Salomón Libman: el experimentado arquero que tiene dos carreras en su currículum y sueña con regresar a Alianza Lima como gerente o técnico

Salomón Libman nunca tuvo problemas en confesar que es hincha de Alianza Lima. De hecho, lo reconocen como uno de los referentes en la historia de los ‘blanquiazules’ por el amor que siempre mostró. El arquero estuvo cinco temporadas en Matute, y aunque tuvo noches mágicas bajo los palos del equipo, también le tocó luchar por un lugar en el once. Sobre lo segundo, el popular ‘Yuyo’ hace mea culpa y mira con ilusión su futuro en el fútbol.

El arquero de 39 años anunció su salida de Unión Comercio en mayo de este año por motivos personales, y en pleno mercado de pases, se encuentra analizando varias ofertas. Muchos pensaron que eso marcaría su retiro, sin embargo, aseguró que todavía tiene para rato, ya que esa posibilidad todavía no pasa por su cabeza. Prefiere tomarse su tiempo para escoger la mejor opción.

Estuvo cerca de volver a Matute en 2021, pero no se pudo concretar. Igual, no pierde las esperanzas de pegar la vuelta. Contó que mientras le pegaba a la pelota, se dio el tiempo de meterse entre los libros. Tiene dos carreras: estudió para ser entrenador y administrador. Esas dos profesiones podrían volver a abrirle las puertas de La Victoria.

- Te fuiste de Unión Comercio en mayo de este año, ¿cómo pasas tus días alejado del fútbol?

Entreno con un preparador físico o un preparador de arquero por la mañanas. Paso tiempo con mis hijos, los llevo al colegio, no podía hacerlo cuando estaba en provincia, era complicado. A veces tenía libre y de Tarapoto me iba a Lima, regresaba a las 5 de la mañana y me ponía entrenar a las 7. Era la única forma de poder pasar tiempo con ellos.

- ¿Qué has pensado hacer con tu futuro futbolístico? ¿Te retirarás del fútbol?

Vamos a ver qué pasa, me quiero tomar mi tiempo. Hay propuestas de algunos equipos, quiero seguir jugando. Todavía siento que puedo. Estoy metido en otros proyectos, soy entrenador con prácticas. En Cajamarca ayudaba a la reserva de UTC. También estudié Administración y Gerencia mientras jugaba fútbol, me ha servido para saber dónde invertir. Mi carrera la terminé en ocho años, pero valió la pena. El fútbol es mi prioridad, pero el estudio es un respaldo.

- ¿Por qué no llegaste a Alianza Lima cuando iba a jugar la Liga2?

Esa oportunidad de volver fue la más concreta, me mandaron el contrato, pero recién había firmado con UTC, no me dejaron ir. Había una cláusula que impedía mi salida, si lo rompía me generaba un problema. Sé que regresar ahora es cada vez es más difícil por la edad y porque tiene a buenos arqueros. Hice de todo para volver, pero no se dio.

- ¿Crees que en algún momento volverás a Matute?

Siento que en algún momento volveré, si no es como jugador, será como entrenador o gerente, eso es lo que estudié. Me quedé con las ganas de no haber salido campeón con Alianza. El hincha me quiere, siente una identificación. Incluso, hay un cierto respeto por parte de los hinchas de Universitario.

- Siempre se habló de una rivalidad con George Forsyth cuando estaban en La Victoria...

Empezamos teniendo una relación buena, normal. Fuimos amigos al inicio, la competencia entre nosotros terminó por enfrentarnos. Ambos cometimos errores, pero tenemos que resolverlo porque ya estamos grandes.

- ¿Y qué pasó con Gustavo Costas?

Le reclamé porque me había sentado del equipo sin haber hecho algo. No entendí la razón. Ahí cambió un poco el trato, me ponía en el torneo local y George la Copa, después fuimos alternando. Luego me pidió disculpas y me puso en varios partidos, y ahí me llamaron por primera vez a la selección peruana. Me dolió no tapar en los octavos de final de la Copa Libertadores.

- A inicios de año eras uno de los refuerzos de Sport Boys, pero nunca lo hicieron oficial, ¿qué pasó?

Hubo el tema de Boys que estuvo muy cerca este año, era mucho menos de lo que ganaba en Unión Comercio, y no me importaba porque quería una tranquilidad familiar. Decidí rescindir porque no era un buen lugar para estar, por el tema logístico, las canchas de entrenamiento, esas cosas. Ya me había pasado en otros equipos, y al final uno se queda solo. No quería eso para mí.

- Hubo una posibilidad de emigrar a Israel...

Se presentó una posibilidad de irme a Israel, pero no se concretó, fue en 2017. Me hubiera gustado salir y también porque era buena propuesta económica. Era una buena oportunidad y me quedé en Perú.

- ¿Un técnico que te haya marcado en tu carrera?

Tuve a varios que me dirigieron. He tenido a Jorge Sampaoli, Paulo Autuori por cuatro meses. Ricardo Gareca también fue importante en la selección peruana. Franco Navarro, es difícil tener un técnico que no tenga manejo de equipo, puede saber mucho, pero si no tiene eso, es difícil. Pepe Soto también me marcó.

- ¿También tuviste problemas con Ángel Comizzo?

Había un mal ambiente en Vallejo y eso provocó el descenso. No nos iba bien a pesar de tener un buen equipo. La relación con Ángelo Comizzo se fue deteriorando. Ese momento me alejó de la selección peruana, perdí presencia.

- ¿Un momento que te costó superar?

Fue cuando falleció mi papá en 2014, estaba en César Vallejo. Mi mamá hizo que regresara a jugar porque a los pocos días tenía un partido. Viajé a Trujillo y jugué, me costó mucho porque vivía solo, mi familia estaba en Lima. Mi papá quería que juegue, y por eso lo hice. Siempre le gustó que juegue en Primera División.

- ¿Qué arquero fue tu referente dentro de tu carrera?

Tengo a varios, están Óscar Ibáñez, Jacinto Rodríguez, ‘Pancho’ Pizarro; los veía entrenando cuando estaba pequeño y fue un lujo compartir con ellos algunos momentos durante mi formación. Los veía de lejos.

- Sport Boys: 2002-2008

- Alianza Lima: 2008-2012

- César Vallejo: 2013-2016

- Sport Rosario: 2017-2018

- Melgar: 2018

- Sport Huancayo: 2019

- UTC: 2010-2022

- Unión Comercio: 2023