Avalancha en el Huascarán: autoridades reportan nuevos deslizamientos en el nevado

Los pobladores de la localidad de Yungay, ubicado en la region Áncash, están alertas luego de que una gigantesca avalancha se produjera la tarde del martes 20 de junio en el pico norte del nevado Huascarán, ubicado a más de seis mil metros sobre el nivel del mar.

Según voceros del COER, en total se habrían registrado dos desprendimientos en el Huascarán este viernes 23 de junio: uno a las 12:50 horas, de masa glaciar (hielo y nieve); y otro, de las mismas características, pero a las 14:30. Por fortuna, ninguno de ellos llegó hasta la zona de las viviendas. Sin embargo, el temor de las personas que viven cerca al nevado se puso de manifiesto al recordar el terremoto de Yungay, un desastre que marcó al Perú para siempre y dejó a una ciudad sepultada.

El temor nuevamente se apoderó de los habitantes de esta localidad ubicada en la sierra del país tras las nuevas avalanchas en el pico norte del nevado. A través de sus redes sociales, el Centro de Operaciones de Emergencia Regional (COER Áncash) informó a la opinión pública sobre las nuevas avalanchas.

En diálogo con RPP Noticias, la encargada del Centro de Operaciones de Emergencia Regional de Áncash, Lady Mejía, sostuvo que este fenómeno natural “es propio de la temporada, pero de todos modos hay que estar alertas”.

Respecto a las actividades turísticas y expediciones, hace unos días el titular de la Dirección Regional de Turismo (Dircetur), Fernando Zevallos, declaró a Andina sobre la suspensión de viajes.

“El sistema regional de defensa civil, tras conocer las avalanchas, se activó de manera permanente, por tal motivo se ha suspendido los viajes de los turistas al Huascarán”, declaró al medio de comunicacion local.

En otro apartado del comunicado del COER Áncash, se recomienda a la población mantener la calma, estar alertas ante cualquier eventualidad y reconocer sus rutas de evacuación. De esta manera se evitarían heridos y muertes.

Cabe recordar que el movimiento telúrico del 31 de mayo de 1970 en Yungay dejó un saldo de 70.000 muertos, 20.000 desaparecidos,157.245 heridos y 186.000 damnificados. Solo lograron sobrevivir 92 yungaínos. Así lo dio a conocer el Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci).

A través de sus redes sociales, Patricio Valderrama, exjefe del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología del Perú (Senamhi), afirmó que las redes sociales habían explotado con la noticia de la avalancha y dijo que había un nerviosismo justificado en la población, sobre todo de Ranrahirca y Yungay, pero aclaró algunos puntos.

“Esta avalancha, y hay que decirlo tajantemente, no representa ningún peligro para la población ni para la vida de personas, animales, granjas, infraestructura u obras que se estén desarrollando en esa zona. Es un fenómeno completamente natural y de proporciones pequeñas. No ha sido una masa de hielo muy grande la que se ha desprendido”, indicó.