Una gigantesca avalancha se produjo la tarde del martes 20 de junio en el pico norte del nevado Huascarán, ubicado a más de seis mil metros sobre el nivel del mar, en la región Áncash. La impresionante escena fue captada por pobladores del distrito de Ranrahirca, en localidad de Yungay, quienes entraron en pánico al temer lo peor.
Esto fue confirmado posteriormente por el Centro de Operaciones de Emergencia Regional (COER) de esa región. Se precisó que, hasta el momento, no se han reportado heridos ni pérdidas materiales, pero se exhortó a la ciudadanía a permanecer alerta ante una posible “evolución de la emergencia”.
Trascendió que el personal de la Oficina Regional de Defensa Civil se dirigió a la zona para recabar más información, al igual que la Unidad de Glaciares de Áncash. El personal especializado viene analizando el hecho, pero mantienen su pedido a la poblacion de mantener la calma ante todo.
Según voceros del COER, en total se habrían registrado dos desprendimientos en el Huascarán: uno a las 12:50 horas, de masa glaciar (hielo y nieve), y otro de las mismas características, pero a las 14:30. Se aclaró que ninguno de ellos llegó hasta la zona de las viviendas.
“El COER - Áncash recomienda a la población a mantener la calma, y estar alertas ante cualquier eventualidad. Asimismo, reconocer sus rutas de evacuación”, detalló la institución.
En videos publicados en redes sociales se aprecia la fuerza de la avalancha y la desesperación de los pobladores que atónitos grabaron el hecho con la cámara de su celular. “¡Está fuerte, ah!”, “¡Ay, Dios mío!” y “el Huascarán se viene”, son alguna de las frases que se oyen en los clips.
En otras imágenes grabadas desde el interior de un colegio de la zona muestran el pánico que el desprendimiento ocasionó en los alumnos y profesores. En medio de los gritos y alboroto, se escucha la palabra “evacuación”.
A través de sus redes sociales, Patricio Valderrama, exjefe del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología del Perú (Senamhi), afirmó que las redes sociales habían explotado con la noticia de la avalancha y dijo que había un nerviosismo justificado en la población, sobre todo de Ranrahirca y Yungay, pero aclaró algunos puntos.
“Esta avalancha, y hay que decirlo tajantemente, no representa ningún peligro para la población ni para la vida de personas, animales, granjas, infraestructura u obras que se estén desarrollando en esa zona. Es un fenómeno completamente natural y de proporciones pequeña. No ha sido una masa de hielo muy grande la que se ha desprendido”, indicó.
Asimismo, Valderrama recordó que esta misma zona ocurrió uno de los desprendimientos de roca y hielo más trágicos del nevado Huascarán, productor del terremoto de 1970. “Aquella vez fue una mega avalancha enorme. El bloque desprendido en ese año debió haber sido mil veces más grande que el bloquecito que se desprendió ahora”, aseveró.
Reiteró su llamado a la calma y pidió a la ciudadanía no dejarse sorprender por noticias falsas. “Ya pasó, afortunadamente no ocurrió ningún daño y no tiene porqué afectar la vida, la salud ni la dinámicas de las comunidades”, agregó.