Extranjeros llegaron a Oxapampa a hacer turismo pero son confundidos con ‘pishtacos’ y casi son linchados

La leyenda de un personaje mitológico que nació en los andes del Perú casi toma la vida de dos ciudadanos de nacionalidad brasilera. El hecho ocurrió en Oxapampa, en Pasco, cuando pobladores de este lugar confundieron a los turistas con los ‘pishtacos’ o también conocidos como ‘pelacaras’.

Según varios vídeos subidos a la plataforma de TikTok, varias personas aseguran haber visto en sus zonas a ‘unos misteriosos seres’ de tez blanca con una especie de garfio en sus manos. Otros los describen como personas sumamente altas y que incluso pueden volar.

“Vecina, lo he visto con su gancho colgando, parecen títeres”, se le oye decir a una moradora en el clip.

“Ya se ha elevado, ya se ha larg... Vuelan y ya no se puede hacer nada”, menciona otro hombre de la zona.

Los diferentes materiales audiovisuales se han difundido ampliamente entre los habitantes de Oxapampa, desatando una histeria colectiva contra los turistas que visitan los bellos paisajes del país.

ATV Noticias mostró un vídeo donde se aprecia a dos turistas amarrados en sus sillas y alrededor de ellos, un gran número de pobladores y ronderos quienes los acusaban de ser ‘pishtacos’ y de acechar a las personas.

Los hombres llegaron desde Brasil a conocer la hermosura de Oxapampa y recorrían el lugar en una moto, sin embargo, no imaginaron que sus características físicas serían relacionadas con este personaje mitológico, menos que casi serían víctimas de un linchamiento que pondría en riesgo sus vidas.

Personal de la Policía Nacional (PNP) de la localidad de Villa Rica llegó hasta el local de la comuna e impidieron que la histeria de los moradores escalara a una tragedia mayor. Tras realizar una serie de preguntas y revisar las mochilas de los extranjeros, fueron liberados.

Según informó la Fiscalía, la leyenda del ‘pishtaco’ o ‘pelacara’ es un cuento promovido por los mineros ilegales quienes hacen uso de la tecnología como como drones para crear miedo entre los habitantes. Todo esto con el fin de continuar con sus faenas ilícitas.

Los “pishtacos” también son conocidos como ‘pelacaras’ o ‘demonios de los andes’. En las zonas andinas, es reconocida como una de las leyendas más aterradoras que perduran hasta hoy.

Se refiere a un asesino en serie cuya representación puede variar, siendo más comúnmente descrito como un hombre vampiro, aunque existen versiones que le atribuyen diferentes apariencias.

El término “pishtaco” tiene su origen en la palabra quechua “pishtay”, que significa “cortar en tiras”. El mito señala que este ser malévolo emplea esta perturbadora técnica para acabar con sus víctimas.

Se cree que los pishtacos operan en zonas remotas y desoladas, seleccionando a víctimas desprevenidas, a menudo viajeros solitarios o personas que se encuentran en lugares solitarios.

Según la narración de los habitantes locales, al pishtaco se le atribuyen poderes sobrenaturales que utilizan para atacar de manera brutal a aquellos desafortunados que se encuentren en su camino; incluso se afirma que disfruta de consumir carne humana, por lo que extrae la grasa y la piel de los cuerpos para luego venderlas al mercado negro.

Los moradores de los andes señalan que la única forma de protegerse, en caso de encontrarse con esta aterradora figura, es emplear el reflejo de un espejo para que éste huya. Algunos relatos mencionan que el ser maligno no puede soportar ver su propia imagen.