Dina Boluarte: Premier y ministra de Cultura justifican despidos intempestivos en TV Perú

El jefe de Gabinete, Alberto Otárola, y la ministra de Cultura, Ninoska Chandia, justificaron este viernes los despidos intempestivos de al menos siete periodistas de TV Perú, incluida una reportera que en abril pasado incomodó a la presidenta Dina Boluarte con una interrogante sobre el informe de Human Rights Watch, que halló “ejecuciones extrajudiciales” en las protestas antigubernamentales.

El director ejecutivo del Consejo de la Prensa Peruana (CPP), Rodrigo Salazar, refirió que se trata de la mayor cifra de cesantías desde la gestión de Ninoska Chandía, exrelacionista pública de Boluarte y presidenta del Instituto Nacional de Radio y Televisión del Perú (IRTP).

Fue una declaración escueta en comparación a la emitida por la titular de Cultura, Leslie Urteaga, quien avaló los cambios —la mayoría de los cuales no fueron avisados— y ratificó su respaldo a Chandia, acusada de evitar voces críticas al Gobierno con la no renovación de las órdenes de servicio.

“Eso es un tema de gestión de los organismos adscritos, al igual que no lo hago con la Biblioteca Nacional ni el Archivo General de la Nación”, indicó después de descartar que su despacho reevalúe la decisión.

Urteaga comentó que, como se trata de puestos de confianza, al igual que el de los ministros, los cambios acarrean una mejorar para el medio del Estado. “Los profesionales somos muy buenos, seguramente. Pero hay mejores y siempre es bueno tener esa mirada de la mejora, tener cambios para bien, para mejor [...] Que tengamos un corte de orden de servicio está dentro del marco legal y normativo”, siguió.

“Lo alarmante [en dos casos] es que contaban con el respaldo de la gerencia de prensa, pero sus órdenes de servicio no fueron firmadas por las esferas más altas. Esto no solo es una total falta del respeto a la dignidad del trabajador, sino que motiva la autocensura. Imagina a alguien con cierta presión financiera, es totalmente natural sentir temor”, dijo el directivo.

También instó a una reforma enfocada en “garantizar la absoluta independencia y autonomía respecto de los poderes políticos”.

“El Congreso también limita el acceso a la prensa, por lo que podemos decir que hay un asedio constante y absoluto contra el periodismo en este país. El Parlamento debería llamar a la ministra Urteaga, pero sabemos que hay un contubernio entre el Legislativo y Ejecutivo”, opinó.

“La ANP rechaza que el IRTP, de manera fraudulenta, recurra a la figura de no renovación de contratos para poner fin a relaciones laborales en las que se rige la primacía de la realidad. [...] Denunciamos la continua desnaturalización de las relaciones laborales que realizan instituciones del Estado, y que, en situaciones en las que se registran serias afectaciones a la independencia del canal estatal, son utilizadas para legitimar evidentes represalias al trabajo de periodistas que resultas incómodos”, se lee en un comunicado del gremio.