En el ámbito político peruano, se registran actos de violencia simbólica contra las mujeres y los pueblos indígenas, según se detalla en el libro ‘Intersectando Desigualdades’. A pesar de ser un país democrático, esta violencia se evidencia en estereotipos perjudiciales que restringen su participación en la esfera política.
En particular, las mujeres indígenas desempeñan un papel crucial en la demografía peruana. Representan el 23.8% del total de mujeres en el país, equivalente a 13 millones 693 mil 398. Además, constituyen el 50.2% de la población indígena, que se estimó en 6 millones 489 mil 109 personas en 2007, de las cuales aproximadamente 3 millones 256 mil 859 son mujeres, según datos de la Comisión económica para América Latina y el Caribe (Cepal). Esta cifra subraya la importancia de las mujeres indígenas en la toma de decisiones políticas en el Perú.
El papel de la mujer indígena en la política
La violencia de género en la política hacia las mujeres se manifiesta como una discriminación que limita sus derechos y restringe su participación en condiciones de igualdad con los hombres. Según Ximena Machiaco, en su libro ‘Acoso político’ denota una relación de poder que busca presionarlas a renunciar a cargos electivos o a tomar decisiones en contra de su criterio. En relación con los pueblos indígenas, pese a ser reconocidos en el electorado, siguen presentándose obstáculos que dificultan su involucramiento efectivo en la política, acentuados por una discriminación estructural y clasista.
Esta violencia simbólica se refleja en distintos ámbitos de la actividad política, desde la selección de candidatos y el desarrollo de campañas electorales, hasta el desempeño en los cargos a los que son electos. Es crucial enfrentar estas problemáticas desde variadas aristas, teniendo en cuenta la dinámica de las organizaciones políticas, los sistemas electorales y la conducta de actores políticos, como consejeros regionales.
El libro ‘Intersectando Desigualdades’ señala que, aunque se han instaurado cuotas de género, esto no conduce automáticamente a una igualdad efectiva. La investigación da a conocer las trayectorias de consejeras regionales, indígenas y no indígenas, en contraste con las de consejeros regionales en el escenario peruano, con el propósito de discernir las formas de violencia que enfrentan y analizar las herramientas y tácticas que emplean en su participación política.
En América Latina, la inserción política de las mujeres indígenas se topa con numerosos retos, conforme a un cotejo de diversos estudios en la región. Pese a los progresos en la implementación de cuotas de género en ciertos países, la presencia de mujeres indígenas en posiciones públicas continúa siendo escasa. A continuación, se sintetizan los elementos que influyen en la selección de candidaturas y en el ejercicio de sus responsabilidades.
Obstáculos en la participación política de la mujer Indígena
De acuerdo con un análisis realizado por los autores Diego Zambrano y Diego Uchuypoma, pese a los avances en la implementación de cuotas de género, la representación de mujeres indígenas en cargos públicos continúa siendo escaso. A continuación, se detallan los factores que influyen en la selección de candidaturas y en el desempeño de los cargos por parte de estas mujeres.
Selección de Candidaturas
- Cuotas de género: Aunque la implementación de cuotas de género incrementó, el número de mujeres candidatas en elecciones legislativas, usualmente solo una de cada cuatro postulantes es mujer. Las consecuencias por no cumplir con estas cuotas varían según cada país.
- Ubicación en listas: En sistemas que operan con listas cerradas y bloqueadas, las mujeres frecuentemente se hallan en posiciones inferiores dentro de estas listas. Esta tendencia es más notoria en países sin cuotas de género establecidas.
- Cargos dirigenciales: Si bien los partidos políticos sigue estando dominada en su mayoría por hombres, durante la última década se observó un incremento en la representación femenina en dichos cargos. Sin embargo, persiste la preocupación por la ausencia de normativas partidarias que promuevan la igualdad de género.
- Barreras diversas: Factores como la edad, la clase social y el nivel educativo pueden determinar la vulnerabilidad de las mujeres en la arena política. Aunque hay una alta militancia partidaria femenina, estas mujeres enfrentan numerosos obstáculos al postularse como candidatas.
- Etnicidad: La etnicidad es un factor que puede influir en la selección de candidaturas. Las mujeres indígenas, en particular, pueden enfrentarse a desafíos adicionales derivados de su origen étnico.
- Dinámicas en Partidos Políticos: En América Latina, es común que los partidos políticos perpetúen patrones de género tradicionales y actitudes discriminatorias hacia las mujeres, lo que consolida una esfera política dominada por masculinidad y limita la participación activa de las mujeres.
Ejercicio de Cargos
- Segregación en Comisiones: En el terreno legislativo, es usual que las mujeres estén más representadas en comisiones vinculadas a temas de “reproducción”, y menos en comisiones de “producción” o de “preservación del sistema político”.
- Condiciones de trabajo: Los ambientes de trabajo en las instancias legislativas no siempre están adaptados a la creciente presencia femenina. Es común la ausencia de medidas como licencias maternas y paternas, servicios de guardería y horarios flexibles que consideren especificidades de género.
- Acoso político: Muchas mujeres en cargos públicos enfrentan situaciones de acoso político, que incluyen desde maltrato físico y psicológico hasta hostigamiento sexual y coacción administrativa, a menudo por parte de miembros de otras organizaciones políticas o incluso de su mismo partido.
- Marginalización de mujeres indígenas: Las mujeres indígenas que logran ocupar cargos públicos suelen enfrentar discriminación, siendo relegadas a roles de menor importancia o incluso asignadas a labores no acordes con sus funciones, como tareas de limpieza en las entidades gubernamentales.