La crisis del limón en nuestro país es un motivo de alarma tanto para los agricultores como para la población en general. En tiempos recientes, los precios del limón, ahora llamado ‘oro verde’, experimentaron un aumento significativo, afectando directamente al presupuesto de numerosas familias peruanas. ¿Cuáles son las causas de esta crisis y cómo está impactando la economía local y la seguridad alimentaria?
Uno de los principales impulsores de esta crisis fue la escasez de fertilizantes. En una entrevista con RPP, Juan Arica, Presidente de la Coordinadora Agraria de Zarumilla-Tumbes entre 2021 y 2022, manifestó que la problemática de los fertilizantes se viene arrastrando desde 2022 y que se anticipaba una disminución en la producción de limón para 2023.
La carencia de fertilizantes no es un fenómeno reciente. Arica destacó que los agricultores habían emitido alertas sobre la crisis de los fertilizantes desde finales de 2021. Esta situación se ha mantenido, lo que podría tener implicaciones severas para la producción futura, dado que los ciclos de cosecha y fertilización del presente año tienen un efecto directo en los rendimientos del año siguiente.
El presidente de la Coordinadora Agraria enfatizó que la inacción podría tener graves consecuencias, especialmente en el ámbito de la agricultura familiar. Aunque las agroindustrias cuentan con diferentes métodos de operación, economías de escala y gestión que les permiten afrontar los desafíos de forma distinta, para los agricultores familiares, el panorama es considerablemente más complejo.
¿Cómo afecta la subida del precio del limón?
No obstante, la crisis del limón en Perú no se restringe únicamente a la producción agrícola; también ejerce un impacto en la economía local y la seguridad alimentaria. De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), el limón es un componente esencial de la canasta básica en el país. Esto implica que su escasez podría influir en el índice de precios al consumidor, afectando la capacidad de las familias para acceder a productos alimenticios fundamentales.
La cadena de suministro del limón involucra a una variedad de actores, desde pequeños y medianos productores hasta distribuidores y comerciantes, cada uno de los cuales enfrenta retos particulares en este escenario de crisis. Aunque las autoridades locales y nacionales están explorando medidas para mitigar los efectos de la crisis, como la implementación de subsidios para fertilizantes y programas de apoyo técnico, hasta la fecha no se alcanzó un consenso respecto a una solución integral.
En diversas regiones del Perú, el costo del kilo de limón experimentó una subida significativa en los últimos meses, en solo julio y agosto este cítrico incrementó de hasta el 350%. Este fenómeno responde a una combinación de elementos, que van desde condiciones climáticas desfavorables hasta interrupciones en la cadena de suministro.
Según informes de ATV, en Chiclayo, en la región norte del país, el precio del kilo de limón alcanzó hasta los 60 soles. Este aumento en los precios generó inquietud entre los consumidores y ejerció presión adicional sobre el presupuesto familiar en Perú.
¿Qué otros factores afectaron para la subida del precio del limón?
La problemática del limón constituye un problema complejo que afecta a diversos sectores de la sociedad. Entre los factores que contribuyen a esta crisis se encuentran el cambio climático y el incremento en los precios del combustible. Los agricultores experimentan dificultades en la producción, mientras que los consumidores afrontan costos elevados en un producto básico de su alimentación.
Según el Director de Estadísticas del Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (Midagri), la subida del precio del limón es habitual durante los meses de agosto y septiembre, que son los de menor cosecha. Este ciclo anual coincidió con el impacto del ciclón Yaku, afectando la floración de las plantas.
El precio del limón podría aumentar incluso más, debido al fenómeno del Niño Global, según señaló Julio Ramos, especialista de la Cámara de Comercio de Piura, en una entrevista con Latina. El Niño Global contribuye al incremento de la temperatura, lo que a su vez afecta el crecimiento adecuado de los alimentos.
Periodos de sequía y lluvias irregulares repercutieron en la calidad del fruto y en los rendimientos de los cultivos. El Centro de Estudios Climáticos de la Universidad Nacional Agraria La Molina señaló cómo las variaciones climáticas extremas pueden tener un efecto directo en la producción agrícola.