Luis Ángel Pinasco, quien es llamado cariñosamente ‘Rulito’, cuenta con más 60 años de trayectoria en la televisión. Tiene una familia consolidada y una vida bastante tranquila, la cual se vio sacudida por una terrible situación que vivió el emblemático conductor de TV, actor, locutor y narrador de 82 años.
En una entrevista para ‘Día D’, ‘Rulito’ Pinasco reveló que estuvo a punto de perder su pierna. Siempre al lado de su esposa y actriz Sonia Oquendo, el artista abrió su corazón para develar un temor que lo paralizó hace un tiempo.
Ante de ello, el actor ya venía sintiendo un gran dolor en la pierna, hasta el punto de empezar a usar bastón y hasta silla de ruedas. Al no saber la razón de su condición, la pareja trataba de seguir con su vida con normalidad. Incluso, se animaron a viajar al río Nilo.
Fue justamente en este viaje que Pinasco se descompensó y no pudo caminar más. Sonia Oquedo se encontraba en el barco haciendo un tour, mientras que su esposo estaba en el hotel.
Oquendo señala que de pronto recibió un mensaje de ‘Rulito’, que “paralizó su corazón”. “Decía ‘me siento mal, por favor, regresa, ven inmediatamente. No puedo respirar, no me puedo mover, creo que me está dando un infarto’”, contó la actriz, quien de inmediato se lo mostró al guía turístico.
Al entender lo que sucedía, el barco dio vuelta y regresó para que Sonia pueda auxiliar a su esposo.
′Rulito’ Pinasco casi pierde la pierna
Tras esta descompensación, ‘Rulito’ Pinasco fue llevado a un hospital de Egipto, donde permaneció por un periodo de 8 horas. La consigna era que cuando regrese a Lima, debía visitar a un cardiólogo para que pueda ver su salud.
El médico que estudió el caso de ‘Rulito’ encontró las arterias totalmente ocluidas a nivel de la arteria femoral. El doctor propuso operar al paciente. “Proceda (dijo Luis Ángel), porque si no tomaba la decisión, él tenía poco tiempo para que esta arteria se obstruyera y tuviera que ir a una amputación”, relata Sonia Oquendo.
El diagnóstico final fue ateroesclerosis, es decir que debido a las placas de colesterol acumuladas en sus arterias iliacas y femorales de su pierna derecha impedían la correcta circulación de la sangre.
La operación fue un éxito. Ahora, cuenta la pareja, Pinasco se siente mucho mejor, pero debe continuar con un constante chequeo y respectivo tratamiento.