Una vez más, sicarios toman por asalto un evento deportivo para asesinar a sangre fría. Esta vez, la víctima fue un adolescente de 17 años de edad, quien se disputaba un partido de fin de semana en una zona de Bellavista, en el Callao.
Según informó La República, el menor de iniciales A.A.M.R pertenece al distrito de Sarita Colonia, pero la tarde del último sábado llegó hasta la losa deportiva del parque La Taboadita para un enfrentamiento futbolístico con otros hinchas del Sport Boys.
Una residente local relató que alrededor de las 15:00 horas, en presencia de varios menores de edad, se escucharon al menos una decena de disparos de bala.
Segundos antes, un vehículo llegó hasta una esquina del parque y se estacionó. De él, bajó un sujeto desconocido y a paso ligero se acercó hasta el área de juego para desde ahí disparar contra la víctima.
El menor falleció en el lugar producto de impactos de bala que recibió en la cabeza y en la zona del abdomen. Hasta el momento, se desconoce cuál fue el móvil de este asesinato por encargo.
Sus familiares llegaron hasta el lugar y se mostraron bastante afectados, aunque prefirieron no dar detalles ni hacer ninguna acusación ante la prensa.
La Policía Nacional (PNP) también se hizo presente en la escena del crimen junto a peritos de criminalística para recoger las evidencias que ayuden en la investigación de este caso. Posteriormente, se procedió con el levantamiento del cuerpo.
Las cámaras de seguridad ubicadas en diferentes sitios estratégicos cercanos a la escena donde ocurrió el asesinato será determinante para dar con alguna pista que lleve a los responsables del crimen.
Por su parte, la Municipalidad de Bellavista emitió un pronunciamiento donde condenó este acto de violencia ejercida en su jurisdicción, envió las condolencias a los familiares del menor asesinado y anunció nuevas medidas de seguridad en los campos deportivos.
Precedente
Es necesario recordar que esta no es la primera muerte que ocurre en un área deportiva y en presencia de varias personas. Hace unos días un evento igual ocurrió en el distrito de San Juan de Lurigancho.
Marco Antonio Arbulú Posadas, de 25 años de edad, se disputaba un partido con sus vecinos de Mariscal Cáceres cuando un asocial se metió al área de juego y con pistola en mano comenzó a dispararle.
Pese a los esfuerzos de los presentes por salvarle la vida y trasladarlo de forma inmediata hasta un establecimiento de salud, nada se puso hacer, el joven había fallecido pocos segundos después de recibir los impactos de bala.
El lugar no cuenta con cámaras de seguridad, sin embargo, los sicarios no se percataron de que un presente había iniciado una transmisión en vivo en la red social de Facebook, el cual captó varios detalles de importancia que ahora se encuentran en manos de la PNP.
Se presume que la víctima recibía amenazas de muerte debido a que se negaba a pagar cupos que los delincuentes le exigían. Marco Arbulú era uno de los organizadores de estos eventos deportivos, por lo que habría sido el blanco perfecto para ser extorsionado por las mafias.