Encuentran sin vida a niño que quedó sepultado por derrumbe en Comas luego de 11 horas de búsqueda

Luego de casi 11 horas de búsqueda, los bomberos encontraron el cuerpo sin vida de un menor que la noche del martes 22 de agosto quedó atrapado por el derrumbe de un muro de contención aledaño a su casa, en el octavo sector de Collique, en el distrito de Comas. Alrededor de las nueve de la noche, la pared de tres metros de altura cayó sobre el niño de cuatro años. Desde entonces, el pequeño estuvo atrapado en los escombros y la llovizna dificultó la búsqueda de los bomberos.

El hecho ocurrió cuando el menor estaba junto a su abuela y su hermano de 11 años. Había acabado de cenar y el menor se fue a su sala mientras esperaba que su madre llegue de trabajar. De pronto, el muro colapsó sobre la casa. La abuela y su hermano pudieron escapar. Sin embargo, el menor y su mascota quedaron entre los escombros.

“‘Él estaba en la sala esperando a su mamá para hacer su tarea, su hermano estaba alistando sus cosas para ir hoy al colegio. De un momento a otro se desprendió el muro y se fue encima de mi nieto. Yo con las justas me he escapado”, comentó Luz Chávez, la abuela del menor, a Latina Noticias.

“¡Jareth, corre!, le dije, pero cuando el muro se vino encima ya no pude hacer nada”, añadió y mencionó que ella se encontraba en la cocina.

Los vecinos actuaron rápidamente y comenzaron a remover los escombros para rescatar al menor. Sin embargo, al haber ocurrido de noche, las condiciones climáticas no fueron las más favorables, por lo que no pudieron sacarlo de entre las piedras y maderas.

La emergencia fue reportada a las 10.30 de la noche del martes y movilizó a la Unidad de Rescate de la PNP y a 7 unidades del Cuerpo de Bomberos, y realizaron una ardua labor para hallar al menor, en la vivienda siniestrada ubicada en la parte alta de la octava etapa de Collique, cerca de la vía del Pasamayito, una zona donde el terreno es poco estable.

Los bomberos precisaron que este bloque de pirca cayó sobre la vivienda del menor cuando se encontraba adentro junto a su abuela y a su hermano de 11 años de edad.

Los trabajos de los rescatistas se realizan con dificultad debido a la intensa neblina y llovizna que cae en la zona de la urbanización Real Casas donde se encuentra la vivienda de madera y calaminas.

El comandante Miguel Ángel Vicanco, jefe de la Segunda Brigada de Lima Norte de los Bomberos, indicó que se estaba ampliando la búsqueda con el objetivo de ubicar al menor, por lo que perros de rescate también fueron empleados en la labor.

Los bomberos indicaron que pudieron encontrar a un perro, que se encontraba junto a él, pero que los familiares refirieron que habría otra mascota que quedó sepultada junto al menor. “La búsqueda va a continuar, el terreno es bastante agreste, las condiciones climáticas no nos ayudan mucho, y aun tenemos una labor bastante ardua, por lo menos un par de horas más”, dijo.

Alrededor de las siete de la mañana, los bomberos encontraron el mueble de la sala donde el menor habría estado sentado. La caída del muro provocó que una vivienda ubicada en la parte superior quede casi al aire con peligro de caer, por lo que los bomberos trabajaron cuidadosamente.

El muro de contención era de concreto, pero estaba sobre una base de pirca y fue mandada a construir por la propia familia. Las lluvias de los últimos días habrían hecho que la base del muro se debilite. La familia del menor comenta que un día antes oyeren un ruido proveniente de la pared, pero no imaginaron que un día después esta caería.

Alrededor de las 9:30 de la mañana de , fueron encontrados los restos del menor de cuatro años. Los bomberos detuvieron el trabajo y pidieron a un familiar que se acerque para reconocer el cadáver. La madre no lo puede hacer por la conmoción, pero sí lo hizo un primo, quien confirmó que se trataba del cuerpo del niño que quedó atrapado tras el derrumbe del martes por la noche.

Los vecinos se mostraron preocupados para la situación de los muros de contención de la zona y espera el apoyo de las autoridades para que un suceso similar no vuelva a ocurrir.