El acoso sexual en el transporte público es un delito penado con entre dos y 15 años de cárcel. Según el Ministerio de Transportes y Comunicaciones, siete de cada diez mujeres que usan el transporte público son víctimas de acoso sexual. De las cuales, seis de cada diez ha pasado este traumático momento entre los 13 y 18 años de edad. Pero no hay edad ni sexo para ser víctima de esta vulneración a nuestros derechos.
Infobae Perú recogió varios testimonios de mujeres que sufrieron de acoso sexual en el transporte público.
“Estaba en un transporte público demasiado lleno yendo a mi casa. Todos los pasajeros íbamos parados y bien pegaditos. Yo estaba cerca a un joven de aproximadamente 30 años. Iba agarrada en los colgadores del bus mirando hacia la ventana. El chico se puso detrás de mí, pensé que era porque no había espacio, pero pasó varios minutos y empezó a tocar mi trasero. Volteé nerviosa y asustada, entonces intenté alejarme, pero el chico se acercaba más. Traté escapar, pero el bus estaba lleno. Logré alejarme un poco, pero no me di cuenta porque estaba muy cansada. De pronto, estaba delante de mí y también me tocó la parte delantera de mi cuerpo. Me asusté y no me importó si había mucha gente, me fui hasta el fondo del bus”, contó Luz Tineo, de 20 años y estudiante de farmacia.
“Iba en el carro media dormida, se sentó a mi lado un señor mayor, estaba con un periódico y se puso a leer. Entonces, siento que me tocan la pierna, pensé por un momento que estaba soñando, pero me desperté y me di cuenta de que el señor había tapado con el periódico su mano para tocarme la pierna. Reaccioné y le dije de todo, pero él lo negó, me dijo que era una loca y que si no quiero que me rocen, entonces que me vaya en taxi. Nadie se levantó a ayudarme, me quedé sola, no hubo apoyo de nadie”, recordó la diseñadora de modas Liz Barahona, de 35 años.
“Subí al bus, me senté en el único asiento vacío que daba al pasillo. A tres o cuadras más adelante subió un hombre de aproximadamente 40 años. El bus no estaba lleno, pero ya no había asientos. Él se paró junto a mí y poco a poco fue acercándose y pegando sus partes íntimas a mi brazo. Yo solo me arrimaba hacia el joven que estaba sentado al lado de la ventana. Me quedé callada, solo sentía vergüenza y miedo. No atiné a reclamar ni quejarme. Minutos después bajaron varios pasajeros y el cobrador le indicó al sujeto que se sentara y así lo hizo. En ese momento, por fin, respiré”, rememoro yo, Liz Saldaña, la periodista que escribe esta nota.
¿Qué hacer si te acosan en el transporte público?
Los tres testimonios tienen en común, que ninguna de nosotras denunció el hecho. Todo lo contrario, callamos por vergüenza y miedo. También por qué no hemos interiorizado que este comportamiento es un delito que puede ser sancionado con cárcel. No solo eso. Existe un protocolo ante actos de acosos sexual en el transporte público que todos debemos conocer y aplicar cuando somos víctimas de estos repudiables actos.
Valeria Hobispo, especialista de la Dirección de Políticas y Normas en Transporte del Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC), conversó con Infobae Perú, y nos explicó cuáles son los pasos para denunciar.
¿Cuál es el número de casos de acoso sexual en el transporte público?
Con los estudios que hemos estado haciendo con la cooperación alemana GZ, tenemos identificado que la situación de acoso en el transporte es fuerte: 7 de cada 10 mujeres que han hecho los cuestionarios precisan que han sido víctimas de acoso y 6 de cada 10 dice que este acoso ha sido en el intervalo de 13 a 18 años. Lamentablemente, no solo es la mujer adulta, sino también los niños, niñas y adolescentes (son víctimas de acoso).
¿Las niñas son las más acosadas?
En realidad, si bien es cierto que la campaña (contra el acoso sexual) inicia con un enfoque de género, porque finalmente la mujer es quien está más vulnerable ante estos delitos. Actualmente, el Ministerio de Transporte también está concientizanado al público en general. Recibimos consultas sobre los hombres y niños acosados. Efectivamente, el público masculino también se ve afectado. Pero queremos concientizar de que si bien es cierto el índice de acoso es alto en la mujer, no debemos olvidarnos que los menores, sin importar el género, también pueden ser víctimas de este delito.
