Luego de que dos avalanchas en el pico norte del nevado Huascarán, ubicado a más de seis mil metros sobre el nivel del mar, provocaran temor entre la población de Yungay, las autoridades han llamado a la calma y descartaron que se produzca nuevos deslizamientos.
El Centro de Operaciones de Emergencia Provincial (COEP) de Yungay, Áncash, descartó que se haya producido un nuevo deslizamiento glaciar y exhortó a la población a no dejarse llevar por información que circula en redes sociales y que no es difundida por las entidades oficiales.
“Se está difundiendo información falsa por distintos medios sobre más caídas de hielo y nieve del nevado Huascarán”, alertó la plataforma, a través de un comunicado.
Esto después de que este martes 20 se reportasen dos avalanchas, que fueron captadas por pobladores del distrito de Ranrahirca, en localidad de Yungay.
Voceros del COER detallaron que fueron dos desprendimientos en el Huascarán: uno a las 12:50 horas, de masa glaciar (hielo y nieve), y otro de las mismas características, pero a las 14:30. Se aclaró que ninguno de ellos llegó hasta la zona de las viviendas.
Por lo que desde ayer personal de Defensa Civil está evaluando posibles daños a canales de riego y comunidades de Yungay. Por fortuna, hasta el momento se confirma que no hay daños a la vida y la salud de las personas producto de la emergencia.
Pedido de un sistema de alerta comunitaria
Marina Bustamante, jefa de la Oficina de Defensa Nacional del Gobierno Regional de Áncash, dio a conocer que se ha solicitado a la Municipalidad Provincial de Yungay, implementar un sistema de alerta temprana comunitaria.
“Este sistema debe dar cuenta a las comunidades cada vez que haya el peligro de un nuevo desprendimiento, a fin de que la población pueda evacuar a las zonas seguras que previamente hayan sido definidas y socializadas”, expresó la funcionaria.
También precisó que han desplazado personal en la zona a fin de que puedan advertir sobre posibles nuevos deslizamientos, por lo que instó a los vecinos a mantener la calma. “Estamos en un monitoreo constante y recibiendo reportes del personal que está en el lugar”, señaló.
Miedo justificado
Patricio Valderrama, exjefe del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología del Perú (Senamhi) explicó que había un nerviosismo justificado en la población, sobre todo de Ranrahirca y Yungay, pero enfatizó en que no hay peligro para los ciudadanos o sus viviendas.
“Esta avalancha, y hay que decirlo tajantemente, no representa ningún peligro para la población ni para la vida de personas, animales, granjas, infraestructura u obras que se estén desarrollando en esa zona. Es un fenómeno completamente natural y de proporciones pequeña. No ha sido una masa de hielo muy grande la que se ha desprendido”, detalló
Asimismo, Valderrama recordó que esta misma zona ocurrió uno de los desprendimientos de roca y hielo más trágicos del nevado Huascarán, productor del terremoto de 1970. “Aquella vez fue una mega avalancha enorme. El bloque desprendido en ese año debió haber sido mil veces más grande que el bloquecito que se desprendió ahora”, aseveró.
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