres pisos donde residía con el padre de sus hijos, en el distrito de Chancay, provincia limeña de Huaral, luego de que un fallo judicial le ordenara entregar el predio a sus exsuegros. La mujer llevó a un grupo de personas para destruir los techos, paredes y calaminas.
Yuriko Ramírez aseguró que erigió la vivienda mientras convivía con el padre de sus hijos y que procedió a derrumbarla “porque el señor me está pidiendo el terreno, más no la edificación, porque eso yo lo he hecho”.
“De poco a poco hemos estado construyendo la casa. Yo también he trabajado, aunque el señor dice que no sé trabajar. Ahí tengo mi negocio, que lamentablemente ya no existe. Poco a poco hemos trabajado los dos y hemos levantado la casa con ayuda de mi familia, de mis hermanos”, aseveró a medios de comunicación locales.
“Hay un documento de la comisaría donde (dice) que él se retira voluntariamente, no es que yo lo haya botado, y se tenía que ir. Actualmente, tiene su casa al otro lado del pueblo. Me ha costado esfuerzo (la construcción), me he privado de muchas cosas, incluso a mis hijos”, añadió.
Suegro denuncia agresión
Por su parte, el suegro de la mujer afirmó que él fue el que construyó la vivienda y que ella, unos días antes que se oficialice la orden de posesión, sacó todas sus pertenencias y la empezó a demoler.
“Esta casa es mía, es fruto de mi trabajo de muchos años. Inclusive, la primera planta la construí con el banco de materiales. Al unirse mi hijo con esta señora, yo les cedí para que puedan vivir ahí, pero pacíficamente. Pero, al retirarse mi hijo por problemas internos, la dejé viviendo tres o cuatro meses con mis nietos. Incluso, la ayudábamos en todo lo que podíamos”, manifestó a Panamericana.
Asimismo, negó que la medida haya afectado a otras personas. “De ninguna manera he tocado a mis nietos. En la resolución está bien claro, con nombre propio, la persona que tenía que retirarse de la casa. Me hacía daño psicológico a mí, mi esposa y a toda mi familia”, aseveró.
Contó, además, que la nueva pareja de la involucrada lo golpeó en una ocasión. “Le dije, señor, usted no tiene por qué meterse a la casa. Él, en vez de disculparse, me agredió físicamente. Me rompió la cabeza porque él es joven y yo tenía 50 años, una (persona) de la tercera edad prácticamente. Ahorita tengo 65 años y estoy jubilado”, especificó.
Expareja responde
El expesposo dijo a Panamericana que Ramírez se había ausentado del hogar en varias ocasiones y que casi no residía ahí. “Yo le paso pensión a mis hijos desde el año 2011, que yo me separo de ella (...). La señora se fue a vivir tres años a Huaral. Yo viví solo en esta casa. En esos tres años estuve todos los días que me correspondía en el régimen de visitas. (Luego), se fue a Chile”, indicó.
“Le paso el 40% de mi sueldo, hasta la actualidad. Yo retomé la relación, pero nuevamente me denunció por los otros dos hijos más, por los cuatro hijos, y yo asumí el cargo. Yo le dije, no hay problema, estás en todo tu derecho de poner tu pensión alimentaria (...). Yo no estoy sentenciado a darle más dinero, sin embargo, le pago la universidad a mi hijo que está en Lima estudiando arquitectura”, agregó.
Si bien los trabajos de demolición fueron paralizados, la construcción se volvió inhabitable. Tras el incidente, la familia dueña del terreno decidió presentar una denuncia ante el Poder Judicial.