¿Cuáles son las modalidades de acoso que son sancionadas en el transporte público?
El protocolo ante casos de acoso sexual indica que son de tres formas: física, verbal o gestual. Cuando es físico es conocido por los tocamientos indebidos o roses; los verbales son los que tienen contenido sexual. Y los gestuales donde el acosador puede hacer gestos o señas que incomodan a la víctima. Todas estas modalidades deben tener contenido sexual para ser sancionadas.
¿Cómo hago la denuncia si soy víctima o testigo?
El protocolo de denuncia se activa con la queja de la víctima o del testigo. La víctima pasa la experiencia de acoso y tiene que avisar al conductor. Esa figura es importante en este procedimiento porque él es quien tiene que informar a los pasajeros sobre la denuncia para detener al vehículo. Y aunque la gente se queje, deben atender la denuncia de la víctima. Tiene que estacionar el vehículo, llamar al 105 y comunicar a la Policía Nacional de lo que está sucediendo, pero si en el trayecto vemos a un inspector de la ATU o un serenazgo se puede acudir al apoyo de esas autoridades para que puedan recoger a la víctima y dirigir al detenido a la comisaría para que se formule la denuncia. Estando en la comisaría, la víctima tiene que formular la denuncia, pero con la denuncia no acaba el procedimiento. En las comisarías están el Centro de Emergencia Mujer, que les brinda la asistencia legal y psicológica a la víctima para hacerle seguimiento y continuidad de la denuncia.
¿La víctima tiene que presentar pruebas del acoso o basta con su palabra?
(Hay que tener pruebas) de todas maneras. Yo me pongo en el lugar de la víctima porque yo también he sido acosada. A veces la víctima está en estado de shock y no generas pruebas, lo único que quiere es quejarse de lo que está pasando.
Por eso, es importante la participación del testigo y el protocolo de atención lo indica. Si el pasajero es testigo de estos actos, debemos actuar solidariamente. Nosotros como testigos tenemos que generar la prueba y siempre exhortamos de que si la víctima no denuncia, lo haga el testigo. Y si puede acompañar un testigo a la víctima a formular la denuncia sería mejor porque su testimonio va a fortalecer la declaración de la víctima.
Como pasó en el Metropolitano, en abril de este año. Una chica estaba sentada, un hombre se acerca a ella, le muestra su miembro, la joven se horroriza y se quedó en estado de shock. Los pasajeros actuaron, aprendieron al agresor, informaron al conductor, quien paró en una estación del Metropolitano cerca a la comisaria del Alfonso Ugarte. Uno de los pasajeros dirigió al agresor con un inspector de la ATU, y este último lo llevó a la comisaría. La víctima solo estuvo sentada, asustada, pero tuvo apoyo de los pasajeros. Si bien es cierto, el protocolo protege a la víctima, pero también debemos concientizar a la población que nosotros tenemos que involucrarnos y no ser indiferentes.
¿Dónde se presentan más casos de acoso, en el Metropolitano, el Transporte Urbano Común o en el Tren?
De las denuncias recibidas es en el transporte urbano común, pero reitero el tema de los testigos, la paciencia de los pasajeros es importante, deben ser solidarios. A veces la gente puede decir: arranca, apúrate. Tenemos que recordar que la víctima puede ser tu hermana, tu mamá o tu tía. Tenemos que comprometernos. Este protocolo aplica a toda unidad vehicular, lo que el MTC quiere impulsar y promover un servicio de transporte público confiable.
Si este caso sucede en un auto colectivo informal, ¿igual puedes denunciar?
Claro que sí, no se está sancionando la formalidad o informalidad del vehículo, se sanciona el delito porque el acoso es un delito y está tipificado en el código penal. Por eso, venimos informando sobre las sanciones que se le puede aplicar al agresor, que puede ser de 2 a 15 años y dependerá mucho de lo que ocurrió, de la modalidad de acoso y los antecedentes del agresor. Por eso es importante la denuncia porque ayudará a tener una base de datos a la Policía al momento de trasladar la denuncia a la Fiscalía.