Ica ha sido el centro de atención de diversas comunidades científicas luego de que se descubriera en esta región los restos fósiles de la ballena ‘Perucetus colossus’, el animal más pesado que habitó la Tierra. Tras este hallazgo, se pudo conocer que en la zona desértica de Ocucaje hay casas prefabricadas.
Las personas que instalaron estas viviendas provisionales habrían pagado por los terrenos, los cuales se encuentran en un área donde probablemente haya más restos fósiles. Ante esta situación, la alcaldesa de Ocucaje, Laura Peña, mostró su preocupación a los medios de comunicación por lo que viene ocurriendo en su jurisdicción.
Según la autoridad edil, los invasores son empresas inmobiliarias que lotizaron los terrenos con el objetivo de ser vendidos al mejor postor. A esto se le suma la presencia de traficantes de tierras, quienes con su accionar ponen en peligro las áreas naturales y arqueológicas.
Ahora bien, con la finalidad de identificar las áreas que podrían haber sido otorgadas a instituciones públicas o privadas, la alcaldesa del distrito de Ocucaje envió cartas al Ministerio de Cultura (Mincul) y a la Superintendencia de Bienes Nacionales (SBN). Tras su respuesta, se podrá conocer si las viviendas precarias tienen los papeles en regla.
Las invasores han llegado a colocar casas prefabricadas en uno de los cementerios de fósiles más ricos del mundo, a pesar de que en el 2019 se declaró “de interés nacional el registro, investigación, protección, promoción y puesta en valor del cementerio paleontológico de Ocucaje y Santiago”.
Ante este panorama, Hildebrandt en sus trece visitó el cementerio paleontológico de Ocucaje. El panorama que encontró fue desolador: latas de cerveza, botellas de vidrio rotas y prendas de vestir yacen sobre las arenas movedizas que hace millones de años fueron cubiertas por el mar.
El periodista del medio de comunicación impreso estuvo acompañado del guía Yango Uchuya, quien le dijo que las casas prefabricadas estaban vacías. Cuando llegaron a la falda de un cerro, el profesional señaló con un dedo el horizonte. Al voltear la mirada, pudo ver dos casas construidas con palos de madera y techos de plástico. También se percató de las huellas del paso de motocicletas.
En otro momento, el hombre de prensa pudo leer “Propiedad privada. Familia Quispe Raymundo” en una casa. Si las autoridades no protegen la zona, los invasores podrían colocar más viviendas, pues hay una larga fila de estacas que parecen marcar los lotes de lo que será una próxima invasión.
Hildebrandt en sus trece también conversó con la alcaldesa de Ocucaje, quien dio datos reveladores. “En la zona de Pinilla, Callango, Cerro Blanco, Cerro Las Brujas y Samaca va a hallar un ser fosilizado. En todos estos puntos hemos encontrado invasiones. Por eso estamos realizando el levantamiento de actas”, indicó la alcaldesa.
Respecto a las invasiones, la burgomaestre dijo que no saben quién otorga los permisos a las empresas inmobiliarias, las cuales se han empezado a instalar en zonas aledañas al cementerio de fósiles.
El animal más pesado de la Tierra
El ‘Perucetus colossus’ ha captado la atención mundial. El paleontólogo Mario Urbina encontró el fósil en el desierto de Ica en 2013. Se estima que el espécimen de ballena encontrado pesaba cerca de 200 toneladas, pero se cree que especímenes más grandes pudieron llegar a las 340 mil kilos, convirtiéndolo en el animal más pesado en la historia de la Tierra.
Los científicos que lo descubrieron creen que este cetáceo tenía una gran densidad en sus huesos para poder sumergirse y encontrar comida en el fondo del mar, ya que aún no habría desarrollado la habilidad de expulsar el aire de sus pulmones como las ballenas actuales.