Desde la playa Señoritas, ubicada a dos horas de Lima, en el distrito de Punta Hermosa, bañistas reportaron el varamiento de una ballena fin o de aleta, al promediar las 3 de la tarde del pasado jueves 17 de agosto.
La presencia del mamífero acuático en la orilla generó gran asombro entre los presentes y la opinión pública, quienes a través de las redes sociales mostraron su preocupación por el estado del cetáceo, además de gran curiosidad por saber qué le ocurrió.
Hasta el litoral, llegaron especialistas en depredadores superiores del Instituto del Mar del Perú (Imarpe) para obtener muestras biológicas y determinar las posibles causas de muerte del animal, sin embargo, debido a la mar brava, no se pudo realizar la necropsia correspondiente.
“La ballena ya estaba con bastante estado de descomposición cuando llegó a la orilla. Encontramos varios órganos regados a lo largo de la playa, como la lengua, un pedazo de barba y también una parte del intestino”, declaró María Andrea Meza Torres, especialista de la Oficina de Investigaciones en Depredadores Superiores de Imarpe, a Infobae Perú.
“Se tomaron muestras de tejidos para posterior análisis, asimismo realizamos algunas mediciones. Aún no se tienen resultados del laboratorio. (…) En relación a las posibles causas de muerte del individuo, se vienen realizando coordinaciones y conversaciones con otros expertos, pero existe la posibilidad de que la causa de muerte sea desconocida”, agregó.
Atacada por una orca
Según un informe enviado por la Organización Científica para Conversación de Animales Acuático (ORCA, por sus siglas en inglés) a la Municipalidad de Punta Hermosa, al cual tuvo acceso Infobae Perú, la causa de varamiento y muerte de la ballena, bautizada como RITA, “está asociada a la interacción con un depredador en agua cercanas, lo cual es atípico de esta época del año (invierno)”.
Asimismo, el documento manifiesta que “estas interacciones podrían incrementarse en la costa peruana en los próximos años debido a los efectos del cambio climático sobre el océano”. “El depredador identificado en el ataque de esta ballena, que correspondería a la especia orca, no sería de riesgo para los bañistas ni pescadores de Punta Hermosa”, reza otra parte del texto.
Hay que destacar que la interacción “depredador-presa” entre cetáceos, es un tipo de interacción inter-específica ampliamente documentada, siendo la orca la especie más relacionada con ataques a grandes ballenas filtradoras para alimentarse de la lengua y tejidos blandos de su cavidad oral.
¿La ballena fue llevada a un vivero municipal?
Vecinos de la asociación Emanuele denunciaron que el cadáver de la ballena RITA, de casi 17 metros de largo y aproximadamente 40 toneladas, habría sido traslado a un vivero municipal del distrito.
“Justo ha venido una plaga de moscas grandísima (…), no me parece el lugar adecuado donde tengan que dejar ese animal. Es un claro foco infeccioso”, manifestó un ciudadano al medio RPP.
Sin embargo, esto fue desmentido por la asistenta de la alcaldía, Lucero Orbegoso, quien confirmó a través de un correo electrónico que el cuerpo del cetáceo “fue cortado en 4 partes y llevado al relleno sanitario de INNOVA en el distrito de Chilca, cumpliendo con todos los protocolos de que pidieron”.
Consultado por Infobae Perú, el médico veterinario zootecnista Carlos Calvo, director de proyectos de la ONG ConservAcción, dio mayores alcances sobre cuál es la forma correcta en la que deben ser enterrados esta clase de animales.
“En todo lo relacionado a fauna silvestre, es decir, aves marinas, lobos marinos, tortugas marinas, todo este tipo de animales, existe una guía o manual, que data de hace varios años, en el cual está indicado cómo enterrar los cadáveres. Esto le compete al Ministerio de Agricultura”, señaló.
“En el caso de recursos hidrobiológicos, como lo es la ballena, lo ve el Ministerio de Producción, pero no existe un manual específico a nivel nacional que indique qué hacer en estas situaciones. Existen manuales internacionales, los cuales son aplicables y se pueden seguir, pero como no existe como tal una ley o una norma, entonces las municipalidades quedan un tanto en el aire, ya que no tiene un conocimiento general de cómo actuar. También mucho depende del presupuesto que manejen”, continuó.
En esa línea, Calvo comentó que, para otras ocasiones, la forma adecuada de proceder es llevar al animal a un lugar alejado a ser sepultado. “La zona no debe estar poblada y no debe tener fuentes de agua”, precisó.
En cuanto al entierro, debe ser de una profundidad tal que permita que, entre el cadáver del animal y la superficie, haya por lo menos un metro de tierra. Además, “se tiene que regar cal viva para eliminar los microorganismos peligrosos”.
“Las personas que hagan todo este trabajo, deben estar vestidas con trajes descartables y con todo un equipo de protección personal. De esta manera, se evitará la trasmisión de microorganismos del animal que se encuentra en descomposición”, dijo el experto.
“Todo esto hay que usarlo correctamente, veo muchas fotos de trabajadores municipales que tienen todos estos equipos, pero los portan mal y es un desperdicio de recursos. Lo que falta también es capacitación”, acotó.
¿Qué hacer ante varamientos de animales marinos?
A nivel del litoral peruano, es muy posible que haya más varamientos de ballenas u otras especies de animales acuáticos, por tal motivo, cuando sean avistados, lo primero y único que hay por hacer es reportar a la entidad competente sobre lo ocurrido.
“Cuando se avisten ballenas, delfines o marsopas, lo que se debe hacer es llamar a Imarpe, al número 975 345 546, ya que es la entidad que se encarga de ir a esta clase de eventos. En el caso se encuentren lobos marinos, tortugas o aves, es conveniente avisar a otras entidades, como Serfor, que son las encargadas”, explicó Meza Torres.
Si no hay respuesta por parte de estas instituciones, se debe llamar a la Capitanía del puerto o a las municipalidades correspondientes. “Lastimosamente, muchas veces, por la experiencia que he tenido y por otras personas, Imarpe no siempre contesta o su número no está habilitado fines de semana”, agregó.
Mientras se espera la llegada de las autoridades, se recomienda mantener la distancia y no intentar devolver a los animales al mar.
“Evitar tocarlos o moverlos, porque son animales silvestres que pueden traer ciertos virus o bacterias que podrían ser contagiosos. También evitar que las mascotas se acerquen a oler o lamer”, indicó la especialista del Instituto del Mar del Perú.
“A veces la gente por tratar de hacerse el héroe o el protagonista de una película de Disney, intenta hacer cosas que no sabe. En primer lugar, no tiene el conocimiento para hacerlo, así que pueden complicar más las cosas; segundo, uno no va con un equipo de bioseguridad a pasear a la playa”, manifestó el director de proyectos de la ONG ConservAcción.
“Si no estás vestido adecuadamente, existe una gran probabilidad de transmisión de enfermedades que podrían dar origen a una nueva pandemia. Lo mejor es que una persona que no sabe no haga nada”, prosiguió.
Por tal motivo, el experto aseveró tajantemente que “si un cetáceo ha llegado hasta la orilla, significa que hay algo muy malo con él”.
“En este caso, el esfuerzo que haga una persona no va a servir de nada y solo pondría en riesgo la salud pública”, concluyó.