El destituido exfiscal supremo y abogado de Alejandro Sánchez Sánchez, Tomás Gálvez, aseguró que el dueño de la casa de Sarratea tenía planeado, en algún momento de su paso por la clandestinidad, entregarse a las autoridades. Sin embargo, indicó que ello no se concretó debido a que, afirma, su cliente no vio imparcialidad en la administración de justicia.
Gálvez espera que su patrocinado no sea expulsado a México para que las autoridades peruanas lo traigan a Perú. El letrado reconoció que el hecho de que Sánchez Sánchez haya fugado irregularmente del país “ha complicado su situación jurídica, no hay duda”.
“Él está detenido por haber cruzado irregularmente la frontera México - Estados Unidos. De ahí tendrán que expulsarlo y ojalá la Cancillería, la autoridad peruana, haga las coordinaciones para que no lo expulsen a México, por donde ha entrado, sino que lo entreguen a la autoridad peruana de tal forma que venga a Lima y se defenderá y se esclarecerá su caso. Él se iba a entregar, sino que después, al ver que no había imparcialidad, a su juicio, decidió no entregarse”, indicó a RPP.
El exfiscal supremo precisó que Alejandro Sánchez Sánchez planeaba ponerse a disposición de las autoridades cuando el Poder Judicial aún no confirmaba la incautación del inmueble del pasaje Sarratea. Es decir, antes de julio de este año.
“Él estaba escondido no sé dónde, pero consideraba que era inocente y, obviamente, desde la defensa, no hemos encontrado una prueba en el expediente que podría determinar su amistad. Por eso es que no se presentaba. Pero ¿qué sucede? Cuando se incautaron sus bienes, la casa de Sarratea especialmente, (...) cuando se estaba resolviendo la apelación, él estaba por presentarse porque considero que la marea mediática había disminuido”, alegó Gálvez Villegas.
“Cuando confirmaron la incautación, él considero que no había ninguna garantía para presentarse y, seguramente, ahí tomó la decisión de salir al extranjero. No se ha presentado desde el primer momento, según la versión que él me da, porque se considera totalmente inocente y no concebía verse preso y enmarrocado siendo totalmente inocente. Por eso prefirió ponerse a buen recaudo”, agregó.
Niega delitos
En otro punto de la entrevista, el exfiscal supremo Tomás Gálvez negó que Alejandro Sánchez Sánchez, sobre quien pesa una orden de 30 meses de prisión preventiva por el caso ‘Gabinete en la sombra’, haya cometido los delitos que le atribuye la Fiscalía.
“¿Qué cosa se dice? ¿Que financió la campaña? Sí, pues. Apoyó con financiamiento. Eso no es delito. ¿Le entregó la casa (a Pedro Castillo)? Sí, pues, eso es una colaboración para la campaña que tampoco es delito. La casa de Sarratea se la dio para que viva y pernocte en el lugar desde la primera vuelta y eso es todo. Lamentablemente, ahí había atendido el expresidente — yo no lo afirmo, pero eso es lo que se dice en las investigaciones — a personas involucradas en actos delictivos”, apuntó Gálvez.
Piden que pague millonaria suma
La Procuraduría Pública Especializada en Delitos de Corrupción requirió al Poder Judicial que Alejandro Sánchez Sánchez, así como otros investigados, paguen en forma solidaria 144.336.000 soles a favor del Estado peruano por el concepto de daño patrimonial.
La referida procuraduría también solicitó que los investigados por el caso ‘Gabinete en la sombra’ cancelen 2.736.843 por daño extrapatrimonial.
Ambas solicitudes fueron formuladas en el escrito de constitución de actor civil que presentó ante el despacho del juez Víctor Zuñiga Urday, quien evaluó el recurso el lunes 4 de setiembre. Se espera que en los próximos días el magistrado del Cuarto Juzgado de Investigación Preparatoria Nacional emita su fallo.