Receta de sopa a la minuta peruana: ingredientes y preparación paso a paso

Además de su inigualable sabor y propiedades reconfortantes, la sopa a la minuta también destaca por su valor nutritivo. Este plato es una fuente de nutrientes esenciales que contribuyen al bienestar general de nuestro organismo. La combinación de carne, vegetales y especias crea una sinfonía de sabores y aromas que deleitan nuestros sentidos y nos transportan a esos momentos especiales en los que, incluso estando enfermos, encontrábamos consuelo en un tazón humeante de esta delicia casera.

En cuanto a los ingredientes, la receta básica de la sopa a la minuta incluye carne de res tierna y jugosa, cortada en trozos pequeños que se cocinan lentamente en un caldo aromático. Puedes optar por utilizar diferentes cortes de carne, como el solomillo, el lomo o la falda, dependiendo de tus preferencias y disponibilidad.

La versatilidad de la sopa a la minuta también es digna de destacar. Puedes personalizarla según tus gustos y necesidades. Si deseas añadir un toque picante, puedes incorporar una pizca de chile o salsa de ají. Si prefieres darle un toque cremoso, puedes agregar un poco de leche o nata al final de la cocción. Potencia su sabor con diferentes hierbas y especias, como el perejil fresco, el tomillo o el comino.

La preparación de esta sopa es relativamente sencilla y no requiere de habilidades culinarias avanzadas. Con unos simples pasos, podrás disfrutar de un plato casero reconfortante y delicioso. Desde cortar los ingredientes hasta dejar que la sopa hierva a fuego lento, cada etapa del proceso es un ritual que nos conecta con nuestras raíces y nos permite crear momentos de placer en la cocina.

¿Sabías que es un legado familiar? Es una tradición que trasciende generaciones y que nos brinda consuelo en los momentos más difíciles. Ya sea para aliviar un resfriado, satisfacer un antojo o simplemente disfrutar de un plato reconfortante, esta sopa siempre será una elección acertada.

Esta receta rinde aproximadamente 4 porciones, así que asegúrate de ajustar las cantidades de ingredientes según tus necesidades y preferencias.

• Una cantidad de 300 gramos de carne de res molida.
• Dos papas amarillas, cortadas en trozos.
• Un tomate, picado en cubitos y sin cáscara ni semillas.
• Media cebolla, picada en cubitos.
• Una cucharada y media de pasta de tomate.
• Una cucharada de ají amarillo molido.
• Un litro de caldo de carne.
• Cien gramos de fideos tipo cabello de ángel.
• Dos hojas de laurel.
• Dos cucharadas de aceite vegetal.
• Sal al gusto.
• Pimienta al gusto.
• Comino al gusto.
• Orégano al gusto.

• En una olla grande, coloca el aceite vegetal y caliéntalo a fuego medio. Cuando esté caliente, agrega la carne de res molida y sazónala con sal, pimienta y comino al gusto. Revuelve constantemente hasta que la carne cambie de color y se cocine por completo.
• Agrega la cebolla picada a la olla y continúa cocinando hasta que se vuelva traslúcida y suave. Luego, añade el tomate picado, la pasta de tomate, el ají amarillo molido y las hojas de laurel. Mezcla bien todos los ingredientes para combinar los sabores.
• Vierte el caldo de carne en la olla y revuelve para que se mezcle con la carne y las verduras. Cubre la olla con una tapa y deja que la sopa hierva a fuego medio durante unos minutos.
• Añade las papas amarillas cortadas en trozos a la olla y continúa cocinando hasta que estén tiernas. Si lo deseas, también puedes agregar dos huevos a la sopa y remover suavemente para que se cocinen en el caldo.
• Agrega los fideos cabello de ángel a la olla y cocina durante 3 a 5 minutos adicionales, o hasta que estén al dente. Ajusta el tiempo de cocción según tus preferencias personales.
• Por último, incorpora el orégano al gusto y verifica el sazón de la sopa. Añade más sal, pimienta o especias si es necesario.
• Sirve la Sopa a la Minuta caliente y disfrútala enseguida. Puedes acompañarla con pan crujiente o agregarle un toque de queso rallado por encima para realzar su sabor.

Si deseas reducir la cantidad de grasa en la sopa, puedes utilizar el truco de la cuchara sopera fría. Coloca una cuchara previamente enfriada en el congelador o en agua fría sobre la superficie de la sopa. La grasa se adherirá a la cuchara, lo que te permitirá retirarla fácilmente antes de servir.