“Es por venganza”: Edgar Tello sobre acusaciones por presunto recorte de sueldo y hostigamiento a trabajadoras

Ex empleadas denunciaron que el parlamentario solicitaba inicialmente el 5% del sueldo y que el porcentaje iba aumentando gradualmente. Ante la negativa, una de ellas fue impedida de ir al baño o comer sin permiso.

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Legislador negó los graves hechos
Legislador negó los graves hechos y se mostró a favor de las investigaciones.

El congresista Edgar Tello (Bloque Magisterial) se sumó a la lista de parlamentarios acusados de ‘mocha sueldos’. Sobre ello, aseguró que las denuncias en su contra están motivadas por trabajadores que no obtuvieron lo que deseaban.

“A veces uno actúa de buena fe, pero otros lo hacen por venganza. No le sale lo que pretenden hacer y actúan así. Que continúen las investigaciones y allí se señalarán las responsabilidades”, dijo en entrevista con RPP.

“Considero que porque no logró ese deseo de nombramiento en el Legislativo, echó barro con ventilador de cosas para que le hagan caso. Eso indudablemente es una mala práctica y le deseo éxitos a las personas”, agregó.

Aunque son dos las trabajadoras que lo acusan de recortar su sueldo, el izquierdista se refiere en especial al testimonio de Marie Silva Uriarte, quien se encuentra en estado de gestación y denunció amenazas al momento de hacerlo público.

Trabajadora cuenta con ocho meses
Trabajadora cuenta con ocho meses de gestación.

Según declaró, el legislador del Bloque Magisterial le solicitó que, del bono que recibieron, compre un proyector valorizado en 4 mil 600 soles, además de cocinas para ollas comunes. Ante su negativa, la bajaron del cargo que ocupaba, pues pasó de asesora a auxiliar, y comenzaron las represalias. “Se me prohibió ir a los servicios higiénicos”, reveló.

“Yo le dije ¿esto es una broma? (Pero él) me dijo, cómo va a ser una broma. Ahora que estás con el bono no tienes justificación para que puedas apoyarme con este proyector”, relató la excolaboradora congresal.

Lo más grave del caso, es que el Departamento de Recursos Humanos del Parlamento estaba al tanto. Según contó Silva Uriarte, envió tres oficios alertando del hecho, pero no hubo respuesta. Asimismo, ante la invitación por parte del titular del Parlamento para denunciar estos hechos, acudió a él, pero no fue recibida.

“El presidente del Congreso nos dio esa seguridad de que cuando haya este tipo de denuncias, nosotros podamos recurrir a su despacho. Ya lo hice. Di el primer paso. Estoy ad portas de dar a luz, ¿qué va a pasar conmigo y mi situación?”, lamentó.

Aunque el titular del Parlamento
Aunque el titular del Parlamento condenó los casos de recorte de sueldo, no recibió a la trabajadora.

Además de los chats de WhatsApp, la extrabajadora adelantó que hay otros dos empleados que pueden confirmar que el también titular de la Comisión de Comercio Exterior y Turismo solicita una “colaboración” para la adquisición de ollas, cocinas y cucharones.

“La hacía de manera grupal cuando nos reuníamos. No solamente a mí, sino con todo el personal de la comisión. Manifestaba que tenía gastos; es más, lo reiteraba siempre e inclusive se tomaba como una amenaza, porque decía que tenía compromisos, como dando a entender que agradeciéramos por trabajar ahí porque había muchas personas que estaban por nuestros puestos”, aseveró.

El pedido también lo realizaba fuera de los fueros parlamentarios. De acuerdo al dominical Punto Final, el legislador solicitó a la embajada de Taipei en Perú la entrega de 8 mil dólares, pese a que el artículo 7 del Código de Ética del Congreso señala que los congresistas no pueden recibir donaciones.

“Voy a pedir garantías [para] mi vida, porque el congresista tiene muchas personas a su entorno que dan la cara por él, porque los engaña al decirles que regresarán a trabajar con él, pues cada cuatro meses cambia de personas. Como viven con esa esperanza de poder regresar, han llegado amenazas”, sentenció la denunciante.

Pese a las pruebas, el
Pese a las pruebas, el izquierdista niega los hechos.

Otros cuestionamientos

Además de lo comentado, el parlamentario también es blanco de críticas por presuntamente haber contratado a un familiar de su esposa, Sonia Suárez, y por haber pedido dinero para comprar el boleto de su cónyuge a Alemania. Un chat entre Suárez y una trabajadora del despacho de Tello evidenció el cobro.

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