Las cifras de violencia en Perú son preocupantes. La situación de ‘Mila’ ha despertado la indignación de la población peruana y ha desnudado un problema de miles de menores que no es tomado en cuenta en la agenda pública: la violencia sexual en niñas, niños y adolescentes. Solo en los últimos tres años, los Centros de Emergencia Mujer (CEM) ha atendido más de 45 mil agresiones sexuales a víctimas de 0 a 17 años de edad.
‘Mila’ denunció a su padrastro Lucas Pezo Amaringo hasta en dos ocasiones por violencia sexual. El 5 de noviembre de 2021, cuando el país aún permanecía bajo restricciones a causa de la pandemia por el COVID-19, la menor —quien ese entonces tenía aproximadamente nueve años— interpuso una denuncia por tocamientos indebidos.
El 2 de julio de este año presentó otra acusación contra el individuo por abuso sexual. La menor reveló ante las autoridades que la pareja de su madre la agredió desde que tenía seis años. El área de Medicina Legal reportó que la niña tenía 13 semanas de gestación.
Al día siguiente, la mamá de la niña presentó una denuncia por violencia sexual hacia ella. Aquel 3 de julio, el individuo fue detenido por los efectivos policiales, pero tres días después fue puesto el libertad por el juez Bernuel Espíritu Portocarrero. El magistrado consideró que no existían pruebas suficientes para emitir una orden de prisión preventiva al sujeto.
Al igual que ‘Mila’, son miles las niñas, niños y adolescentes que han pasado por una situación de violencia sexual. Lamentablemente, el hogar, que debería ser su lugar seguro, es donde son víctimas de estas agresiones. Según Unicef, el 25% de los violadores son los padrastros, mientras que el 19% son los propios padres.
De acuerdo al Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP), en los últimos tres años se han atendido 45 mil 692 casos de violencia sexual en menores de edad. Esta forma de violencia se convierte en el segundo tipo de violencia con más casos registrados, por debajo de la violencia psicológica y por encima de la violencia física.
Además, en lo que va del año, desde enero hasta junio, se han registrado 14 mil 500 casos de violencia sexual. De esta cifra, el 70,3% de las víctimas tienen entre 0 a 17 años de edad, y el 92,5% son de género femenino. Lima Metropolitana y Arequipa encabezan la lista de los departamento con mayor número de estos casos con 4 mil 138 y 1243 respectivamente.
Justicia tarda y no llega
Pese a los altos índices de violencia sexual en menores, menos del 10% de los agresores está en prisión. Según un informe del diario El Comercio, las cárceles peruanas albergan a solo 10 mil 742 detenidos por el delito de violación sexual a menores de edad.
Esta problemática también se evidencia en el sistema judicial. Una investigación de Infobae Perú reveló que el sistema de judicial demora muchos años para emitir una sentencia en casos de violación sexual. Desde el año 2017 hasta el 2022, el Ministerio Público registró más de 25 mil denuncias por violencia sexual contra menores. Sin embargo, pese a la alarmante cifra, solo dictó 155 sentencias.
“Por ejemplo, para menores de catorce años, la pena es cadena perpetua. El problema son los patrones machistas de los jueces y juezas, que analizan estos casos sin una perspectiva de derechos humanos. Se guían por sus concepciones machistas”, dijo Melissa Guillén, representante la organización feminista Manuela Ramos, a este medio.
Canales de ayuda
Si eres víctima de violencia o conoces a alguien que lo sea, recuerda que no estás sola en esto. El Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables ofrece una serie de servicios de ayuda para enfrentar esta problemática. Una de estas es la Línea 100, el cual te brinda asesoramiento, orientación y apoyo emocional en quechua, aimara y español. Para comunicarte con el número 100 solo debes marcarlo desde tu teléfono fijo o celular.
Los Centros de Emergencia Mujer (CEM) también son una buena opción para acceder a servicios especializados y gratuitos a mujeres que hayan enfrentado violencia o abuso sexual. En estos centros puedes encontrar asesoramiento legal y apoyo emocional.
El Chat 100 es otra opción que brinda el Estado para que enfrentes esta situación. Se trata de una plataforma que te permite comunicarte con especialistas que te brindarán orientación psicológica. Con su apoyo podrás identificar situaciones de riesgo en relaciones y prevenir la violencia.