Cifras preocupantes. Perú es el sexto país en América Latina y el Caribe con mayor número de cárceles en la región. Sin embargo, ello no es suficiente para la gran cantidad de presos existentes en el territorio, tal es así, que 10 de las 69 cárceles presentan una sobrepoblación mayor al 300%.
De acuerdo a datos del Instituto Nacional Penitenciario (Inpe), del 100% de cárceles, el 72% están hacinadas. Es decir, 49 de las 68 cárceles habilitadas, albergan un número significativo de internos mayor al que deberían tener.
En el top de los penales con más del triple de reclusos se encuentran el del Callao, Chanchamayo, Quillabamba, Abancay, Camaná, Miguel Castro Castro, Huancavelica, Pucallpa, Tacna y Huanta. El primero de ellos, con capacidad de 572 alberga a 3.450 reos (503,15%); el segundo, destinado para 120 delincuentes, concentra 651 (442,50%); el tercero, de 80 reos, reporta 428 presos (435%); el cuarto registra 456 condenados, pese a tener capacidad para solo 90 personas (406,67%), y el quinto, ubicado en Arequipa, cuenta con aforo de 78, pero tiene 377 personas privadas de su libertad (308,33%).
Le sigue el centro penitenciario ubicado en Lima, el cual tiene espacio para 1.142 personas, pero cuenta con 5.262 presos (360,77%). Luego, el penal en Huancavelica, que, pese a solo tener capacidad para 60 personas cuenta con 275 (358,88%); la cárcel de Pucallpa, que reporta 2.574, teniendo un aforo de 576 (346.88%); la penitenciaria en Tacna, que cuenta con 922, aunque solo tenga espacio original para 222 (315.32%), y el penal de Huanta, que aunque solo tiene espacio para 42, cuenta con 171 internos (307.14%).
Sobre ello, la abogada penalista Romy Chang, directora de la Maestría en Derecho Penal de la Universidad Católica, sostuvo que la sobrepoblación se debe al uso excesivo de la prisión preventiva. “En muchos casos, el plazo de prisión preventiva vence y la fiscalía no llega a presentar su caso. Los plazos de prisión preventiva no deberían ser tan largos. Para algunos delitos, esta puede llegar hasta a cuatro años”, declaró en diálogo con El Comercio.
Al respecto, Percy Castillo, adjunto para los Derechos Humanos de la Defensoría del Pueblo, adicionó otros dos factores que impulsan el hacinamiento: condenas largas y pocos beneficios penitenciarios. “Con estos tres elementos, la gente que entra a la cárcel prácticamente ya no puede salir. Además, desde hace más de 10 años que en el Perú no se construyen nuevos penales”, indicó al medio mencionado.
“Para mejorar esta situación debe haber un consenso [entre los actores del sistema de justicia] para restringir aún más el uso de la prisión preventiva. Además, tendrían que reformarse las penas para que sean más acordes con la realidad y reformar el Código de Ejecución Penal para permitir beneficios penitenciarios donde se pueda sin poner en riesgo a la sociedad”, añadió Castillo.
¿Cuáles son los delitos más comunes en Perú?
Los 10 delitos más comunes en el país son robo agravado (24,23%), violación sexual de menor de edad (11,78%), tráfico ilícito de drogas (7,58%), tentativa de robo (5,85%), promoción al tráfico ilícito de drogas (5,26%), violación sexual (4,46%), tráfico ilícito de drogas, en formas agravadas, (3,59%), homicidio calificado (4,42%), actos contra el pudor en menores de 14 años (2,95%) y hurto agravado (2,48%).
Presos no son rehabilitados ni tienen garantías de seguridad
En diálogo con Infobae Perú, el exviceministro del Interior Ricardo Valdés afirmó que el objetivo de rehabilitar a los reos no se cumple. “A su vez, internacionalmente cumplimos ciertos parámetros con respecto a los derechos humanos, pero en la práctica, la estructura para rehabilitar a los internos es incipiente”, expresó.
Asimismo, indicó que hace años no se invierte en penales, por lo que hay problemas de infraestructura, inversión y seguridad. “Se conoce que preso que ingresa con un delito mediano, saldrá con todos los contactos y presiones para reincorporarse a la criminalidad organizada. Lo que prima en un penal hacinado es la ley de la selva”, declaró.